TARTA CAPRESE DEL DUQUE DE MARZANA.

 

                                            TARTA CAPRESE DEL DUQUE DE MARZANA.

               Se puede leer  en la carátula del libro que el protagonista del mismo carece de sentimientos. Es un especímen humano de esos que no tienen corazón, que su sístole y diástole están paralizados y que no late en él señal alguna de humana condición. Atrayente argumento para iniciar la lectura. "El matarife"del escritor húngaro sufridor por el paso/peso de la Historia como carga infrahumana, Sándor Márai(1900-1989). Propia literatura antes de las primeras líneas del relato. Impacto de enganche en céntrica librería del Bilbao antiguo. Observadores que dan veredicto sobre comportamiento(s) sin conocer al actor de tamaña osadía en la impermeabilidad del sentir. Fenotipos analizados en clave global según la percepción aproximativa al modelo típico, sin profundizar en exceso sobre las motivaciones y matices velados que dan como resultado una actitud/actividad ante la vida que nada tiene que ver con lo destellado. La trampa de receptores que nunca conocerán el verdadero alcance de esa interpretación sometida más al análisis de la galería que a una verdadera esencia cuantificada de Verdad. Preámbulo literario subjetivo a modo de incipiente narrativa/pensamiento en acción. Corazón en movimiento, ojeada de convencimiento. A por los fonemas que refuercen/debiliten lo intuido. Magia ante el descubrimiento/secuenciamiento. 

      

    

                

                 Domadora y osa en frenética pugna en noche circense. Asistentes en silencio perturbador en lucha por la(s) vida(s)-Pío Baroja- sin resquicios de escapatoria. Silente temblor que percata el hecho de enfrentamiento para no fenecer ante la evidencia/infortunio. Ámbito de circo con agentes en la representación narrada entre esparcimiento/responsabilidad, emoción/miedo. Efecto "shock" después de la función. Berlín. Finales del siglo XIX.

            "Otto fue concebido esa noche. Nació a los diez meses y con dientes. El parto segó la vida de la madre".

             Tierno infante que crece entre el amor a la Patria y el sagaz deseo de mantener con holgura esas necesidades básicas que equilibran cualquier psicología predispuesta a no claudicar/descomponer. Hacha, buey, MUERTE. Símbolos que marcan al ya adolescente. Satisfacción/tristeza ante el inesperado registro de violencia. ¿Premonitorio de futuro?.

            "No olvides que la primera obligación del buen patriota es el entusiasmo".

             Bloques temáticos definidos y clarificadores de la continuidad de una obra marcada por la sorpresa y el riesgo en el morar desde la coordenada de un grito en pro de la supervivencia donde el elemento de agresividad/violencia toma cuerpo de naturaleza. Monstruo en ciernes como matarife, más allá de animales, rezuma aversión/desprecio por los débiles en una prolongación de su oficio. Otto, irracional, de pasión primaria en el placer por la destrucción. El futuro ya es ahora con el hierro punzante de la tendencia demoníaca. Jungla humana que chirría y donde el protagonista se acomoda sin escrúpulos morales. Guerra Mundial(1914). Prolongación de SANGRE. Matarife también en otros CAMPOS. Condecoración.

          "Había vuelto a sus manos la destreza con la que mataba al animal; ya agarraba la bayoneta correctamente, listo para clavarla y hundirla con un ímpetu que le resultaba familiar".  

          Fin del enfrentamiento bélico. Olvido de la pompa y esplendor. Regreso a lo ordinario. Soledad, rutina y abandono de ideales. 

          "Estaba descontento con su vida, pero era incapaz de reconocer dónde y cuándo se había equivocado de camino".

          Asesino en serie. Mujeres de la noche. Matarife: ANIMALES, GUERRA, SOCIEDAD. Obsesión por el vértice del triángulo con algún tejido poético(escaso) hacia entes que despiertan su pequeño interés. Condenado por malvado y desconfiado. Suicidio

          La carátula se queda corta. La mediocridad hace mella. El intelecto exprime sus conclusiones.

       Otto, primario, ignorante, incapaz de trabajar un pensamiento crítico, babeador de salivilla de alimaña, ausencia de coraje real, ideas preconcebidas exentas de fortaleza, masa entre las masas, cerebro formateado por impresión de Realidad alejada de profundidad, miedo al otro, recreo de lo primigenio. Otto, cero a la izquierda y sin ningún dígito a la derecha, volátil en cualquier puerto y ciudad, aséptico por impotencia, potente por anormalidad(a-moralidad), licencia de aparente aceptación esconde el deseo atávico de sesgar cualquier atisbo de luz. Miedo al fluir en libertad. Reprimido represor al frente de cualquier lugar, psicología tiránica por ejercer el control. Otto, cuántos Otto(s) en el siempre complejo devenir de la Historia y en historia(s) particular(es). Oscuridad del alma sin visos de limpieza. Condenados a ceguera repudian el claro que intuyen en silencio mediante un odio controlado/des-controlado. Proliferan. Amebas pululantes. Motivación por iconos simbólicos que exalten grandezas. Nombres con mayúsculas que tapan la insignificancia inconsciente del por qué de su estimación. Trapíos al viento. Esfinges plenipotenciarias de admiración por grandeza y seriedad. La superestructura(C.Marx)se abre hasta el infinito con la participación exitosa de tamaños fieles fervorosos/religiosos. Experimentadores de lo nimio en Fantasía(C.Castilla del Pino) de superlativo. Pescadilla que se muerde la cola en bucle de vacío del que no hay fortaleza/sabiduría por salir/romper. Disfrute en/con la rutina del sin-sentido. Proyecto ANTHROPOS(A. Ortiz Osés) estancado en su dimensión final. El halo de la Voluntad(Azorín/A.Schopenhauer) en la insidiosa obligación ante la Circunstancia(J.Ortega y Gasset) que usurpa la decisión desde un libre albedrío indeterminista. Agua de borrajas en vaso agujereado. Ausencia de ética  al no sentir imposición y lucha por un modelo distinto al mostrado. Inconformismo(lejano/inexistente) como actitud moral rebelde ante uno mismo. Comodidad a pesar del riesgo que supone la adaptación a un estado en el que ya nada interviene en su necesaria corrección. Determinismo como mito de Sísifo(A. Camus) del que no surgen fisuras para su finalización. Libertad ausente/presente que se desliza por el infortunio/fortuna al haber tomado conciencia de su imperativo puesto en juicio/asimilable.

         Sándor  Márai describió con precisión y conocimiento de causa la impronta de estos negacionistas del COLOR.

         La vieja Europa fue testigo de la precisión/percepción de un autor HIJO de una era de claroscuros proclive a las lágrimas con suaves matices de sonrisas contenidas. En fin, LITERATURA como cuento/miramiento de valor incalculable.