sábado, 3 de diciembre de 2016

LA ASTE NAGUSIA. DOCUMENTAL

Vemos el documental de Víctor Magán. Gritos de rabia y alegría. Fernando tenía sueños santos de revoluciones. Josu tenía ganas de cambiar todo. Éramos todos jóvenes. En el arranque de las fiestas nuevas era todo fuera de lo posible. Queríamos recuperar la calle, la libertad. Eran entonces las fiestas de Bilbao un tablado de danzas de la sección femenina, danzas vascas organizadas por el ayuntamiento. El había jueves fuegos artificiales pues era el día gordo y las primeras corridas de toros y teatro, pero del malo. En Agosto Bilbao se vaciaba. Estabas de fiesta porque te lo habían dicho. Eran fiestas para la burguesía. Bilbao era un lugar aburrido y gris. En ese contexto hacen las primeras fiestas de Bilbao como las conocemos ahora; la aste nagusia.
Resultado de imagen de aste nagusia documental de victorResultado de imagen de aste nagusia documental de victor
Quico mochales era un personaje al que debemos las fiestas. Pilar Careaga, alcaldesa de Bilbao, era un caballo salvaje y no lo permitía las fiestas. Fueron fiestas hechas para el pueblo y por el pueblo. En la primera y única semana del deporte vasco en Bilbao el arenal estaba vacío de coches. Podías salir revolcado otra vez. La alcaldesa lo cierra a la semana. Esperaban el día soñado, danzar en libertad. En el 77 empezó a salir el sol en el cielo nublado. Zuron hizo una convocatoria. Era un aburrimiento la semana grande. No había ni Kalejira. Estaban en plena transición. Para la creación de las fiestas jugó un papel importante la radio popular, que tenía mucha audiencia, era bilingüe y en abierto, con participación ciudadana. En el locutorio anuncian las fiestas. Querían sokatiras, rompe pucheros, cosas tan populistas y pueblerinas tan fáciles de hacer pero que aquí no se hacían; txistus, panderetas, ikurriñas, banderas del Athletic….
Resultado de imagen de aste nagusia documental de victorResultado de imagen de aste nagusia documental de victor
Un tiempo nuevo iba a comenzar. No se podía parar el reloj. Vino Berasategui, el ultimo alcalde que no pensaba continuar en el cargo y organiza un concurso de ideas. “Montar lo que queráis”, les dijo, “que yo me voy de vacaciones, dejo el puesto de alcalde y ya he terminado, hacer lo que queráis”. Habla oficialmente con los ediles y todos se ponen de acuerdo en organizan las bases para este concurso de ideas sobre las fiestas. Montan un jurado donde estén representadas todas las organizaciones con algo que decir, desde asociaciones de vecinos hasta lo institucional. El corte ingles recogió todo y les dio cartera con todos los proyectos. Los vecinos decían; “una carrera de patitos me gustaría que hubiera”. Mandaban dibujos, una muestra de la creatividad que había en Bilbao. La fiesta no es sólo un conjunto de espectáculos. Lo importante es crear un marco en que la gente se pueda expresar. Este caudal de creatividad había sido secuestrado por el régimen franquista. Las fiestas funcionan en un espacio definido, pugnan con personas del propio colectivo, más partidarios de fiesta descentralizada por barrios. Hubo una descentralización organizativa por parte de la comisión de fiestas participativa. Se integran colectivos ciudadanos de lo más diversos. La propuesta de Txomin Barullo era sobre actos concretos. Existía ya la romería que se hacía a Begoña, pero no la bajada de Begoña al centro. Se crean comparsas y txoznak, entran los colectivos organizados de los barrios. Han ganado los comunistas, se quejó uno. Es un concurso abierto, participa todo el mundo, presentan trabajos, vosotros opináis. Fue el momento de llevar las ideas a la práctica. El comité de EMK y Barullo editan un programa ganador para que quede constancia. Hay una convocatoria amplia y un buzón de ideas. Hay una comisión variada participativa de ciudadanos. Los concejales y la alcaldía se van de vacaciones. En el salón árabe colocan el campamento central de fiestas. En este salón noble venia gente de barrios, de asociaciones de vecinos y comparsas. Las comparsas y la comisión de fiestas recogen muchas cartas de jóvenes que mandaban. Josep Zuazo, nuestro amigo y compañero de sueños, era el padre de la corrika. Tenía un gran encanto personal. Caía muy bien a la gente. Combinaba bien tradición y modernidad. Tenía ideas tradicionales sobre el mundo folclórico. El Bilbao del 79 era en blanco y negro, y Josep era en color, tenía una sensibilidad especial para muchas cosas. Era capaz de dedicar mucho tiempo a cosas en las que nadie se empleaba. Iba a contra corriente. Era ingenioso, seductor, creativo, imbatible en las conversaciones. Un tipo muy potente. Era exótico. Llevaba corbata en horas libres, no porque trabajara en un banco, porque daba clases en una gaoescola. Tenía una sensibilidad especial. Era como Txomin Barullo. Hay que recordar también a Fernando Toja, comparsero. Era elegante, desprendido en dinero, conseguía datos de todo. Creó las fiestas civiles patronales.
