Eudora Welty (1909 2001) vivió 92
años y fue tan longeva como Caterine An Porter que murió con 90 años. Aunque ambas
tuvieron mala vida, son las que viven más y mejor escriben, a pesar de lo que
bebían. Nace en la capital de Jason misisipi. Su madre era maestra, y es el
primer trabajo que la marcó. Nace en los años 30 por lo que entronca con la
generación del sur, o las narradoras góticas del sur. Lideró movimientos
sufragistas de mujeres de todo el planeta. Trabajaba en la agencia estatal y administración
nacional y agencia de estado que intentaba paliar la crisis social. Por tanto,
tuvo que vadear con las clases más desfavorecidas. Este trabajo la llevo a su
primera vocación artística, era mas fotógrafa que escritora. Toma muchas fotos
en su trabajo en esta agencia. Hay un libro titulado un tiempo en el lugar, donde
mezcla la fotografía con la escritura y trata de capturar a los personajes no
posando, sino improvisadamente, por lo que salían desfavorecidos. La vida real
no está quieta, la foto capta la vida que se escapa, la frugalidad de las
cosas. Una de sus necesidades era la fotografía. La amiga que la animó a
dedicarse más a la literatura fue Catherine An Porter. Era amigo de Welty, ella
leyó lo que escribía, y la animó a que siguiera. Permanece en su casa familiar
toda su vida. Entre los temas más recurrentes de su novelística está la mujer que
se siente desplazada. Describe una casa sin mirarse unos a otros, una fiesta
sin invitados. Se regodea mucho en el estilo del rollo y gozo sureño que
asociamos a una narrativa muy barroca. Es una autora descriptiva y del detalle.
Quiere plantear toda la simbología del imaginario colectivo del sur de EEUU. Escribe 7 líneas sin problema, cada día. Escribe
novelas corales. Su estilo debe mucho a Truman Capote a la escritura al que se
lo encontró por casualidad en Nueva York. Sus obras completas ocupan 650
paginas a un precio consecuente, publicado por la editorial Libros cátedra y
relatos. Uno de sus mejores relatos son las Manzanas doradas. Pero sin duda la
conocemos porque escribió la hija del optimista y la boda del delta. Retrata la
vida de la hija de un pintor, y sus tradiciones. Podemos encontrar su libro de
segunda mano en la plaza nueva. Comprar malas ediciones en estos mercadillos
está bien si los libros son en castellano, pero hay que tener en cuenta con la traducción
moderna. Hay ediciones antiguas con malas traducciones. Era una gran lectora de
Emiy Dikinson. Escribió el relato no hay sitio para ti amor mío. Trascurre en Nueva
Orleans, en un restaurante donde había dos grupos de gente allí que la proponen
irse a pasar la tarde por ahí. Todo termina con un viaje al sur de EEUUU descubriendo
el paisaje:
Había un
enjambre de abejas, él conducía el volante. Los pescadores eran hombres
absortos mirando el coche que pasaba, cruzaron unos aviones. El hombre va
pensando mientras circula por un paseo de cabras, de un verde amarillento. Había
miles de mosquitos, un universo de ellos. Una familia camina por la carretera, el
cementerio está lleno de panteones, está la puerta cerrada. Se tienden los insectos
alrededor, y dentro del coche. Encendió un
piti, llegó a tierra firme. Los jancitos en flor eran iluminados por
rayos de sol. Era una zona hundida, el cura salió al porche, miró al coche. Llevaba
una sotana y la camisa limpia de flores estampadas. Hacía una luna llena, era
como la noche de un asesino en serie
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