lunes, 16 de mayo de 2016

Buda, el Tao, Freud, Lacan y Jung y el humo de rosa

en este articulo quiero arremeter contra dos filosofías que no me gustan; una es el budismo o taoísmo, las religiones orientales en general. la otra es la seudo filosofía y seudo religión de las novelas de autoayuda.
Las religiones orientales, como todas las religiones, son una moral de esclavos, porque es más importante el Dios de cada una que el hombre y su vida en concreto. aunque sea una religión sin dios como es el budismo y el taoísmo (aunque se diviniza a Buda y a Tao) Es una religión del conformismo, del sancho panza, ya que su principal forma de alcanzar el nirvana es eliminado el deseo, el yo, lo racional, eso tan natural del hombre de soñar y desear, de querer un futuro, de tener aspiraciones, deseos, sueños...
Si quieres desorden vas a sufrir, no te alejes del rebaño, de la manada, de la religión y la comunidad. Tao dice; si eliminas el deseo eliminas el sufrimiento. el budista quiere eliminar el deseo. El único deseo sea no tener deseo. Schopenhauer dijo todo deseo es una necesidad y por tanto es una carencia. Shopenhauer y su discípulo Nietzsche fueron los primeros budistas. Aquello que necesitas en el deseo, es una dependencia, es una esclavitud, un alejamiento de la libertad. Olvidan estas religiones lo natural que en el ser humano es el desear. la taoísta es una religión sobre humana, como todas. La ley del deseo de almodóvar, el deseo de Cernuda... deseas, quieres, anhelas. Económicamente Masslow habla de las necesidades humanas, sexuales, sentimentales o de identidad del ser. Se materializa el deseo de uno en ser feliz y si no entras en depresión y frustración. El deseo te marca. Bobary es una individualista romántica que desea y por ello sufre. La filosofía zen, la contra cultura de los años 60, de los beats (kerouak, allen gisber) nos hablan de renunciar al deseo. ya no sólo a las posesiones materiales como decía San Agustín sino a la propia razón, al propio yo y fundirse en el nirvana o la ataraxia o el inconsciente colectivo (olvidando la parte racional que es el ego que es la que ordena este caos del inconsciente) En la novela "El Camino" casi nos imponen que hay que vivir el ahora tan de moda. no estar en el pasado ni en el presente sino en el ahora. Vivir es por lo menos un deseo de bienestar y de muchas cosas. El deseo se materializa, y si no viene la frustración y la destrucción cuando el deseo no se materializa. Los niños desean todo rápido y ya, lo quieren todo.  tampoco es eso pero no podemos renunciar al deseo, sería ir contra natura. Estos ilbros autoayuda nos obligan a vivir el presente, el ahora, no pienses, no future, elimina el ego y el deseo y serás feliz. Es la nueva filosofía del conformismo, del Sancho Panza. Podría escribirse la historia de una nueva Enma Bobary o un nuevo Alonso Quijano que intente comportarse como dicen los libros de auto ayuda que hay que comportarse. un quijote y bobary modernos.
El pensar en el pasado, para estos libros de autoayuda no sirve (pero sí sirve, para aprender en el presente) Zweig decía que para evitar nuevos errores debíamos aprender de los errores de la vieja Europa. es una Tautología principio final. A pesar de todo seguiremos cayendo en los mismos pozos y errores. el zen nos invita a eliminar el ego. es la superación del ego, del yo, de la razón. Cioran en ese maldito yo habla de  la razón consciente que se desarrolla en el ego e identidad. el budista dice; supera ese yo. la religión o la ataraxia griega también. Jung nos invitará a reunirnos con el inconsciente, con el imaginario colectivo, con una serie de mitos y símbolos y arquetipos. 
Tenemos un 90% de inconsciente y muy poco de consciente en la mente. Es otra nueva dialéctica; el ego, el yo y el súper yo, o el inconsciente, el consciente y el subconsciente o supra consciente. Este súper yo son los demás, la escuela, los padres, como nos han educado. Incidir en tu yo no depende de ti, te conforma en lo que eres, una escuela o otra te conforma una realidad. el Súper yo lucha contra el yo y contra los otros, contra el ello. Los Otros el ello es lo mismo, el infierno son los otros. Súper yo entra en tu Yo te guste o no, porque somos sociales. aunque muchos de nosotros somos inadaptados felizmente a lo social. El Ello o  id o inconsciente es lo que configura tu yo. Todo lo que no controlas y es irracional; sueños, recuerdos, fantasías, proyectos, el futuro, el pasado… porque ha pasado o aún no ha pasado. El inconsciente es el monstruo salvaje de nuestro interior, es nuestra parte animal, nuestro Calibán, nuestro Zaratrusta. es el niño interior, son las pasiones humanas, lo concupiscible, lo irascible de Platón, lo erótico y thanatico de Freud, (principio de eros y de angustia) lo real y social de Lacan, lo dionisiaco y apolíneo de Nietzsche. Este  inconsciente no puede salir entero a frote porque nos comportaríamos como animales, como psicópatas. Por eso establecemos un principio de realidad y de razón o racionalidad del que no nos salemos en la vida. así empieza la neurosis, la sobre valoración de la Razón Ilustrada, de nuestro Yo. cuando uno vive en lo racional, en el yo, es muy consciente, a veces hasta neurótico. cuando esa neurosis pierde el sentido de realidad nos convertimos en psicóticos; esquizofrénicos, paranoicos, obsesivos, compulsivos, maniacos, depresivos...  pero hay que tener en cuenta que esas reglas de lo que es neurótico y lo que es psicótico son convencionales, aunque no arbitrarias, quiere decir esto que son construcciones sociales culturales, una serie de normas establecidas por lo que decimos que una persona es cuerda o es loca. y esta visión ha cambiado a lo largo de la historia.
