Hemos hablado varias veces en
este blog de la sociedad del espectáculo y el show analizado por Umberto Eco
pero la sociología de nuestra modernidad es también la de un río que fluye, un
mundo burbuja y líquido. Nuestra era de acuario es lo liquido, las pequeñas
cosas que da a lo anecdótico carácter categórico, y hace extraordinario lo
ordinario e investiga entre los fenómenos y todo aquello que la física no
explica queda como noúmeno de la metafísica. Hablamos en este artículo del dios
de las pequeñas cosas del día a día cotidiano y de la insoportable levedad del
ser.
En el libro la ligereza del
sociólogo Giles Lipovesky se trata y analizan las situaciones de esta post modernidad
en que vivimos.(la modernidad era la ilustrada, que va desde el renacimiento hasta
la caída del muro de Berlín y las torres gemelas) Ha fracasado el proyecto
moderno de los meta relatos y las ideas ilustradas de libertad, igualdad y
fraternidad de la revolución. Y nos hallamos ahora en la era que predijo
Nietzsche en su obra la Nueva Aurora; la era de acuario, la postmodernidad.
En tiempos hostiles como estos
hay un sentir de atracción hacia las cosas débiles, simples, sencillas, ajenas
a esa aparente violencia con que convivimos en el día a día. El libro nos habla
de arte, política, literatura, pintura, de las nuevas técnicas espirituales,
del yoga, de la estética minimalista en las casas, de la religión comprada en
el híper mercado. La agresividad deja paso a lo dúctil, llevadero, a lo
pequeño, a lo nimio. En ese movimiento nuestra identidad también se manifiesta
como pensamiento débil, como un ser humano fragmentado y desestructurado, sin
raíces, desenraizado, roto, en cachitos. Las casas se decoran con colores nada
agresivos, la tranquilidad se rebela a nuestro movimiento. Hay nuevas formas de
alimentación, vegetarianos, veganos… nueva gimnasia, más suave; el pilates, el
yoga, el método fendercrais, las escuelas Waldor, la new age, la superchería y
superstición, la nueva era… hay una nueva manera de escuchar música, por
ejemplo, en la música del silencio de Jhon Cage. Surge una nueva espiritualidad
incluso en la gimnasia. Liquido es todo lo que condiciona nuestra sociedad de
postmodernidad. El mundo es hostil, duro, tiene el color de la negritud, es
necesario la fortaleza y los súper hombres, pero también es el color de lo
blanco, lo dúctil, los sereno, lo quieto, lo que se contrapone a lo primero.
Como en un enorme ying yang nuestra época cae una vez más en la ambivalencia. Las
cosas no son blancas o negras y tampoco grises, son una mezcla de todos los
colores en nuestra paleta. Son tiempos blandos en cuanto a las elecciones de lo
que nos rodea. Debemos elegir cada cosa. En eso al fin y al cabo consiste la
libertad; en la elección y la condena al fracaso y al error en todo cuanto elegimos.
Se presiente ese ruido escandaloso, pero a la vez hay sonidos menos
estridentes, menos agresivos, como la música de Enya, o de Bjork o de Lorena Mc
Carthit o incluso la de Hevia o The coors o Vangelis (el músico de Blade
Runner, de la chaqueta metálica, del planeta de los simios o carros de Fuego).
El libro gira en torno a los
múltiples campos de nuestra proyección cultural donde la ligereza queda patente
en esos términos. La insoportable
levedad del ser de Milan Kundera podría titular nuestra época que abandona todo
lo que sea grave, profundo, denso, filosófico, reflexivo, doctrinario o
absoluto. De ahí que haya muerto la historia, la filosofía, la religión y todos
los humanismos ante una tecnología tecnocrática que acaba con los contenidos y
significados para constituirse solo significante. Ya decía Mc Luhan que el
medio es el mensaje, hasta el punto de que en nuestra era Gutenberg o Marconi o
Bill Gates el medio se convierte en el mensaje; da igual lo que hablemos lo
importante es la plataforma wasap o internet o Facebook. Decimos chorradas
porque lo interesante es el jueguito cibernético. Podemos llegar a más personas
que nunca pero el mensaje que enviamos es una chorrada con emoticones. Y de
esta forma el ordenador que es un medio de comunicación se convierte en un fin
en si mismo. La tecnocracia.
