PARABOLA
DE LA SOLITARIA
El escritor parece que viva para escribir, para alimentar a su sed de narrar
que nunca sacia, igual que no mengua de devorar libros. “Escribir es una manera
de vivir” decía el Flaubert obsesionado con la literatura. Se vive para escribir. Escribir es una
vocación.
Los
románticos ven al escritor como un elegido de los dioses, inspirado e
iluminado. No se trata de algo tan determinista (imagen del Genio) pero tampoco
de una libre elección de la voluntad, tal y como lo veía Sartre. El juego de la literatura no es inocuo del todo, tiene consecuencias contextuales, sociales, sirve para fines políticos y para cambiar el mundo. Quizá no de forma tan tajante como lo veían los poetas marxistas, pero desde luego que el arte cambia la súper estructura ideológica, o más bien cultural, de una sociedad concreta. Muy a largo plazo pero las ideas mueven el mundo, cambian las mentalidades. No narra la Historia el escritor, sino una historia paralela, una nueva realidad: su ficción, su mentira, su nuevo mundo. Y esa idea pronto se convertirá en creencia. Y la utopía, el mundo perfecto del escritor influirá en sus lectores, haciéndoles plantearse su propio mundo. Cada libro cambia un poco nuestra forma de hacernos hombres, deja mella en nosotros. Ningún libro pasa por nuestra vida sin hacernos mejores o peores personas.
EL
CATOBLEPAS
Toda novela es la biografía disimulada de su autor, esta ahí presente en todo.
Es un streptees al revés pues se va vistiendo de metáforas y técnicas. El
novelista no elige sus temas, es elegido por ellos. Toda memoria inventa (En
busca del tiempo perdido) Lo real del recuerdo es igual a lo soñado. Ha de escribir sobre
los fantasmas que le atormentan, sus obsesiones.
EL PODER DE PERSUASIÓN
Forma
y fondo son uno. La historia depende de la manera de narrarla. Es lo contrario
a la sensación de extrañamiento de los estructuralistas o de encantamiento o de
distanciamiento del teatro del absurdo contra- burgueses de Bretch. Se trata de
aproximarse escritor- lector en un nexo común, acercarse, comunicarse, captar
la empatía del lector, persuadirle de que tu ficción es realidad.
EL ESTILO
Buscar
el propio estilo. El estilo es siempre arbitrario y una impostura, una mascara
y una apariencia. No caer en el maniqueísmo. No imitar a los maestros (sólo en
su esfuerzo, tesón...) El
estilo no es la corrección (hay estilos trasgresores y escritores muy correctos
gramaticalmente pero plomizos y aburridos) El estilo es el lenguaje de la
naturalidad, el que apenas se ve en la narración y no nos desvía del tema. El
que no se nota, ni percibe, neutro, para hacer creíble el fondo sin que se
extrañe por la forma. Si admiran la forma, significante, pierden interés por el significado, fondo, tema. Por eso son un peligro los juegos verbales y no se debe abusar de ellos, ya que distraen sobre lo narrado. El mejor estilo es buscar la palabra exacta para el concepto o imagen exacto.
El “most juste” de Flaubert que encuentra en la tentación de San Antonio. (Un estilo objetivo, de tercera persona que no interviene)
“Una forma que no encuentra mi estilo” Verso de Rubén Darío.
EL
ESPACIO. EL PUNTO DE VISTA ESPACIAL DEL
NARADOR
Dentro
de lo narrado, fuera o incierto- ambiguo. o Narrador personaje. Primera persona. Intimo. Desgarrado. Directo. Supuestamente sincero y confesional.
o Narrador personaje que interviene en la acción de forma secundaria
o Narrador omnisciente. Dios objetivo Flaubert independiente desligado o protector
o Narrador ambiguo escondido en la voz tú
EL TIEMPO.
No
es igual el tiempo de lectura, del proceso de escritura que el que trascurre en la
novela. Tiempo diferente, tiempo sentimental y reflexivo. No es un tiempo real.
Visión de lo narrado como algo ya acabado que va a relatarnos, ya trascurrido.
Clásico. Tiempo futuro (narrador) y tiempo pasado mediato (o narrado) Cuando despertó, el dinosaurio estaba ahí.
Pretérito perfecto de Azorín. Cuando ha despertado, el dinosaurio todavía está ahí.
Visión de lo narrado como dinámico, sucediendo, en curso.
Presente. Despierta y el dinosaurio esta ahí. Futuros. Despertarás y el dinosaurio estará ahí. Cuando despiertes, el dinosaurio todavía estará ahí Cuando hayas despertado.
EL NIVEL- PLANO DE REALIDAD.
Múltiples planos de realidad, tantos como prismas de narrador.
