miércoles, 13 de octubre de 2021

VIAJE A CADIZ, SEVILLA, MADRID

En Cádiz hemos visto la concatedral, gratis con la tarjeta de discapacidad. El museo de la constitución y el de la ciudad de Cádiz estaba cerrado, pero hemos visto el monumento a la constitución en la plaza España. También la torre Tavira con la cámara oscura, desde la torre vemos una panorámica de la ciudad y nos explica la historia de Cádiz. Por ejemplo que vino una familia del país vasco, los Aramburu, a enriquecer la ciudad. Hay un edificio que recuerda a esta familia en el centro histórico. Paseamos por el paseo Canalejas y el parque genovés que es un paseo botánico precioso donde han colocado unos expositores de venta de coches y representaban una obra de teatro sobre Magallanes y Colon y el descubrimiento de América por los conquistadores catalanes, pues desde Cádiz salió una de las embarcaciones de los descubridores de américa, una de las calaveras. Vemos el museo de títeres en la ciudad donde hay muñecos hindús, un teatro de marionetas y varios juguetes (me recuerda al museo de los juguetes de Figueras.) Y pasamos con el coche por el puente de la constitución en la ciudad moderna. Pero la mayoría de edificios de Cádiz son casas antiguas, solariegas, blancas, antiguas, recordando a la ciudad de la Habana en Cuba. Hay tres puertos marítimos comerciales, uno cerca del corte inglés. Son puertos de yates y pesqueros. Vemos una competición de catamaranes, barcos de vela y yates, al lado del baluarte de la candelaria. El yacimiento arqueológico Yadir estaba cerrado pero lo vemos desde fuera y también el acueducto y teatro romano. Visitamos el castillo de santa Catalina, donde hacen talleres para los niños, pero están cerradas las puertas. El castillo de san Sebastián está cerrado también. Nos pegamos un chapuzón en la playa Victoria y tomamos el sol. Hace muy buen tiempo y hay muchos turistas porque es el puente de la constitución y la hispanidad (En Madrid hacen el paseo de la hispanidad, todos con banderas de España, viendo el desfile militar) Paseamos por la playa la Caleta. Hay mucho ambiente gaditano, unos obreros de la construcción se dicen quillo entre ellos y los camareros son simpáticos y afables. Paseamos por el mercadillo donde venden libros, juegos de ordenador, cosas típicas de allí. Hay un mercadillo para guiris donde venden suvenires como imanes para la nevera o muñecas andaluzas. Compro un colgante de cuarzo y un anillo que cambia de color según la temperatura y el brillo del sol. Organizan free tours, donde te puedes acoplar al grupo aunque te pierdes la explicación. Y también hay bus turísticos. Vemos el ayuntamiento, el palacio de congresos y la casa iberoamericana. Nos alojamos en un hostal que es la residencia habitual de una familia, duermo en el cuarto de una niña que tiene posters de hadas y libros de Michael Ende y C. M. Gaite. Organizan excursiones al estrecho de Gibraltar para ver esta ciudad inglesa, con centros comerciales, donde se pueden ver también las columnas de Hércules, hay otras en Galicia.

Tras Cádiz nos dirigimos a Sevilla donde además de la torre del oro y la giralda vemos la plaza España con azulejos que representan a las diferentes provincias españolas. Los turistas pasean en calesa, cuesta 35 e el paseo, también hay mucha gente en bicicleta, como en Madrid y en Cádiz. Así mismo paramos en Almendralejo donde comemos. También paramos en Madrid donde comemos en una terraza de Bravo Murillo, en las terrazas de abajo unos chavales organizan fiestas como en las películas pero nuestra anfitriona se queja de que solo puede disfrutarlo en verano pues en invierno el tiempo no acompaña. paseamos por el retiro y compro libros de Juan Manuel de Prada, el autor de Baracaldo, en la cuesta de Moyano. En Madrid para comprar libros hay varias zonas; la feria del libro en el retiro de Madrid, esta cuesta donde hay unos puestos fijos con novedades editoriales (los mismos libros que se encuentran en una librería convencional) y libros de segunda mano por 1 e, 2, o 5, pero la mayoría son a partir de 10. Están organizando el desfile militar. Desde lo del cobid la mayoría de edificios se pueden visitar pidiendo cita previa con lo cual se pierde más el tiempo porque antes ibas a tiro fijo, e improvisabas entrar o no, pero ahora pierdes tiempos reservando la entrada y esperando que sea tu hora de entrada, con lo cual hay muchos tiempos muertos en que solo esperas. Pasamos por el palacio de Lidia, donde vivía la duquesa de Alba y me entero que es visitable, y por los museos Thyssen y el Prado, y el edificio de correos que ahora es ayuntamiento. La zona de Arguelles es ahora una de las zonas más caras de Madrid, donde más caros son los pisos, aparte de Chueca, que se aprovechan de que los gays suelen tener más nivel adquisitivo pero el barrio no es como me lo imaginaba, un eurodisney de gays, sino que es un barrio muy normal, como el de cualquier otra ciudad, con librerías interesantes, y diferentes tiendas. Ahora por el cobid no se ven muchas discotecas abiertas pero vemos el Teatro Barceló y bares de ambiente y bares que fueron de la movida, el rollo y el kronen como ya conté en mi trabajo final de carrera. Por esa zona está también la casa de Alaska, de amarillo por fuera y rosa por dentro. En Madrid pasamos por la puerta de Alcalá y otros edificios emblemáticos como la casa América o el edificio de la telefónica, hoy centro cultural, donde Almodóvar inventaba telenovelas e historias melodramáticas con sus compañeras de oficina, que luego se convirtieron en guiones de cine. Comentamos que ahora es difícil entrar en la administración pública aprobando unas oposiciones, la nota de corte es muy alta, de un 9, pero es más fácil entrar en el funcionariado de pueblos, donde ya no te pueden echar, o es muy difícil, son puestos vitalicios, en cambio, trabajar en la privada es más arduo y hay mucho moobing, por ejemplo de los negacionistas que no han querido ponerse la vacuna. España es uno de los países donde más hemos reducido el cobid porque la gente se ha concienciado de vacunarse, pero seguimos llevando la mascarilla por rutina.









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