Hay
mucho contingente por ahí, pero hace falta alguien como Elvira Lindo, como
decían en Amanece que no es poco, en estos tiempos en que como decía Baltasar Gracián
son tontos todos los que lo parecen y la mitad de los que no lo parecen. Elvira
Lindo quería haber sido la sensata, la seria, pero su madre la presentaba
"esta es nuestra alegría." Dio un monologo "una mujer
inconveniente." Ahora recibe el premio Ja. Imitaba a Cristóbal Colon y
sabían todas que habían empezado las navidades, imitaba a Cela y a Rafael. Fue
a ver a la virgen de Fátima de Portugal y se le apareció. Le dijo Hazme
inmensamente rica, y lo ha conseguido. Copiaba en los exámenes y nunca le han
pillado. Era la niña más pequeña de su colegio, en el charco donde meaba se le
volvió a aparecer la virgen. Yo aviste ovnis. fui al entierro de Nino bravo,
eso por presumir. Con los años ha perdido todos sus poderes. Para ella es un
premio de consolación, muchas gracias. Salía con Fernando Delgado en A vivir
que son dos días. Ahora que todos escriben sobre su familia ella no iba a ser
menos, lo hace desde una perspectiva de niña, con diferentes edades. Ha vuelto
a cantar, ha empezado a dibujar, hace cosas como de extra escolares que le da estrés
como de niña. Si hubiera recibido una educación más artística habría llegado
más lejos aún, por eso no le gusta que se quiten las disciplinas humorísticas.
Se podía dedicar al espectáculo, lo cuenta en 30 maneras de quitarse el
sombrero, ya hace de actriz en su casa escribiendo. Un papel pequeño, que no ejercitara
demasiado la memoria, está abierta a posibilidades. mira, casualmente Fernando
Trueba, bromea. Fue a ver Black el payaso, una zarzuela, un circo antiguo donde
salía la mujer barbuda, el sapo, el príncipe. Un montaje de Mario Gas. Le
impresiona mucho la cuarta pared. Se vistió de payasa, era mágico, veía el espectáculo
circense. Quisiera leer música, tiene buen oído y los músicos le van abrazando
con los instrumentos.
Cuando hacen tesis sobre Manolito Gafotas hay gente que
se pone a llorar porque fue muy importante para ella. Era un personaje para
todos los públicos. Quieren reinventar eso ahora en las series. Tenía
apariencia muy infantil, inocentona y otra que podían leer los padres. La madre
de Txani Rodríguez paraba de hacer la colada para escucharla. Es un retrato sociológico
estupendo, sí alguien quiere saber cómo eran las clases bajas de Madrid, o de
cualquier parte de España. Habrá una narrativa extensa, muchas novelas sociales
pero Manolito es un documento esencial. Se sacaron muchos libros locales, costumbristas.
En aquella época de relumbrón como los 90 una novela que retratara las clases
bajas eran cutre. Ahora se lleva la novela social, todo el mundo está
ideologizado. Su familia era de clase media baja, su padre era de clase alta
comparado con los padres de sus compañeros de escuela. Ahora esos libros servirían,
le faltan los aparatos tecnológicos de ahora. han vendido 500 mil ejemplares en
china. No se han vendido, se han leído. Se convirtió en un libro muy popular
como El pequeño Nicolás. Ha tenido más problemas en lugares muy desarrollados
con mucha corrupción política, como EEUU. En Irán le dijeron directamente que
no tenían libros de humor. En EEUU ha tenido muchos problemas, no quería publicar
allí. Los personajes tienen tanta ternura e inteligencia que los lectores lo
entendieron muy bien. Hay familias que llaman a sus hijos, ahí está tu hermano
el imbécil, imitando la novela. Tiene una mente muy hiperactiva, y tiene un
mundo muy amplio de amigos, y piensa que va a ser de esa gente sí hay una nueva
recesión económica. Desde niña ha preguntado mucho, como una niña insolente,
mira muy fijamente.
Le ha servido mucho el contacto con gente más joven. Mucha
gente mayor tiene una visión apocalíptica, todo está mal, la gente habla mal,
es maleducada, viste mal. A ese carro no se sube porque no se lo cree. En su
caso le gusta tener relación con personas de todas las edades. Trabajó en la
radio con 19 años. En el programa de Juan Carlos Ortega vieron a Manolito,
diciendo que ya estaba cansado el personaje de tanta fama. Quiere hacer un
libro estando él en la universidad. Él maneja a su personaje como quiere. Es
bonito y raro un matrimonio en la cama leyendo el quijote. Ahora se da cuenta
de lo cervantina que es, todo el libro está impregnado de humor. Escribiendo el
segundo manolito estaba leyendo a Proust y la última frase del libro está
plagiada del libro, porque estaba seducida de esa forma de escribir. Lo copio.