El pensamiento débil de james Vattimo
se posiciona frente a los absolutos, los totalitarismos, la ausencia de
ligerezas, las imposiciones constantes, y los meta relatos. El hombre es más
flexible. En pintura podría ser representado el impresionismo, los colores
dúctiles, el minimalismo, el arte naif, los colores de Kandinsky y el abstracto.
Frente a lo estricto riguroso trágico e impositor, aparece este contrapunto.
Carlos de Agustín recomienda el libro el zen y los pájaros del deseo de Thomas
Merton. Todo lo que suponga una ruptura con esa cosa dura de hormigón es
bienvenido en nuestra época de relativismo y tole tolerancia con todo, de
ambigüedad moral. El hormigón se va debilitando porque cae el agua en las
estalactitas que acaban por mojar la ropa tendida. Es la era del vacío, de la
filosofía nihilista negativa, del no ser de Heidegger, de la Nada más
existencialista. El arte del vacío vasco lo cultiva Oteiza, Basterretxea o
Chillida o Ibarrola. Es esa sensación de que no hay agarraderas sólidas y cada
cual se inventa su propia agarradera. Sálvese quien pueda. Ya decía Ortega que
el hombre es como un naufrago mandando mensajes de ayuda y socorro que se busca
su propio salvavidas. Necesitamos flotadores para este mar de dudas en los que
nos consumimos. Ya decía Dalí que él necesitaba muletas aunque las muletas de
Dalí fueran trozos de bacón. Muleta es lo que llevaba Edipo cuando queda ciego
y su hija le acompaña como un bastón de ciego o un perro lazarillo. El ser
humano se agarra a algo, a los grandes absolutos y parece que esta cobijado.
Cuando desaparecen las torres de marfil, el hombre deja de estar sosegado y
tranquilo, cobijado, en el amparo. Es por eso nuestra época una era de
incertidumbre, de dinamismo, de cambio… Tenemos miedo a todo; a los
terroristas, a las catástrofes naturales, al vecino árabe… la paranoia de la
seguridad colectiva se instaura en todas nuestras conciencias y el sistema nos
protege, por nuestra propia seguridad. El sistema es paternalista y moralista y
patriarcal y nos da el cobijo que solo un Dios nos puede dar, pero eso sí; a un
alto precio. Y el precio es la libertad. Renunciamos a la libertad en aras de
la seguridad o de la falsa igualdad de la sobreestimada democracia. Renunciamos
a la libertad que nos da miedo, como decía Fromm, porque no queremos elegir.
Preferimos quedarnos sin nada a elegir entre dos opciones y poder equivocarnos.
Dios no existe y clamamos a ese Dios que no existe unas cadenas. El preso de la
caverna de Platón no quiere ver la luz.
Es importante el renacimiento europeo como una manera de romper el absoluto cultural y vital que se vivía en esos momentos. El hombre se hace más libre, mas responsable de sus propias acciones, es aun apertura de oxigeno hacia nuevos significados. dicen que el oscurantismo medieval no era tan oscuro, pero el nombre de la rosa, que trascurre en el románico nos convence de lo contrario. Representa el románico o clerecía los valores absolutos de filosofía teocrática, hermenéutica, escolástica y teológica- teleológica; el ser humano no tenía una autonomía para decidir y vivir acorde a ella.
El hombre medieval poseía el
libre albedrío que dios le otorgaba, nada que ver con la libertad como la
entendemos ahora. Guillermo de Baskerville
(mezcla entre Guillermo de Okham, y el perro de Baskerville, encarnado en Sean
Conery) se enfrenta al inquisidor y al malvado Jorge de Burgos (Jorge Luis
Borges). Después del románico, el gótico fue una época más abierta y de
transición al renacimiento, más libre, cuando surge lo trovadoresco. La primavera
árabe entronca con ello. Los movimientos de los países árabes son similares a
los movimientos sociales vitales del renacimiento occidental. El árabe vive aún en el oscurantismo
medieval, en el que no es sujeto ni yo sino objeto, comunidad, parroquia, masa.