Mari era la diosa de la fertilidad y de la naturaleza, un mito pre cristiano y vasco. De ahí viene el nombre de Mari- jaia. Se crea Marijaia, representa lo femenino de las fiestas, de Bilbao. Había que recuperar la fiesta. A Mari Puri, la creadora del muñeco le dieron unas máscaras, le dieron el nombre y la dijeron que se iba a quemar con las fiestas. Marijaia era una persona que había esperado mucho tiempo para divertirse. Para bailar. Debía tener los brazos en alto para saludar. Lo suben en un coche dan 6 que se abre por el techo. Así lo llevan a Begoña. El primer pregón fue improvisado.  Se sorteó la lectura, o por designación, de la muchacha que lanza el chupín. En el 79 toma forma el chupín. La chupinera del siglo era un personaje creado por Emiliano de Arriaga, la única funcionaria del ayuntamiento era la señora de la limpieza, ese cargo pasaba hereditario a la hija. Se creó un programa de conciertos y actuaciones, se libera el arenal del tráfico para que la gente pudiera andar. Con el desplazo de la gente se llena Bilbao de todo. No había ayuntamiento ni policía municipal ni queríamos que hubiera en la fiesta. Era una fiesta desde el pueblo para el pueblo. No hubo conflictos. Ni broncas ni follones. En agosto del 78 teníamos el ayuntamiento en nuestras manos. Las txoznas eran muy rudimentarias, hechas con muy poco. En la plaza nueva hacíamos manualidades de barro y Kirmen Uribe hizo una mari jaia de arcilla.  Se meten en el mundo musical por el grupo musical de Basurto.
Resultado de imagen de aste nagusia documental de victorResultado de imagen de aste nagusia castañares 82
Es el año de las elecciones democráticas, y la victoria del athetic. Montar txoznas y comparsas. Se pidió el doble, y se quedaron cortos. José María Amantes, comparsero, decía que eran unas fiestas del copón, no había móviles, esto es cojonudo. Se acababa el pan el chorizo y el calimotxo. En agosto estaba todo cerrado. Pillo de sopetón a todo el mundo. Mari Puri hizo una falsa esquela de Mari jaia y la publicó en el periódico. También confeccionó un ataúd de dos metros y picos de color amarillo, como vestidos del papa, para hacerle un entierro marinero. Era el símbolo de las fiestas. Acaban las fiestas con la sensación de que algo ha pasado gordo. Deja la cartera Bittor Allende comparsero, y se dedica a dibujar y hacer las fiestas. Su familia le pagaba la carrera con gran esfuerzo. Acabó la mili y luego hizo lo de las fiestas. Fernando Toja y otros decidieron que había que recuperar los carnavales, los gigantes y el gargantua. Se recuperaron los carnavales con la semana grande. Los carnavales fueron la consecuencia del éxito de las fiestas. En el verano del 79 en las calles aparecía Mari Jaia. Reservaban los turistas las fiestas para ir a Bilbao en verano. Era un ritmo mejor organizado, pero igual de festivo. Marino Montero estaba al cargo de la comisión de fiestas. Santi Brouard y Pedro López Merino, dos médicos, liberales de convicción, entendieron que la gente de la comisión sabía lo que hacían con las fiestas y ellos refrendaron lo que se propuso. Si hacía falta que firmasen firmaban. Entran colectivos de Bilbao, Vinuesa con la cadena Astoria y montan el rollo teatral que es ahora Bilbao. 4 grupitos de revista y vaudeville o el teatro de Manolita en Argentina era lo que entendían entonces por teatro. Tenían buena relación con la plaza de toros. El ercilla y hotel Carlthon se involucran en las fiestas. El centro es el arenal, pero ocupan todo Bilbao en sitios de desahogo. Marije Agirregoitia fue elegida como nueva txupinera. Se estipula que sea una mujer. Le tocó a Uribarri y deciden que Marije lance el chupín. En el 78 saliendo del franquismo la mujer estaba en desigual condición con el hombre, sin representación social. Asomarte a un balcón con miles de personas abarrotando el arenal debía impresionar y ver el puente, y que no había un cacho de calle no ocupado. Estaban tan a gusto que nada lo podía fastidiar.
