LIBRERÍA PALENZUELA EN LA FERIA DEL LIBRO
Santi y Mila son los
dueños de la librería Palenzuela, cerrada los sábados a la tarde. En la caseta
de la feria del libro nos hablan del oficio. Tienen una sección en la librería
de autores baracaldeses. Están los libros de Itziar. Llevan36 años como libreros. Nos cuenta las
peripecias de regentar una librería en Barakaldo. Se combinan varias cosas. La
experiencia en este pueblo es parecida a otros pueblos. Ellos son autodidactas
y empezaron con una librería pequeñita. Lo formaba un colectivo de personas en Baracaldo,
chicos que querían traer la literatura en eusquera. Era un profesor, otro que
trabajaba en un banco…era gratificante pero no rentable y a final de mes ponían
dinero de su bolsillo. En 1979 a finales el mundo del eusquera empezaba a
manifestarse tras la muerte de Franco. Estaba la editorial Órdago o la
editorial norte. Necesitaban un sitio en que poder publicar esas obras.
Cogieron una librería y llegaron a unos acuerdos. Esta es la tercera librería,
que ha estado en tres lugares distintos. Pasaron de 22 m cuadrados a 200.
Hay momentos que fueron muy
agradables como el encuentro con los escritores para interrelacionarse con los
lectores. Pero también luchan contra Amazon y lo digital y la piratería que
hacen daño al mundo del libro. Ellos venden la relación, el asesoramiento, su
conocimiento. Parece que el libro se ha leído y conoce todas las obras que
venden. Dan un trato cercano. Es una lucha en el día a día para sacar un libro.
Ahora, con las efemérides del día del libro, y la feria del libro sacan los
libros a la calle. Están presenten en la semana cultural de Baracaldo. No son
rentables estas ferias tampoco, lo hacen por imagen. Son un referente en
Baracaldo. Hay gente que vive de las ferias, van de un pueblo a otro. A la
librería no le sale económico desplazarse. O pagar a un personal, pero lo hacen
por imagen. Sí son rentables las ferias en grandes ciudades como Bilbao, Madrid
o Barcelona. ¿Qué porcentaje de negocio supone la literatura y la papelería?
Viven gracias al libro escolar que les permite subsistir al año. Y de los
regalos, pero los papeles y cuadernos en sí no son rentables. Traen algo
diferente al público, lo que no tengan las demás librerías. Los libros en un
pueblo pequeño suponen el 30 % de los beneficios.
En las tiendas de ropa entran 500
cosas nuevas en dos dias y tiene personal para eso. Pero aquí se traen menos
libros. Se leen los bes seller y las grandes modas. Las editoriales menos
comerciales se van reduciendo o traen los libros de encargo. Ellos son los que
más literatura venden de la margen izquierda, tras Bilbao. Apoyan a los autores
vascos. Y a los de Baracaldo. Tienen una sección en la librería. Miman más a
esta gente que tiene un sueño y sacan un libro para que lo lean. Es parte de su
apuesta. El libro tiene una caducidad muy rápida. Si en tres meses no se ha
vendido se cambia e introducen una novedad. El libro de fondo ha pasado a la
historia. Lo principal que venden es narrativa. Incluso la casa de libro ha
reducido el libro de fondo. El encargo es un servicio rápido y en 48 horas
tienen el libro.
Apoyan a escritores noveles que
empiezan y en este espacio los libros tienen más tiempo. También están expuestos
los autores del pueblo en la mesa de la feria del libro. Pone en la reseña que
es un autor de aquí y lo miran con más mimo. Hay encuentros. La gente viene a
presentar sus libros según sus posibilidades. Esto suscita interés. La librería
funciona y van alli y se permite ese contacto. El 21 de marzo vendrá Iban Martin
a hablar del foso del silencio y podrán ver los sitios donde trascurrieron los
asesinatos. También hay cuenta cuentos y teatro, marionetas y actividades
infantiles como el Olentxero. Los niños son los lectores que se acuerdan de
mayores de esta librería. El e-book se usa para los viajes. Los grandes
lectores que compraban varios libros en un mes se han perdido, sobre todo de
novela. En el libro infantil hay preciosidades que no se pueden bajar, hay que
ver las ilustraciones. Los niños de 30 40 años saben que el libro es un
atractivo. Se trabaja con el cuentacuentos. Tienen una punta más grande de
ventas en navidades. Se acuerdan de que el libro queda bien y es económico. Y
el resto del año se olvida, como el turrón.
El futuro es incierto. Librerías
independientes quedan poquitas en Vizcaya. Todo son cadenas como Elkar, la casa
del libro o Logroño. Las franquicias estan empezando a extenderse. Amazon tiene
muchas ventas. y en general el libro digital. Amazon vende papel. Hace daño en
todos los sectores. A las doce de la noche uno está entretenido y pica un
libro. Por la inmediatez de tenerlo en 24 horas. En un comercio hay que pedirlo
y tiene que estar o venir- las editoriales piden un pedido mínimo para que sea rentable.
Las distribuidoras no favorecen a las librerías. Las pequeñas distribuidoras se
comen entre ellas. En el País Vasco quedan una o dos. La editorial vende
directamente también. Tiene capacidad de compra y lo vende planeta
directamente, sin distribuidoras. Estan en crisis. Estamos en un momento de
asentamiento y de incertidumbre como cuando empezó la famosa moda de los
centros comerciales. La gente iba a Carrefour masivamente y luego dejaron de
comprar allí. Es una época de cambio. El IVA del libro es reducido. El del
papel es alto, el 21. El precio del libro lo pone el editor, tiene un margen económico.
Las pequeñas editoriales luchan por llegar a la gente joven y eso hace que
puedan vivir escritores y libreros. No tendrían la capacidad de compra de
Carrefour si el precio no lo pusiera el editor y entonces desaparecerían. Puede
competir dando sensación de cercanía que no tienen con el frio centro
comercial.
La tienda de discos ha sufrido
también. Llong Play sobrevive porque es una empresa familiar y no es la única.
La de Bilbao ha cerrado. Ahora los discos se venden en Media Mark. Antes cuando
salía una canción de los 40 principales iban a esta tienda. El mundo del disco
ha caído. El disco no tiene un precio fijo como la ropa. Si no hubiera un
precio fijo desaparecerían las libreras. El autor que se autopublica pide 50
libros a la imprenta y se los da al librero y si solo se venden 20 el librero
los devuelve al autor y este devuelve el dinero. En cambio, los best-seller se
pueden devolver a la editorial. Ahora hay una relación directa con la
editorial, sin la distribuidora. Esto hace que se favorezca el libro de masas
sobre el libro de un autor que empieza o de tirada reducida. Un hombre algo
bebido nos enseña El libro de la muerte de kid bourban. Por el titulo pensaba
que era el libro tibetano, pero debe de ser un best seller. Hasta los
vagabundos leen literatura de masas. En un letrero pone; La lectura perjudica
seriamente la ignorancia.
Desaparecen
libreras como esta en las que el papel se podía tocar y oler y pasar las
ilustraciones de las páginas y los dibujitos. El libro arde en la pira nazi
moderna a la que destinan los libros que nadie quiere. Libros silenciados,
olvidados en las estanterías. Nadie los abrirá, ni besará su lomo y los libros
cerrados son muertos, a los que se les ha negado la voz. Preferimos el papel
muerto de una pantalla de metacrilato, fría e impersonal pero el beso de estos
libros que se encargan en Amazon o bajamos en Emule es un beso frio y fatal que
sabe a hielo en los labios
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