el inconsciente es reprimido severamente por el Yo, aunque para Freud la salida no estaba en la represión sino en la sublimación. es decir, yo tengo una fobia social tremenda pero la limpio con el arte, con la literatura. sublimas así los deseos de amor y angustia, de eros y thanatos y creas algo válido culturalmente. el inconsciente sale a flote en la hipnosis como vio Freud o en el mundo de los sueños que tanto gustó a dadaístas y surrealistas. ese inconsciente es lo que no te atreves a decirte a ti mismo. el ello está influenciado por el súper yo y por el yo. el súper yo son recuerdos de insultos de tus compañeros, normas sociales que te inculcaron tus padres, cantinelas que te han repetido al educarte, consejos... es el disco duro de la realidad. un caos que configura una identidad que nosotros prepotentemente creemos ordenada y racional.  en realidad nuestra sique es débil y desequilibrada pero a través de la razón la templamos. La sicología de Wiliam Reich lo divide todo en cargas, o energías (la carga orgásmica sexual) Sientes el mismo placer y bienestar en el sexo que tomando el sol de frente. estas energías se revitalizan.  El sicoanálisis lacaniano nos dice que todo es lenguaje. Para Lacan todo es lenguaje, con el lenguaje entras en la realidad. El lenguaje nos da el sentido de la realidad. Para Reich era más importante tomar el sol en una playa maravillosa mejor que todas las filosofías juntas y miles de psicoanálisis en un diván. Hemos de hacer caso a lo inconsciente, a la pulsión sexual erótica, al deseo a veces de destruir y llorar, a veces de crear. A las energías naturales. Lacan en cambio dirá; a mi dame lenguaje y no me das playas paradisiacas. Lacan es discípulo de Freud y Jung será a su vez discípulo de Lacan. Lacan está de acuerdo que todo es lenguaje, como dicen los estructuralistas, los formalistas, la semiótica y muchas corrientes más. pero hay un lenguaje también inconsciente, es el inconsciente colectivo. Para Jung la realidad se nos presenta a través de mitos, tipos, arquetipos, símbolos muchas veces inconscientes. Igual que Platón se basa en el Mytos para explicar el Logos, el ser humano tiene una mente que entiende mejor lo gráfico que lo textual, el mito antes que el logo, la anécdota antes que lo importante., lo inductivo antes que lo deductivo. Por eso en la edad medía la cultura era visual, a través del dibujo y del arte les metían el miedo al infierno en el cuerpo. una cultura iconográfica como la actual cultura audiovisual. y esto es lo que estudia la semiótica o semiología de Umberto Eco y toda la hermenéutica interpretativa. Ningún signo es gratuito, gratis, todo tiene un significado detrás, una intencionalidad, una manipulación. Nuestro cerebro entiende antes que el negro sifilítica muerte y todas las leyendas ancestrales de sus antepasados. Es como si existiese una mente colectiva y universal para toda la humanidad; el inconsciente colectivo. Dime que camiseta llevas y te diré quien eres. La escuela de Franfurt (Adorno, Marcuse, Erich Fromm) mezclan las interpretaciones de Nietzsche con el hypiismo de la época. Los símbolos se expresan a través del lenguaje engañador, herramienta el lenguaje y los mitos para explicarnos el significado de la realidad. Nietzsche decía que el lenguaje era todo. Cuando estudias una asignatura lo primero que haces es familiarizarte con los nuevos términos. quien conoce más términos del lenguaje conocerá más parcelas, más interpretaciones de la realidad. aumentando el lenguaje aumentamos la realidad. por lo que decía Wittgestein; los limites de mi lenguaje son los limites de mi realidad. Te haces con las palabras que más se usan en una ciencia y ya tienes medio camino ganado para interpretarla. si conocemos los códigos símbolos señales arquetipos mitos.... empezamos a conocer lo que estos codifican, que es la realidad, la cosa en sí. es decir; aunque la realidad y la cosa en sí estresantes que la idea y antes que el lenguaje.... si no tenemos lenguaje, si no conocemos estos símbolos arbitrarios y convencionales no podremos nombrar la realidad. el salvaje que no ha recibido educación ni cultura vive sin saber que vive, como los animales, come un helado que no sabe que se llama helado. es decir; no es consciente, no es culto. vive en lo inconsciente, en el ello, en lo real, sin poder hacerlo consciente. quizá sea más feliz que el hombre civilizado pero este buen salvaje no es consciente de su felicidad. En el nombre de la rosa umberto Eco dirá que está antes la rosa que el nombre de rosa, está antes la realidad que la idea, la existencia antes que la esencia... pero cuando nombramos la palabra rosa casi podemos hasta olerla. esa es la mágica de la literatura; hacer oler rosas donde no hay rosas de verdad. somos vendedores de humo de rosas

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