Resultado de imagen de aste nagusia documental de victorResultado de imagen de aste nagusia castañares 82Resultado de imagen de aste nagusia castañares 82
En el Bilbao del 80 gobierna el alcalde Castañares. El ayuntamiento quiere tener más control de la situación. Una cosa era la representación política y otra la participación ciudadana. Surgen tensiones y roces cada vez mayores. Querían tener el control de la asociación de fiestas. Hasta aquí habéis llegado, iros para casa, ahora lo hacemos nosotros. Ellos no fueron flexibles, no estaban de acuerdo. Hay una ruptura con el ayuntamiento. El ayuntamiento pone a Santi Brouard como presidente comisión de fiestas y delega en Tasio Erkizia y lo convierte en miembro comisión de fiestas y a la vez representante municipal. Trabaja de forma puente. Castañares publica un decreto suspendiendo la comisión de fiestas, y diciendo que la alcaldía asumía las fiestas. El PNV y el ayuntamiento hace su cartel y la comisión el suyo. Es una bomba de relojería del franquismo en la democracia. Querían tomar las riendas del ayuntamiento. Nombran a Padura de presidente. El PNV toma el control y lo municipian todo. Quieren cargarse la comisión popular y hacerlo a su gusto. José Luis Padura es elegido miembro presidente de la comisión de fiestas. Es más financiero, un directivo de hacienda. Se entera por el periódico que le habían nombrado. Comanda una comisión que era él y poco más. Ya no había salida. Fue un problema político el del 80, la gestión de fiestas, desde la autoridad política pública o desde colectivo amplio ciudadano. Bitor allende hace un cartel que se expone en la sala BBK y el ayuntamiento le llama y el concejal le felicita por el cartel y le dice que si podía llevar el cartel al ayuntamiento. “Ya no es mío, lo he entregado a la comisión de fiestas que ha organizado el concurso”, responde. No podía ni quería llevárselo. Y le piden hacer uno parecido. Le iban a dar 60 mil pesetas por el premio y él ya las veía peligrar. Convoca una reunión de prensa y aparece en los periódicos diciendo que el concejal le quería sobornar. En el cartel de Mari jaia aparece la cara del alcalde, su slogan de campaña era “el hombre capaz”. Y escriben “Mari Castaña, la mujer capaz de cargarse las fiestas de Bilbao”. Aparece en el cártel Marijaia en blanco y negro con la cara del alcalde. El humor descongestiona la tragedia, alegra la vida. Marino montero, Ritxi de tximboa de la tzoznak de entonces silban al alcalde. En la plaza ayuntamiento desangelada, aparece el alcalde temblando como un flan, por el papelón que estaba haciendo. Lee el pregón, con un final vibrante en que felicitó con un “felices pascuas”. Lio 8 grupos para montar las txoxnak. Consiguió solo 8 casetas. Las monjas han montado una txoznak también. Santiago Burutxaga fue elegido para la comisión de fiestas del 78. Apuestan por la filosofía de la fiesta. Se organiza sin recursos, pero con éxito un fin de semana de aste nagusia en septiembre. No costó ni un duro. Se le llamó la Asteburu txiki. Lo propone Marino Montero en la comisión de fiestas del 78. Apagaron las luces de las farolas, y los de la comisión lo agradecieron; así era más fácil encontrar las luces de los bares abiertos para continuar la fiesta. Pacta el ayuntamiento con el pequeño movimiento ciudadano de las comparsas. Se hace una comisión mixta formada por 7 corporativos y 7 representantes de comparsas. Desaparece la representación ciudadanía. José María amantes fue comparsero. Las elecciones, por polémicas que fueran, se tomaban por consenso. Las reuniones en el ayuntamiento acababan en el bar la tortilla. Llegan a acuerdos. No hay fiesta si el alcalde se enfada. Hubo un paréntesis forzado. Y una toma de nuevo de las iniciativas, más participativas y con más ganas. Le hacen un video en el 81 a la Ochoa, creían que el personaje no existía, que era como la pantera rosa. La Ochoa cantaba “Ser mariquita no es un delito, lanza el grito, libérate, si estas vivo y no muerto dale gusto al cuerpo. Libérate”
Resultado de imagen de aste nagusia documental de victorResultado de imagen de aste nagusia documental de victor
En el 83 empezaron los nubarrones con Julián san Cristóbal el señor gobernador. Fue el origen de la guerra de banderas. Coge una partida de maderos, lo lleva al ayuntamiento y pone banderas a la fuerza sin consultar con alcalde. El ayuntamiento está ocupado militarmente y la mayoría de la corporación se traslada a Garellano. La policía española ocupa el ayuntamiento, quita la ikurriña. El alcalde llama los concejales de PNV y HB. Han ocupado el ayuntamiento y se trasladan a Garellano. Hay porrazos y huracanes de banderas.