Quizá eso explique los suicidios de los terroristas islámicos actuales; su vida
no vale nada frente a la colectividad de su religión coránica. El hombre
reflexionó en el renacimiento, se dio cuenta de sus posibilidades y de que era
dueño de su vida. En la edad media el
hombre no es nada frente al objeto, la realidad, el dios, el sistema. En las pinturas de Masaccio podemos ver como
el ser humano toma conciencia de si mismo, de su propia existencia, y se
asombra. Más que conciencia, toma consciencia de su propia vida. Si yo soy aquí
el sujeto, no debo someterme a un objeto como es Dios o imperios que nada
tienen que ver conmigo. Por eso el hombre rompe con el pacto feudal del señor
con sus caballeros y campesinos. Rompe así en las revoluciones con el áncine
régimen. Yo decido mi propia vida con el
logos, conocimiento, con el trabajo de mi propia razón. El renacimiento es la época
de libertad del individuo, como vemos en las pinturas del cuatrocento,
quincuacentro o en el relajo de las costumbres de la divina comedia o el
Decamerón o en ese pienso luego existo de Descartes y en el giro
antropocéntrico de Copérnico, junto a los descubrimientos astrofísicos de
Galileo. El individuo era un objeto y se hace sujeto. Da vinci empieza a pintar
el cuerpo, el hombre de Vitrubio, el código áureo. El Objeto no es ya sometido
a otro objeto. En la edad medía no podían salir de la racionalidad realidad impuesta.
En el taller de cuentos de hada nos explicaron como en aquella época funcionaba
la cosa como en los pueblos. En los
pueblos eres el hijo del paco, el nieto del Zenón, pero no te llaman por tu
nombre. No revindicas tu Yo Jesucristo es el primero que revindica su
individualidad, su yo, soy el hijo de dios. Jesús crea el individualismo
occidental. Hasta entonces no revindican el yo. El nombre de dios era impronunciable
en las religiones judías, árabes, prehistóricas. Los griegos hablaban del yo en
términos filosóficos, pero Jesús dice “yo soy el que soy” Si mi padre y yo
somos la misma cosa surge la filosofía panteísta. La realidad metafísica
entronca con la filosofía de la individualidad. Como soy el que soy, soy
responsable de lo que hago en realidad y no dependo de nadie más que de mi
libre albedrio. Fuera Dioses y moral heterónoma frente a una nueva moral
autónoma.
La comunidad es menos
individualista. La religión del uno en su individualidad, en su manifestación
mística es el máximo de la propia libertad. No soy lo que el otro espera de mí,
lo que el otro quiere que sea ni el otro es el que yo quiero que sea. Soy el
que soy, soy responsable de lo que hago y lo que no hago. Esa es la Individualidad
caracterizada. El mensaje evangélico es eso. El mensaje de los griegos es muy
similar. El ciudadano libre habla en el ágora, en la polis y participa en
democracia, en su libertad. La visión de libertad e individualidad es muy grande
con los sofistas y socráticos. Los griegos enseñan lo que es tu dios. La interpretación
del cristianismo es muy similar, eres responsable de tus actos. El fundamento
fundamenta y ahí termina. El cristianismo cree en el destino, en la
providencia, así lo ha querido Dios, que organiza la realidad. El individuo al
individualizarse origina su propia individualidad, su libertad. No somos nadie,
dios así lo ha querido… es la interpretación de una fe terminada; bendito sea
dios, le ha pegado una patada, bendito sea dios… eso que es un absurdo esconde
el sentido del enigma, creo porque es absurdo. Creo porque el absurdo
posibilita la presencia de un enigma y ese enigma es la última palabra.