Plano fantástico (ideas, trascendente) o real (concreto, palpable). En el dinosaurio todavía esta ahí pasa de lo fantástico a lo real. Otra vuelta de tuerca en literatura (y Los Otros en cine) plantea dos interpretaciones o vueltas de tuerca:
Relato real pero subjetivo: La institutriz, solterona reprimida, es una histérica, fantástica, esquizofrenia, alucinadora de fantasmas.
Relato fantástico: Los fantasmas existen.
En la novela de Cortazar “Rayuela” eternamente has de leer los dos últimos textos (de la realidad a la fantasía, de un lado del espejo al otro) En el Relato Fantástico los maestros son Borges, Kafka y el realismo mágico. Mundo objetivo de personas, cosas y hechos. Mundo sujetivo, interior, introspección sicológica, sentimental, reflexivo.
Proust en el plano de realidad de la memoria y Joyce en el plano de realidad de la conciencia, del monologo interior. (o el túnel de Sabato que además es amoral) No tiene que dar la sensación de leer un resumen de novela, sino de vivir esa novela. la novela debe suplantar la vida al lector, hacerle meterse en ella, sumergirse, adentrarse, olvidar su rutinaria, aburrida y pedestre verdadera realidad.
MUDAS
Hay
mudas y transacciones entre narradores, tiempos, espacios y planos de realidad.
La muda del pasado al presente es la matanza y de ahí al futuro, la esperanza.
Los saltos cualitativos son mudas que provocan catástrofes ontologicas (saltos bruscos o paulatinos, lentos y pausados como en el castillo y el proceso de Kafka, aunque en la metamorfosis se adentre en lo fantástico desde el principio) (lo mismo ocurre en Moby Dick con la cacería de una ballena fantasma, un naufragio prolongado eternamente)
Cortazar es de los mejores escritores usando mudas y saltos cualitativos de lo real a lo fantástico. (te llevas sorpresas pues el mismo destruye su mundo ficcional)
La muda por sí misma ni perjudica ni añade nada al texto, hay que saber usarla y no abusar de ella. La mejor novela fantástica es la que lo fantástico aparece sin intermediación del escritor sorprendiéndole a él mismo. El escritor no escribe, son casi las palabras las que se escriben solas. El es un mero vehículo.
LA CAJA CHINA O LA MATRUSKA RUSA
Una
historia lleva a otra. Meta narrativa desde las mil y unas noches o el quijote
hasta la historia interminable o las novelas de personajes. No han de ser
historias inconexas, sino coherentes, con un hilo argumental, con un enlace. NO
una mera yuxtaposición sino una simbiosis.
EL
DATO ESCODIDO, IMPLÍCITO, MISTERIO; SILENCIO; NO SE DICE, SE SUGIERE
No
se impone se propone, como decía Aristóteles. Economía narrativa, lo que
cuentas sólo es la punta del iceberg de lo que sucede o ha sucedido. ¿Qué habrá
pasado? Misterio. Elementos elípticos y explícitos. Para burlarte de las
minuciosas descripciones realistas describe un paquete de tabaco: su forma,
tamaño, color contenido, cigarros, fabricación, inscripciones... El novelista
elimina una cantidad de fragmentos vitales prescindibles, superfluos... y se
queda con lo esencial de la vida.
LOS VASOS COMUNICANTES
Una
historia ha de llevar a otra, citas, interrelacionar los elementos entre si
para crear una cohesión coherente meta literaria.
EL METODO Improvisación, inspiración, escritura
automática. Fogonazo = momento en que el escritor conecta con su historia. La
creación es una habitación oscura en la que el escritor vislumbra una luz. Las
historias no parten de una idea sino de una imagen. La novela surge por una
conexión de ideas relacionadas y maduradas” (M. Molina) «Nunca me planteo
escribir sobre algo en particular. Las historias, en mi caso, surgen de algo
que veo, una frase o un sueño que tiene que ver con el descubrimiento de un
lugar.». G. M. Garzo. Planificación argumental. Cada idea en un cuaderno. «Es un
diario de navegación donde hay notas, muy sintéticas, y aportaciones a lo que
puede ser el mundo de la novela, la trama, las situaciones, los personajes...»
Un plan muy ordenado, cohesión, en capítulos, escenas...
TIPOS DE PERSONAJES
Personajes planos. Personajes arquetipos, tópicos, modelos, prototipos, ni siguiera tienen un rostro, son ideas maniqueas con patas y movidos como títeres o peleles.
Personajes demasiado vivos. Los personajes se convierten en una presencia real, angustiosa, vivificados, se adueñan del escritor obsesionándole. Son personajes contradictorios, reflejos de él mismo o que se parecen demasiado a personas de su entorno, a fantasmas..
Personajes literarios. Personajes contradictorios extraños para el mismo escritor. Viven su vida en otro plano de la realidad y el escritor sólo los espía y describe, no se implica tanto en ellos que al final no pueda escribir con cierta objetividad.
pene
ResponderEliminar