Resultado de imagen de aste nagusia castañares 82Resultado de imagen de aste nagusia castañares 82Resultado de imagen de aste nagusia castañares toreros
Si crees que en el cielo hay nubarrones aun no has visto la verdadera tormenta. Empiezan las famosas inundaciones de Bilbao del 83. Llovía todo el rato, era una lluvia tropical, a la tarde. El agua pasa por encima de las txoxnak. Un comparsero le dice al policía, sabiendo que debajo del uniforme hay una persona; “esto se va a inundar, deja las puñeteras banderas y marcha para casa”. Los de la comparsa se ponen a limpiar de noche y de día. Cada barrio hizo lo que pudo. José ángel Iribar fue el pregonero. Fue increíble la solidaridad que hubo, todos queriendo ayudar. Santiago Burutzaga, de la comisión fiestas 78, destaca la intervención del estado. Los soldados ayudaron en las inundaciones. Al alcalde gobernador le comentaron que la gente de Bilbao estaba trabajando, él dijo (pensando que estaba a micrófono cerrado): “todos los que están con la pala son unos hijos de puta”. Hubo una manifestación. Eso pudo acabar con cargas policiales y represión, pero cambian el tono de las protestas y dicen; “señor gobernador usted es un bombo”. Podía haber acabado como el palacio de invierno en la revolución rusa del 17. Se presentó una demanda. Propusieron una penitencia para este hombre que era que subiera a las escaleras de Mayona Begoña con garbanzos en los zapatos, pero cocidos porque estaban contra la tortura. No se dignó a acudir el gobernador. Nos puso querella criminal como ataque a la autoridad. Ellos respondieron; “la autoridad hay que ganársela, no te la da un título o un traje”.
Resultado de imagen de aste nagusia castañares kirmen uribeResultado de imagen de aste nagusia castañares torerosResultado de imagen de aste nagusia documental de victorResultado de imagen de aste nagusia castañares inundaciones 83
La Aste Nagusi, opina Kirmen Uribe, es una fiesta joven, no como las que se hacen a la virgen de Begoña desde hace años. Hay una identidad critica participativa. Es una fiesta joven, pero con futuro si la gente participa y son populares. Si cae en el elitismo dejará de tener futuro. Se ha mantenido durante más de 35 años. Ha surgido del pueblo para el pueblo. La sociedad ha cambiado y las fiestas con ella. La fiesta es única porque la gente de Bilbao es única, opina Joseba Solazabal. El concepto de divertirnos en Bilbao es muy particular. Las txoznas no están apartadas de la urbe sino en el centro de Bilbao y hay mucho espíritu popular, y hay integración en la semana grande. Juega un papel importarte las comparsas, dinamizadoras de las fiestas. Si sólo hubiera habido comisión, hubiera caído en aguas de borrajas. La fiesta es de la calle. El programa no es tan importante, quien va a tocar, como los bilbaínos que lo celebran. El artista viene ese año, pero luego se marcha, o el artista, el torero…. Son elementos que la decoran, pero las personas de Bilbao las hacemos distintas. Si quieres vender Bilbao tienes que vender originalidad y autenticidad, y no una cosa fría. La Aste Nagusia es Bilbao en su salsa.




No hay comentarios:

Publicar un comentario