Tertuliano sentenció; credo qum absurdo. Aparece en el sentimiento trágico de
la vida de Unamuno, obra en la que va estudiando a los padres de la iglesia, y
la hermenéutica escolástica. El sentido de las cosas está en que el absurdo no
tiene la última palabra. La muerte no es la última palabra. El enigma envuelve
esa muerte. La resurrección y rencarnación en el eterno retorno es la última
palabra. Los griegos dicen; el hombre es la medida de todas las cosas, lo decía
Demóstenes. Los griegos también mencionan el termino divino, el demiurgo, creen
en el enigma. El presocrático Alecmeón solía decir; siempre fue lo que una vez
fue porque si no hubiera sido nada habría sido y por lo tanto yo ahora no
habría podido pensar. Spinoza, Hegel desarrollaran estas ideas de forma muy
amplia. Con ese axioma se hizo otro peculiar; no me puedo auto fundamentar. Me
fundamento porque hay fundamento. No soy mi propio arcillero. El hombre es el
que desarrolla sus pasiones, Demócrito estudia los átomos, en un materialismo físico
como el de Hakckins, y estudia la materia, neutrón pleuton, y el origen de las partículas
elementales de la materia.
¿QUIEN CREÓ AL HOMBRE QUE CREÓ A
DIOS?
El alma y la idea de Platón nos
habla de la parte espiritual que posibilita la materia. Aristóteles dirá que lo
que informa la materia es el motor inmóvil, o el inmóvil motor (antes de ser
motor ya era inmóvil). Lo inmóvil posibilita que sea motor. Ha estado desde
siempre y por inmanencia crea la realidad. No es una creación desde la nada
porque ese todo ha sido eterno, siempre fue lo que una vez fue. Surge del todo
que no surge de la nada pues es eterno e inmutable. Y entramos en Tomas de
Aquino; El increado creado es en sí un creador. Nosotros no nos hemos creado a nosotros
mismos. Una onda hace un oleaje, juntos somos la evolución de las especies,
desde el punto 0 hasta la actualidad. Hay una canción para esta humanidad. (en
un taller ocupacional de discapacitados cantan todos unidos) Sabemos que una
ola, un aire o un esperma puede hacer que cambie el destino de la humanidad. Somos evolución desde un todo enigmático. No
llegamos a entender ese enigma y noúmeno. Nos aproximamos con la razón a lo que
la razón pretende entender, al razonar asumimos postulados; el tiempo 0 no nace
del no ser sino de una eternidad del no ser, damos atributos a la divinidad. Te
puedes quedar en la parte de la física o ir hacia la metafísica. Van unidas. La
metafísica o física a solas no llega, no te lo explica. Solo quiero ver el
océano, pero a solas con la física tampoco se puede explicar el mundo. La
metafísica es lo que la ciencia no explica. La metafísica es necesaria para que
la ciencia explique lo que explica. Si la ciencia avanza no mengua dios, vas
aceptando a dar una interpretación de la física. Aunque supieras entender el
momento del tiempo 0 nada cambiaría el mundo. De lo que no se puede hablar es
mejor callar, nos decía Wittgenstein. Avanzamos científicamente, pero en última
instancia estamos como hace 3 mil años; no sabemos nada sobre el significado de
todo ello. Entramos desde la ligereza de las cosas a la profundidad,
inductivamente, como las ramas de un tronco. No se puede descubrir que no
existe Dios. El tiempo 0 necesita un fundamento para serlo. No puede surgir del
no ser o de la Nada. De la nada nada surge. No tiene fuerza para surgir. Hablamos
de la Nada de lo cotidiano de Sartre (lo que nos roda, origen de la náusea) y de
la nada cotidiana de Zoe Valdés, el dios de las pequeñas cosas. Estamos en la
nada cotidiana de este jueves dentro de la Nada que es la realidad y el todo
que envuelve a la Nada y a la nada con minúsculas. Esa Nada no soporta sin el
todo. No nos soportamos solo por la nada cotidiana, necesitamos la Nada y el
soporte que es todo. Incluso la persona irracional estaría condicionada por la
nada, por la Nada y por el Todo aunque no lo sepa y se basta con la nada
cotidiana y sus significados; me creo Napoleón, soy el erudito más erudito de
zona de Bailén. El que no sabe que existe, animal, vegetal, material, lo
compadecemos los seres racionales que entendemos que ese ser no ha sentido ni
la nada ni la Nada ni el Todo. Descartes dice pienso luego éxito. Alguien que no
sabe el disfrute de las alubias con sacramento… pues él se lo pierde. No quiere
decir que deje de ser un placer para el que las degusta. Esa es la salida de la
caverna, no podemos obligar a nadie a salir ni imponer la luz del logos y el
conocimiento. Pero seguimos cultivando la cultura y aumentando la interpretación
en la realidad desde muchos y nuevos significados. estamos en una polisemia de
significados, cada cual se adecua a la realidad para dar un sentido a su propia
vida. El credo que ha dado sentido a mi vida puede ser el credo marxista
religioso. U otro. ¿En que creen los que no creen? Es un libro de Martini
obispo de Polonia y de Umberto Eco; el mero hecho de decir no creo ya es una
creencia en lo que sea. El ser humano tiene creencia porque tiene conocimiento.