Cuando hizo el guión de una película, la primera noche de mi vida, un rodaje de
su vida, estaba leyendo Romeo y Julieta. Adriana Ozores y Antonia San Juan actúan
en la película. ¿cómo se pueden enamorar tan pronto Romeo y Julieta? Una
persona por la que vas a vivir y sí hace falta vas a morir. Le gusta trasladar
cosas que lee a espacios interiores, y no es plagio, a lugares totalmente
inapropiados, homenajes privados. Es más cómica en privado, eso no la hace
insoportable. Esto solo le hace gracia a mi marido.
Elvira Lindo es una persona
que siempre le pasan cosas, las apunta en el ordenador. Quiere escribir un
libro que se llama cosas de poca importancia, es ir por la vida con los ojos un
poco abiertas. Ese día subió a la corsetería, ese mundo que le encanta de
batas, y vio a un hombre grande trajeado de espaldas tocando un sujetador y le
dice la chica, quiero el conjunto, con la perla, la marca ¿la perla?, no había
un hombre que tocara tanto las bragas, le dedicara tanto tiempo, estabas viendo
toda la sensualidad. sí negro, a ella le gusta negro. Y es que era negro. Eso
lo escribe y lo pone en esa carpeta. En las tiendas de Madrid, en las
pescaderías, hay mucha sociabilidad. En Cádiz hay mucho humor. Madrid es más áspero.
Las ciudades más grandes son más ásperas, son más grandes. Sí que sigue
habiendo algo zarzuelero. Siempre ha tenido mucho acento, cuando trabajo en la
radio lo fue puliendo. Escribía muchos esketzes. Trabajó en una radio en la
calle ayala, en pleno barrio de salamanca. Cuando estaba en paro siempre iba a
buenas cafeterías. Tenía un personaje mono será, que era exactamente igual a
Rosario Monasterio. Le aburre la gente que se ofende por tonterías, hay que
tener manga ancha, o la gente que cree que el humor es la grosería. Le rechina
ese tipo de humor "me va a hacer una mamada una chica síndrome de
dawn." Hay gente que se ofende por tonterías y otras que tienen razón. yo
señora burguesa de buena posición, sin problemas económicos, no saldría de ella
hacer un chiste de una gitana o una mujer que da de mamar en la calle, no se le
ocurriría eso. Hay mucha censura, de muchos pedagogos que veían sexismo,
racismo en lo que escribió. Ella defiende lo que escribió.
Las series nos han
permitido ensanchar la libertad de expresión. Vemos argumentos más atrevidos
que tocan temas muy escabrosos, ha metido en las casas de nuevo una ficción más
sofisticada. Manolito, con tantos problemas políticas en EEUU, ahora quieren
hacer una serie. El hecho de que fuera un niño con gafas no es que lo señalara
un defecto, es que le estaba empoderando, está orgulloso de salir a la calle
con su mote. Allí te puedes buscar cualquier problema por cualquier tontería.
Todos los programas tienen opinadores, han quitado otros puestos. Le hubiera
gustado hacer cosas de la radio, no de opinadora. Ha inundando los espacios de
entrevista y radio el que tengas que ser graciosa todo el tiempo. Charlot, algo
tan clásico ahora, en su época fue acusada de promover el comunismo. Lo bueno
del amor es tener un talento para hacerlo. Fijate como habla Woody Allen y nos
ha dado momentos deliciosos en el cine, y no da matraca con las teorías. Cuando
empezaba Podemos no se podía hacer ni una broma. El tiempo les ha dado por otro
lado. se ríen. Era un humor muy blanco, de diseño de interiores. Ana Rosa Quintana
le hacía mucho juego a Pablo Iglesias. Le nota más atrevida, caradura, en sus artículos
de opinión. Le ofrecieron hacer un manolito de verano, pero no iba a hacer
siempre lo mismo, estuvo cinco años, y le creó cierta tensión porque hacía que
la gente se confundía entre la vida y la ficción, eso no era su vida, había
muchos elementos que hacían pensar que era su vida. Había muchos elementos transgresores,
y uno de ellos es que era el punto femenino. No era Umbral hablando de su mujer
y de las chicas con las que se liaba. Le siguieron pidiendo artículos en su
mismo tono. Ahora se dedica a escribir más ficción que periodismo. Al hacer el
tinto de verano surgieron otras mujeres haciendo ese tipo de humor. Se rebelaba
a eso, ¿yo no puedo hablar en serio por ser mujer? Sentía que la aniñaban, que
era un poco menor de edad. Gente con dinero la invitaban a comer porque pensaba
que ella le iba a divertir la velada. Yo soy graciosa cuando me da la gana.
Chejov le gusta como escritor y le atrae como persona. Chejov pidió a su
editor, déjeme hablar en serio, no perdió su ironía por eso. A una persona tímida
no le gustan que le llamen serio. Elvira apuesta por el humor voluntario, algo
que denota inteligencia. Elvira es graciosa cuando quiere, pero inteligente
siempre.
MONOLOGO A SU MADRE DE ELVIRA LINDO UNA MUJER INCONVENIENTE
No hay comentarios:
Publicar un comentario