La masa tiene creencia y el hombre idea. El conocimiento es un significado que
es inconcreto. Puedo tener un conocimiento de lo que es el arte y no tener la
creencia de que un cuadro determinado sea motivo de gozo pictórico. Logos es
conocimiento, pero también divinidad, luz… lo físico y metafísico. El logos
parte de lo metafísico y se hace logos de la nada cotidiana. Así entendemos la
política, la economía. Es el paso del mito al logos; el logos se sirve de
símbolos iconos mitos y luego los abandona al llegar al conocimiento verdadero.
Platón explica con mitos griegos su símil de la línea. Todos los filósofos han querido dar un
significado diferente. Todas las corrientes filosóficas tienen su vigencia
porque dan un significado, el sí o el no o la abstención que es imposible. Como
reflexión ante un tema determinado se afirma o se lo niega. Una tercera vía de
ni afirmo ni niego, no existe. Frente al creyente y ateo está el agnóstico como
tercera via. Todos tienen una creencia. La creencia del ateo es la creencia de
su increencia. La creencia de un agnóstico es su duda. Y la del creyente es la
afirmación. El significante como creencia y el significado son ideas
antagónicas. El significado es el que varía (Ateo practicante, teísta) y el significante
es el mismo siempre. El significado son las ideas respecto a una creencia. Las
Ideas credenciales. El significante es el fundamento común del que surgen las
ideas. Metafísica y filosofía se unen. La Filosofía se ocupa de los
significados, como la semiótica o semántica y la metafísica se ocupa del
significante. Un cristiano dice que el significado es una forma de Dios. Para
un ateo no hay más significado que la autosuficiencia de su facticidad, yo soy
yo y mi circunstancia. El agnóstico situacional, como Enrique Tierno Galván, cree
en un fundamento significante que no tiene significado. La cruz es significado;
resurrección carne. El significante seria en el origen del cristianismo ese “padre
¿por qué me has abandonado?”. La esencia o sustancia en Spinoza. Las religiones
son significados, no son significantes. Serian
contenidos sin continente que lo envuelva. La religión es creer en la cruz como
significado dentro del continente enigma del padre que te envuelve. La cruz es
un significado dentro del significante de dios. El agnóstico dirá, no tengo ningún
significado, porque la razón no me la da, no doy significado a la cruz. El ateo
practicante dirá; mi realidad personal es la única que es mi propio
significado, la autosuficiencia de la facticidad. Busco mi religión. El ateísmo
es la religión del ateo, dirá Xubiri. Un creyente va a misa, pero para otro su
religión es ir tomarme 4 cubalibres en el casco. No hay más religión en que el
que está en un pub que el que está en la basílica de Begoña rezando el rosario.
Tres opciones de significado religioso; creyente, ateo o agnóstico.
Las ideas sirven para enriquecer
el significado ante la realidad. No tener ideas supone que la realidad no la
estrujamos como al tenerlas podríamos hacer. Las ideas, que no imposiciones,
enriquecen el entorno. Si la idea forma parte de mi identidad y la quiero
imponer es catastrófica, es someter al otro al designo de mi idea, es
totalitarismo.
García Calvo compuso el poema “la cara del que sabe”. Todos tienen su idea, son ellos los reyes del aire y si acaso
ves que todos ellos los cierro en cárcel de mis versos y que la música ya se apaga,
me quedo mirando a las nubes distante, las veo allí la cara del que sabe… el hombre de traje habla con gente
importante, agarra el volante, veras en el espejo la cara del que sabe. Si ves
al chulo que a su rubia le dice fumándole que nanay nenita que tu padre, y
cuidado con el rímel que no se te empaste, veras si te fijas en el cristal la
cara del que sabe. Si miras al que llaman capa cobarde, que le escupe en la oreja
al cobarde y enfrenta al maltratado, y le impone las ideas, veras si te fijas
que tiene la cara del que sabe. Si observas al empresario que borra los arboles
de derecha a izquierda… verás la cara del que sabe. Y al final yo me quedo a
las nubes mirando distante, recuérdame y dime, ¿ves la cara del que sabe? García
Calvo no tiene ninguna idea, ni impone nada a nadie. Esta mirando las nubes
distante, sin imponer nada. Las Ideas dejan de serlo cuando son imposición.
La señora encantadora del
pueblecito sin cultura es el mito del buen salvaje sin civilizar. No tiene ideas.
Hace la vida, si hace frio se cubre, si hace calor toma vino. Sin necesidad de
sabiduría. Es otro desarrollo, desde la sencillez, pero desde el momento en que
ponga la tv, ya es influenciada. No existe el hombre puro sin influenciar. Se queda en la puerta de su casa. Son estas mujeres
de los pueblos que no salen a la calle, se ponen al balcón. Se ponían en el
sofá, hablando de lado a lado en sus casas, en sofás de mimbre. No es necesario
tener ideas para ser feliz. La creencia surge por el filtro de la idea. La masa
no tiene logos conocimiento para discernir las cosas, y se deja llevar por ideas
que desde una estructura diseñan. Unos se hacen falangistas pues no tienen
soporte crítico. Ha sido la idea de alguien, lanzan el virus de la idea y la
masa dice esto es mío, se apropian de esto. Es una creencia, la están
repitiendo, previa idea de alguien que la inventó. Hay una creencia porque
previamente ha habido una idea. Idea- creencia van en misma línea, son lo
mismo. Todos tienen su idea. Yo soy libre de ver las chicas de oro. La idea de
Ortega puede considerarse una creencia. Van en la misma acera, no están
separadas. La masa es el conjunto de individuos, donde uno se afilia al
partido. Hay que diferenciar entre el pueblo, la masa y los individuos. El
sumatorio de individuos en libertad da la idea de pueblo. El sumatorio de
individuos en no libertad o condicionados por la estructura da el resultado de la
masa. La rebelión de las masas no es la rebelión del pueblo. Es algo que nada
tiene que ver con el pueblo que son los individuos- ciudadanos, al margen de
cualquier forma de escritura. El pueblo es la individualización de cada cual. La
estructura es masa. La estructura la hacen los que creen que tienen ideas
propias (coche automóvil, marxismo..,), ideas basadas en la verdad del pueblo
(malinterpretado) Los que tienen ideas están enfermos, son resentidos con su propio
cuerpo, débiles mentales, con deseos de odio y venganza… de una dinámica psicológica
terrible. Se margina al estudioso con el miedo a que asuma el poder. Se margina
al que destaca por ideas distintas a las de la masa y se le condena. En el
discurso al hombre común de Wiliam Reich dice; pudiste escoger entre Robespierre
y danton, entre Jesús y barrabas… coges todo aquello que posibilita que tu
identidad como colectivo no sufra en demasía. Yo soy verdad y la vida, esa
verdad de Jesús da miedo, pues da luz… coges siempre lo menos verdadero, escoges
lo otro que es la que condena. Tu negrero eres tú mismo. Te pones pegas para no
disfrutar de la libertad. La libertad es elección y condena. Prefieres no ir a
nada que ir a esa cosa y perderte la otra. No tu verdad ni mi verdad, sino la
Verdad, salgamos juntos a buscarla, decía Machado. Es en el fondo la
ambivalencia de nuevo. Aunque tengamos dos opciones distintas con honestidad podemos
llegar a acuerdos. O nos matamos unos a otros creyendo que tenemos la verdad.
Cuando digo mi verdad una vez más me baso en la idea que tengo de Verdad. La
pongo y la vendo, que no la impongo. Si la impongo hago flaco favor a la
verdad. Si la pongo hago un gran favor a la verdad porque a otro le puede
parecer verdad lo que a mí me parece verdad. No hay que imponer la verdad por
decreto porque la estas matando, le estas imponiendo. Todo el mundo teme al
dictador, pero el teme a todo el mundo, le pueden matar. La verdad hay que
ponerla, no imponerla. Funciona la mentira, una mentira repetida mil veces se
convierte en verdad. En la vida cotidiana se imponen las verdades. Si se
pusieran se llevaría un sobre salto el hombre de a pie. Se impone la verdad
sirva para lo que sirva, pero entonces ya no es la verdad ideal de Platón. Si
la impones puedo tener resquemor contra ella. Por decreto, obligación, no vendrías
a escuchar esta charla. Prefieres ir a una conferencia gratuita que una clase
impuesta de la universidad. La síntesis es la unión de contrarios. Tu verdad es
50 % y la mía la otra mitad y llegan a puntos de acuerdo en ese ficti ficti. La
Verdad no es el absoluto sino la ambivalencia. La verdad con mayúscula existe
como significante; soy terrorista, nacionalista…impongo mi verdad. Todos los filósofos
se han creído en su verdad como cuando Nietzsche se pregunta por qué soy un destino, yo soy la verdad. Mi
pensamiento es lo más verdadero del mundo. Para que la verdad funcione si
quieres ser trabajador del logos debes ser honesto. La honestidad está en la
ambivalencia y no en la forma de absoluto. Los grandes regímenes totalitarismos
ismos dicen aquí no hay ambivalencia sino socialismo, imperialismo… El significado de la verdad es polémico. No
todas las verdades son iguales. La verdad es el sumatorio de contrarios. A y
noA es el todo, frente al A o B que es
todo. La verdad es democrática. La verdad desde el punto de vista teórico sería
un sumatorio de lo que un nazi querría decir y del anti nazismo más radical.
Demostrar que esa verdad no tiene significado es más arduo. Lo nazi era la
verdad teórica y el contrario de esa verdad era tan o más grande que lo que
estaba establecido. El sumatorio de esas dos partes daría un todo. Sería la
ambivalencia. Poner ambivalencia entre muerte y libertad. La lógica a través de
una victoria militar hizo ver a los que tenían ideología nazi que estaban en un
error. En vendedores y vencidos vemos esta lucha de contrarios. Un soldado reconoce
había sido un nazi asqueroso. Los humanos nos damos cuenta de que la dicotomía está
en la historia. La historia es una lucha de clases, dirá Marx y ahora estamos
en la ambivalencia entre los capitalistas y los que no lo son. La verdad de los
capitalistas y la verdad del no capitalismo hacen posible que haya un enfrentamiento
ambivalente. No siempre ganan “los buenos”. Tomas partido por una opción A o B.
o por la ambivalencia entre ambos. La historia es injusta. No triunfa el que es
más verdad sino la verdad que más adeptos consiga. Por eso a veces triunfa el
que es menos verdad, ¿Cómo puede triunfar esto que es menos verdad que la
verdad verdadera? Es democrático, pero no es justo desde moral. La razón universal
de Kant no es más que un pacto entre razones. Si hay tres Hitlers entre 4
personas ganará Hitler, si votan los enfermos mentales o los republicanos…
bruce Springsteen dice que en el resultado de las elecciones estadounidenses no
se trata de cuestionar o cotejar la idea de progresista o demócrata sino de ver
que desde el punto de vista moral no tiene que estar ese energúmeno en la
presidencia de EE.UU. Ha ganado unas elecciones. El que gana es el que más
votos de la masa recibe. Se resquebraja desde el punto de vista moral. Y debemos
estar 4 años aguantando este tipo de inmoralidades. Hay conductas inmorales,
anti democráticas como cargarse la sanidad universal publica de Obama.
Democráticamente le dan triunfo para hacer unas leyes. Es democrático pero anti
moral. Es la diferencia que hay entre la moral griega y el derecho romano o
entre la defensa moral pública y una democracia burguesa que apoya la moral
privada de la multinacional. La idea moral de Platón, las ideas universales,
frente a las cosas objetivas de Aristóteles. Referente a la democracia, que
Borges llamaba el abuso de la estadística, me viene la reflexión de que cuando
todos piensan igual nadie piensa demasiado. En la próxima sesión analizaremos
el realismo en la obra de Balzac Ferraust perteneciente a la comedía humana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario