Elva nos da hoy esta charla en la
casa de cultura Clara Campoamor sobre la exposición de Goya organizada por el
museo de Bellas Artes de Bilbao. Se ofrecen tres visitas a la exposición de Goya
donde se exponen 84 obras, es una exposición enorme. Es también una exposición
diferente. Se sorprende del tipo de obras que nos han traído. Generalmente nos
olvidamos de la coletilla de pintura ilustrada. Y pensamos en Goya, en las
pinturas negras. Pero la exposición abarca un periodo de tiempo concreto, el
último tercio del siglo XVIII. Son encargos reales estas obras de Goya. Están
contextualizadas. No todas las obras son de Goya sino también de los artistas
que trabajaron con él en la corte en estos años. Es una exposición que tiene más
amplitud. Es del primer periodo de la formación de Goya como pintor. No
esperéis las pinturas negras que el Prado además no prestaría nunca jamás. Es una
exposición extraña, pues estamos acostumbrados a un orden cronológico de obras,
pero está colocada por ámbitos temáticos y no definidos. Tiene muchas líneas
argumentales. Por ejemplo, hay una sala dedicada a la caza, al tema este, o una
sala dedicada a las diversiones, a los retratos femeninos o dedicada a los personajes
que son protagonistas con Goya en esta época. No es una exposición que tenga
como protagonista el retrato en sí. Se han añadido dos salas más. Esta
exposición estuvo primero en Zaragoza. Se ha traído el mismo número de obras,
pero se ha añadido dos salas más con retratos que pintó de personajes de origen
vasco navarro. Es ambientar como era el arte en esta corte ilustrada en el
periodo que reina Carlos III y Carlos IV. ¿Cómo pintaban los artistas que
trabajaron con Goya? Es compleja por la cantidad de contenido que tiene la exposición.
Se ha hecho con la colaboración del museo del prado, del Bilbao, de Zaragoza, de
Pamplona, del BBVA, del banco de España, de colecciones particulares y de la
obra social la Caixa. La mayoría importante de obras son sobre todo del Prado.
La exposición se divide en campos temáticos. Hay otras lecturas de la
exposición. En cada sala hay unas vitrinas donde aparece la correspondencia,
las cartas que se va a escribir con Martin Zapater. Hay más líneas argumentales.
Goya y Luis Pare, hay un enfrentamiento entre los dos, son dos líneas de
trabajo muy distintas pero los dos tienen el mismo nivel plástico, la misma
importancia como artistas. Se demuestra como un pintor en el Madrid de la época
era importante si medraba y si estaba en la corte. Es otra lectura de la
exposición. Tiene mucha complejidad en cuanto a estructura.
Hay que contextualizarla la
exposición. Podemos hablar de la exposición horas y horas. Lo completamos con
lo que veamos en la visita. Hay gente en lista de espera o podemos verla por nuestra
cuenta. Se abre con este autorretrato de Goya, muy joven, en 1775. Es el
momento en que Goya llega a Madrid. No se hace alusión en la exposición a la
formación de Goya como pintor. Nace en Fuente todos, se forma en Zaragoza, pasa
año y medio formándose en Italia. El artista podía adquirir fama y éxito solo a
partir de estar en la corte de Madrid. Continuamente desde Zaragoza viaja a
Madrid para presentarse a los concursos de la real academia de bellas artes que
no gana ninguno. Va a Italia sin beca, sino costeado de forma personal. Es
importante en esas idas y venidas y cuando está en Italia. Hay un artista
Rafael Mengs que dirige todo el programa artístico de la corte española de Carlos
III. Conoce lo de Goya, se interesa por lo que está haciendo. Eso hace que
trabaje directamente para la corte, para el rey. En el autorretrato tiene 27
años, se ha casado con Josefa Bayeu. Va a hablar mucho de la familia Bayeu.
Tiene su primer hijo. Es el momento que se instala en Madrid. En la primera
sala de la exposición hay una serie de retratos y autorretratos, los personajes
protagonistas de esta vida de Goya en Madrid. Esta esa otra línea argumental
que es la relación que tiene con su amigo Martin Zapater y las cartas que le
escribe. Hay un retrato del museo bellas artes de Bilbao de Zapater. Hay dos
retratos de él en la exposición y un medallón pequeño de él. Es amigo de Goya
desde que va a la escuela, son amigos desde la escuela. Se dedica al comercio e
industria y a llevar las finanzas de Goya. Lee fragmento de una carta, donde se
ve el nivel de relación entre los dos. Guardó Zapater todas las cartas que recibía
de Goya. Goya no guardo las de Martin Zapater. Se ha publicado un compendio de
cartas. Se habían publicado en pequeños fragmentos. Ahora se ha publicado todas
que guardaba el amigo. Su amistad es tan estrecha que, aunque no viven juntos, (Zapater
sigue viviendo en Zaragoza, Goya en Madrid) a veces se ven. En una de las
cartas se ve el hermanamiento entre los dos. Esta línea argumental es
importante, la relación entre los dos. Hay trascripciones de las cartas de hoya
que estan expuestas, te las puedes llevar a casa en un folleto. Goya escribe
sin puntos ni comas. En una carta de diciembre de 1890 dice; el mayor bien de
cuantos llena mi corazón es acabar de recibir esta carta inapreciable tuya, me
avivas los sentidos con tus producciones, con tu retrato delante me parece
tener la dulzura de estar contigo, no creía que la amistad podía llegar al
estado en que estoy sintiendo”. Hay un medallón que le encarga un artista como un
retrato. Lo encarga para poder tener el medallón en su casa Goya y poder
contemplarlo. Le echa de menos. Tiene aficiones comunes con él, entre ellas la
caza. En las cartas le pregunta dónde ha ido de caza, con quién, qué ha cazado.
Otro protagonista fundamental
será francisco Bayeu. Goya se casa con la hermana de francisco, Josefa.
Francisco es el causante de que Goya esté en Madrid. La relación entre Goya y
francisco era peor que mala. Francisco era un hombre poderoso dentro de lo que
había conseguido como pintor de corte. Tenía una relación de mucha envidia, de
competitividad entre ellos. Los dos tenían personalidad. Goya era terriblemente
ambicioso. Francisco ve la categoría artística de Goya. Hay competencia
tremenda entre ellos. Dirigía el grupo de pintores que estaban decorando los
bocetos preparatorios para decorar los reales sitios de la monarquía española.
En un momento se necesita otro pintor para formar parte de este cuerpo de
artistas. Iban retrasadas las obras. Francisco le ofrece a Mengs, director
artístico de este proyecto, la posibilidad de llamar a su cuñado para que complete
este cuerpo de artista. Mengs había visto el trabajo de Goya en Italia. El rey
y Mengs dan el visto bueno para que Goya trabaje en este grupo. Francisco no
podía quedar mal ante el rey y Mengs y llama al que era el mejor. Esa es la
razón por la que Goya aparece en Madrid con su familia. Hace un autorretrato de
francisco como un boceto. En la parte inferior se ve la capa preparatoria del
lienzo, esos colores rojos que los pintores preparaban previamente antes de
pintar. Ese color rojo preparatorio se llamaba tierra de Sevilla y sobre él se
pinta. Lo hace Goya y todos los pintores de la época. Francisco deja parte de
la tierra abocetada como un boceto y de modo pintoresco se retrata con ese sombrero
llamado chambergo de ala ancha. Es curioso el autorretrato. Francisco era un
hombre un poco taimado. Le vemos con la sombra que proyecta el sombrero sobre
sus ojos y la mirada. El retrato de su hermano era lo contrario; el hermano de
Francesco era más pusilánime, poca cosa, segundón en la familia y ayudante de
su hermano francisco
Junto a estos retratos de
personajes protagonistas de la exposición está el retrato del marqués de
Esquilache, el único que se conoce. Se ven muchas cosas en esta pintura de
finales del XVIII. El autor es Giusepe Bonito es un artista italiano. Por otro
lado, el marques está representado como si fuera un retrato de corte, con
hieratismo, rigidez y este nivel de cómo quieren representar, pero aparece de
esta manera. Característico en el retrato de corte son los elementos típicos,
pero el retratado aparece sentado, girado en tres cuartos, tras un cortinón
típico que se colocaba atrás, la mano con un báculo de poder, frente a una escribanía
con papeles que nos indica su actividad. Fue ministro de hacienda y ministro de
la guerra. En la escribanía al final se ve un casco, un yelmo. Es curioso este
retrato por lo que representa. Él era el único personaje de clase baja que
había llegado a puestos de poder sin tener origen aristocrático. Era muy difícil.
Era de familia siciliana muy humilde. Carlos iii en Nápoles le nombra ministro
de hacienda y le da ese título por el nombre de una ciudad en la zona de
Calabria, sin más. El pese a su origen se sabe con esta imposición de poder
importante y se hace retratar como un gran hombre. La casaca es rica en
elementos. Hay un elemento que rompe con la idea del típico retrato cortesano,
el giro que tiene, y como tiene colocadas las piernas. Ese cruzar de piernas
abre el camino al retrato burgués, al gesto más informal. En estos retratos el
personaje está muy rígido, hierático. Esa liberalidad es ya nueva. Está tomado
de retratos que se hacían en la época en Francia e Inglaterra.
Dos de los grandes protagonistas
del panorama artístico cultural de la corte son Antón Rafael Mengs, artista de
formación alemana que trabaja como director de este proyecto artístico. Y al
lado Sabatini, arquitecto que la corte hace venir de Italia y recoloca y
restaura todos los reales sitios. Goya se introduce en ese programa artístico. Remodelaban
el palacio del pardo, el escorial. No quiere entrar en la cosa histórica. Cuando
arranca el siglo XVIII los Austrias son sustituidos por los borbones de origen francés.
Llega Felipe IV. Cuando llegan los borbones una cuestión que ellos reforman son
una reforma del programa artístico cultural que tiene que ver con los lugares
de los reyes o reales sitios. Es una reforma arquitectónica, a nivel de
interiores decorativos. Felipe IV, Fernando VI, Carlos III. El pilar
protagonista será la real fábrica de tapices de santa Bárbara. Nos muestra una
imagen de antes y ahora. Se sigue trabajando con las mismas técnicas y maneras
que se hacía en el siglo XVIII. La idea que tenían los reyes, el programa quedó
en manos de Sabatini y Mengs, querían decorar las estancias del pardo y
escorial con tapices que representaran escenas jocosas y de divertimento.
Querían separar el tipo de decoración de los lugares que consideraban “de
recreo” del resto del palacio real con pintura en serie. Tipolo pintaba escenas
mitológicas alegóricas religiosas en los lugares del rey. Pero estos eran
sitios donde el rey cazaba o se retiraba a descansar. La temática de estas
estancias debía ser más ligera. Se crea entonces para hacer esta reforma
decorativa un cuerpo de artistas que dirige el director principal Mengs.
Francisco Bayeu lo dirige. José del castillo o Ramon Bayeu son otros de los
pintores. Los programas que se encargan a estos artistas y los diseños son tan
numerosos que se necesitan a un pintor más y se llama a Goya. ¿Cómo era el proceso
de ejecución de esta decoración? No hacia Goya los tapices sino los bocetos
preparatorios o borrones, imágenes de pequeño tamaño que se pasaba luego a
tamaño real. A las imágenes preparatoria antes del tapiz los llamaban cartones
para tapices. No tiene nada que ver con el cartón. Son bocetos preparatorios hechos
en lienzo del mismo tamaño que el tapiz. Eso lo diferencia de los borrones. Los
artistas pintan todo el cartón y esa pieza pasa a santa Bárbara y ahí se ejecutan
los tapices. Hoy se sigue trabajando igual.
Se ejecutan desde atrás, los
nudos se hacen al revés los tapiceros se trabajan con un espejo delante de
ellos para ver cómo va quedando. El operario hace los nudos. Lo que vemos, las flores,
es ya el detalle del tapiz. Nos muestra un ejemplo de estos tapices; el tapiz
que corresponde a un cartón hecho por Goya que está en la exposición. Los tapices
son resultantes de los cartones. Había cartones de diferentes formas, los
rectangulares o apaisados eran cartones o tapices de sobrepuerta, encima de los
vanos, de puertas y ventanas. Los que iban en laterales de las puertas,
estrechos, se llamaban rinconeras. Hay tres formatos; estrechos (rinconeras),
apaisados (sobrepuerta) y los grandes que decoran propiamente las paredes como
el de la gallina ciega. Así pensó la decoración de los palacios. Trabajó para Carlos
III haciendo estas series. El primer tapiz era una escena de caza. La caza es
un tema protagonista de la pintura desde Carlos V y Fernando IV. Muchos cazadores
se han representado. Quien se dedicaba a la caza era el rey, los nobles o los
que tenían permiso del rey como Goya o Martin Zapater. El pueblo lo tenía
prohibido. Desde Carlos V la caza era lo que se roería para un caballero, lo
que le preparaba para el buen gobierno, para la guerra. Se le dio un sentido simbólico.
Nos muestra ahora un cuadro con mucho
protagonismo en la exposición. Aparece representado Carlos II, el monarca como
rey cazador. Envuelve un simbolismo importante. Es contemporáneo de la gallina
ciega. Lo pinta un año antes de que Carlos IIII muera. Estaba gran parte de su
tiempo cazando, le encantaba y se le veía en la carta, muy curtida, como si
fuera un labriego. Era muy delgado. Hay descripciones de viajeros que venían
por España y que cuando conocen a la familia real la describen su cara muy
tostada, y lo que recogía el sombrero mucho más clarito. Eso lo representa bien
Goya. Tras la muerte de su mujer. Amalia de Saboya se quería atenuar el dolor
por la muerte de su esposa.
A Goya lo entendemos como pintor
precursor de la pintura contemporánea. Pero para darnos toda esa modernidad se
sirve y toma como referente la traición de la pintura española o internacional.
Para pintar este retrato, por ejemplo. El está en la corte española y puede ver
la colección real y ahí hay todo de todo, Rubens, Velázquez... La manera de encajar
la figura en la escena del cuadro y el
gesto del rey esta tomado del bufón don juan de Austria de Velázquez. Nada que
ver con la paleta cromática, pero si en el encaje de figura en el cuadro y el
gesto. Usa a Velázquez como referente. Observemos cómo está girada la figura, como
colocados los hombres. Es un elemento inspirador para trabajar esta imagen. Se
dice de Carlos III que era muy austero. Siempre llevaba casacas grises muy
toscas. Va representado con la banda azul de Carlos III y el toisón de oro, esta
especie de becerrito colgado ahí que lleva el rey. admiramos su técnica y
paleta cromática. Eso aquí no se ve pero si en la exposición
A nivel compositivo trabaja de
forma parecida. Los fondos son paisajes siempre conocidos, lugares donde le gustaba
cazar al rey, en bosques del pardo o del escorial. Mete gamas de colores rosas
y azules. La zona media del cuadro tiene una intensidad de luz importante.
Queda la imagen como si fuera a contraluz. Tiene base preparatoria de este rojo
tierra, sobre ella se pinta. El contenido simbólico del cuadro llama la
atención. El rey se quiere representar como un buen rey, en un buen gobierno, y
un hombre cercano al pueblo. La monarquía de Carlos III ha sido prospera, se
han hecho reformas a nivel económico institucional artístico y esto lo cuenta en
el retrato el detalle del perrito. Tiene una correa donde pone el rey nuestro
señor. El perro es símbolo del pueblo, como símbolo de fidelidad, le es fiel a
un rey que ha creado 30 años de paz. Pensemos como ha sido el siglo 17 español.
La pintura refleja la cercanía al pueblo, el reconocimiento fidelidad que
recibe de sus súbditos.
Una de las medidas que toma el ministro
Esquilache es prohibir el uso de la capa y chambergo que ocultaba el rostro. Eso
provoca el motín de Esquilache. Se dice que es la causad del levantamiento
popular pero no es la causa real. Sube también el precio de la harina y del
pan. Carga esos impuestos sobre el pueblo. El pueblo se quejaba de la prohibición
de esa indumentaria que el pueblo considera genuina del pueblo español. Hemos
recibido a unos reyes franceses, nos hemos llenado de influencia francesa y el
pueblo quiere afirmarse en lo que es genuinamente español y suyo.
En la exposición de Alicia
korpovich había un artista italiano, Lorenzo Tiepolo que hacía escenas
costumbristas pintadas al pastel. Hay artistas franceses italianos que llegan a
la corte. Hay obras menores y otras con una gran calidad excepcional. Tiepolo
hizo estas escenas de género. Hay una señora que tiene un lunar negro en la
sien. Tiepolo es el hijo de jean batista Tiepolo. Intenta ser pintor de corte
como todos los artistas que llegan a Madrid. No trabajaba de forma formal, pero
le encargan pintar al infante Carlos Pascual y otros encargos de los reyes.
Lorenzo lo pinta con esa técnica al pastel. Representa a un niño de 9 años. No se
da la calidad textural en la diapositiva y no se ve lo excepcional que era con
esa técnica tan difícil. Le da un tratamiento textural diferente al armiño, la
seda, los encajes. El niño aparece con la escopeta y el tema de la caza. De
este niño hay un texto sacado de los episodios nacionales de Galdós. En un
fragmento describe la corte de Carlos IV y de este niño dice Galdós; “acostumbraba
a matar animales. Fisonomía tan bonachona jamás vi. Por costumbre saludaba con
solemnidad y cortesía a las personas que le salían al paso. Se le podría
confundir con un sacristán de parroquia. Era el que me parecía de mejor carácter
de la familia real. Luego vi lo mucho
que me había equivocado”, dice Galdós, “al juzgarle el más benévolo de los
hombres”. Resultó uno de los absolutistas peores junto a Fernando VII. Un mal
bicho. Hay un retrato con su hermano Javier. Vemos la calidad técnica que
tienen los dos retratos y esta anécdota que le parece graciosa por lo majete
que se ve al niño
Nos explica el proceso de creación
del cartón. El primer encargo de esta serie de cartones. Goya estuvo 20 años
pintando cartones para tapices. Una vez que se pintaban y llevaban a tejeduría se
hacían tapices del cartón (como la gallina ciega) se enrollaba y al almacén. Estuvo
tirado en almacenes muchos años. Primero en el almacén del palacio real otro montón
años. A finales del XIX un historiador los encuentra, los lleva al prado, se
valora y se restaura. Los cartones era el boceto previo al tapiz. Pero para Goya
no. Para Goya supusieron un laboratorio de experimentación de las ideas que a
finales de siglo reproduce en los disparates, los caprichos y su pintura
posterior.
¿Cuáles son los primeros cartones
que hace Goya? Francisco Bayeu está encima de él procurando que no se desmande.
El primer diseño es un cartón para tapiz de sobrepuerta, encima de los vanos,
que representa la caza con reclamo. El diseño es de francisco Bayeu. El ejecuta
ese diseño. Su cuñado no deja que invente, le tiene agarrado. Los que eran de
ejecución y no de invención se pagaban menos. Goya quiere que le deje inventar
por razones económicas. Vemos el detalle del jilguero en la jaula, el mochuelo.
El perro espera asustar a los pájaros y que se queden encerrados en la red. Reproduce
características del perro, el gesto, aptitud, la manera, su cara a punto de
saltar. Lo reproduce con maestría importante. No es un cuadro de invención de Goya.
Es un ejemplo de tapiz de rinconera, a los lados de las puertas. Tiene anchura
de 50 centímetros y 3 metros de alto. Había mucha dificultad para un artista en
encajar una composición creíble en ese tamaño. Ahí está ya Goya como artista
que inventa. El esquema compositivo de aquí se repite después. Es un cazador
que carga la escopeta, con un perro a sus pies y el árbol protagonista de la
composición que le sirve a Goya para marcar la verticalidad del cuadro. Hay una
zona media en que se proyecta una luz intensa y todo lo demás viene a
contraluz. Coloca planos paralelos de personajes. En primer plano el perrito, en
segundo plano el cazador, en tercero la capa rosa. La masa boscosa. Crea así el
efecto de profundidad. Esta pintura la ha trabajado mucho, es muy académica, se
define muy bien la pintura, con una pincelada muy compacta, muy escultórica.
Tiene una historia muy graciosa detrás. En 1933 se decide coser a este cartón a
otro cartón de otro artista porque van a utilizar el cuadro para decorar la
sede de una institución política en Madrid. Cosen un cuadro al otro para que el
formato sea un poco más grande. Pero al coserlo, es más ancho, el perro ya no está
en el centro de la composición, hay que desplazarlo. Lo recortan, lo dejan ahí.
En 2014 el Prado decide recuperar el original de Goya. Lo descosen y el perro
queda como estaba, primeramente. Los restauradores del prado hacen un trabajo maravilloso
de una manera exquisita y curiosa. Para que la composición quedara digna había
una imagen del pintor de zorro que la borraron, que esta tapada. Se ve el gesto
del cazador. Usa muchas fuentes tradicionales que moderniza continuamente. En
la iconografía religiosa puede ser un san miguel o un san Jorge matando al dragón.
Recoge esa iconografía, cambia la indumentaria y el tema y simbología para
crear otra imagen plenamente moderna. Toma como referencia la pintura
tradicional. Estas dos rinconeras se hicieron para el mismo lugar. Todas estas
obras corresponden al escorial y al prado y decoran el dormitorio real, los ante
dormitorios, el dormitorio de las infantas, lo comedores o despacho del rey. Son
dos laterales del mismo vano. Al museo ha llegado el que tiene al pájaro en la
mano.
Hay una
diferencia de 6 años entre ese y el de los pájaros. Sigue el mismo esquema
compositivo, pero simplifica la composición. No tienen necesidad de color los muchos
personajes (perro, cazador) Pone un solo personaje, pero no posa, nos da la
espalda. Coloca un escorzo girado hacia dentro que nos da un efecto de
profundidad en el cuadro. ¿Esa cosa curiosa de donde la saca? Uno de los artistas que más influye sobre gaya
y que Goya admiraba era Doménico Tiepolo, hermano de Lorenzo (el del retrato
del infante cazador) Su hermano hace ese tipo de pintura. Los dos hermanos
llegan a Madrid con el padre. Cuando muere Tiepolo, Lorenzo se casa con una mujer
de Madrid. Doménico vuelve a Venecia. Desarrolla una pintura original en cuanto
a los temas, estudia cómo se presentaban los temas y destaca su calidad como
dibujante. El nos saca lo que tiene dentro. Por como pinta propicia la futura
pintura prerromántica. En Venecia hace una pintura más expresiva. Lo vemos en
el cuadro del charlatán veneciano, un cuadro exquisito de la exposición. De lo
mejor que hay. Tiepolo en las dos escenas pinta lo que ve en las calles de
Venecia, el campin veneciano. Ahí se desarrollaba lo que pasaba en la vida
veneciana. Aparecen los vendedores ambulantes, personajes de clase alta o baja,
como el charlatán que vende no sabemos bien qué. A esta gente le da igual el
contemplador. El espectador no existe para ellos. Están a su actividad. Nos da a todos la espalda. Son personajes
pintados en grises, sin colores ni elementos cromáticos. Lo original de este
pintor es la expresividad que consigue, la ambientación de lo que pasa en el
cuadro con personajes que no nos hacen caso, están a lo suyo y nos dan la
espalda. Es algo muy original, usa colores brillantes, contrastadas las
sombras. Era un dibujante exquisito. Es una pintura mu carnosa. El impacto
pictórico tiene mucha capa. Lo que le sorprendía a Goya de este Tiepolo es esta
cosa original y este atrevimiento de colocar personajes que están en su tema,
en sus cosas.
Vemos otro cartón de Goya de
sobrepuerta, un poco apaisado. Representa dos niños pobres que cuidan a dos
mastines, perros que usaban en la caza y en la guerra. El paisaje de fondo son
paisajes conocidos, los bosques de estos dos lugares. El plano medio del cuadro
es lo que nos da la espacialidad de esta zona media. En la posición de los dos
niños, forman una especie de circulo, en el centro se sitúan los perros. Hacen
un corro con la mano extendida. El tema de este cuadro parece aparentemente ser
solo unos niños. Pero fijémonos cómo ha pintado Goya los niños. Estamos
acostumbrados a ver los niños pobres de murillo. Pero esos niños pecan de exceso
de dulzura y son unos niños que posan. Se ve la posición del pintor y los niños
como enfrente. Pero lo que hace Tiepolo es que los representa en su mundo, no
preocupados por quien los pinta, están a sus perros. Esa mirada del pintor a
sus juegos es nueva, una cosa más peculiar. Los museos a veces son cementerios
de elefantes. Nosotros vemos la obra así y nos quedamos así, indiferentes. Esta
obra se creó de cartón junto con otros dos, había un cartón central que representaba
la primavera, estaba este con los dos niños y este otro en el centro. Es un
niño de clase alta montada en especie de carnero. Goya consultó un texto del
siglo XVII de iconología iconografía de Cesar Iiripa, donde se ofrecen tipos de
iconos con su carga simbólica. La forma simbólica de representar el comienzo y
final de la primavera era con elementos de géminis, por eso los dos niños gemelos,
y de ares, el carnero, por eso el niño con la cabra. Estamos en una
representación simbólica de géminis como el final de la primavera. En la
lectura de las sobras hay que ver donde están expuestas, con que van acompañadas
y el momento del pintor
En la corte española había
pintores y cuadros más segundones. Temas de Tiepolo pinta a un charlatán que
habla al ciego músico, y alrededor los mendigos. Los primeros borbones empiezan
con esta reforma y decoración de los reales sitios y vienen artistas de origen francés
y a través de Isabel de Farnesio los autores italianos. La corte se conformaba
con todas estas nacionalidades. Un ejemplo de un borrón boceto previo a la
elaboración del cartón es el paseo de las delicias de un autor, José del
castillo. El tema es un momento de divertimento del paseo de las delicias. Se
pretende que no alterara la idea de que eran lugares de recreo. El cuadro es de
30x50. Un boceto borrón no es una obra de 4 rayas, era una obra acabada, pero
de tamaño pequeño. Se enseñaba a Mengs y al rey y el trabajo siguiente era el
que el artista pintaba el cartón grande. Al mismo tamaño de lo que iba a ser el
tapiz. Es de un tamaño considerable, de los cartones más grandes el de la
gallina ciega. Nunca llegó a ser tapiz. Se ve el protagonista de la gallina
ciega, ese señor con el cucharón. Cuando se encontraron los tapices estaban
enrollados de mala manera, doblados, llenos de quiebros, faltaba pintura…
El boceto pata las infantas estaba
en el Pardo. En 1788 muere Carlos III y sube al poder Carlos IV, al que el Pardo
no le gustaba nada. Le gustaba el escorial o irse a la granja y medio abandonó
el palacio y el proceso decorativo. De ese tema se hace un cartón y nunca un
tapiz. En santa Bárbara se venden copias al público. El dibujo previo tenía
algunas variables. En la orilla del rio hay un desfile militar y había otro
personaje más, esa cabecita que asume ahí. Esas son las principales
variaciones, varia un poco el paisaje también. Goya decide simplificarlo, que
la vista no se nos distrajera tanto en lo anecdótico. No quiere un aire
excesivamente jocoso, alegre y le da más un significado esquemático. Es la
danza de aldeanos de Rubens que Goya ha visto en las colecciones reales. A Goya
le gusta crear ese plano medio con ese corro que coge ese plano central. Lo
hace viendo esas obras de Rubens. La dinámica de movimiento que tiene Rubens es
diferente, pues estamos en el barroco. La de Goya es una imagen mucho más
congelada
Si algo temían los tejedores de
santa Bárbara era a Rubens o a Goya. Tratan de haber composiciones con campos
cromáticos. Buscar todos los hilos si hay muchos cambios sutiles de color, o tonos
graduales, es complicado porque hay que tejer luego. Los cartones de Goya
quedaban más expresivos que el resto de los compañeros, pero los exigía un
trabajo tremendo. En el pantalón del
señor hay 20 colores, pardos grises, naranjas. Eso para un tejedor era volverse
loco. Esa riqueza cromática que tiene Goya les causaba mucho esfuerzo tejerla.
Se ve la base preparatoria en rojo que Goya no tapa. La deja como parte de lo
que son las sombras, el proceso de sombra de la figura. Hace una pincelada muy
suelta, con el toque de color en el cuadro que representa. Decía el ilustrado
Jovellanos que había que promocionar entre las actividades para niños jóvenes y
adultos las actividades al aire libre que eran buenas para el intelecto y el
cuerpo. Se pone de moda la gallina ciega, un juego de niños, para aristócratas
que salen al campo a hacer sus fiestas y romerías. Todos son de origen noble, aunque
algunos no lo parezcan tanto. Algunos van vestidos a la francesa y otros como
majos y majas, el traje popular con las chaquetillas, las bastillas que son
esas faldas y las madroñeras, redes con las que se recogían el pelo. Todos
pertenecen a la clase alta. Se llamaba también el juego del cucharon. Iban golpeando.
Ha colocado Goya el mismo esquema; un fondo, la claridad en la zona media, la
claridad del plano del rio, del agua, donde vemos una línea iluminadísima por
ahí que permite definir muy bien los perfiles de los personajes. Está pintado
colocando un personaje en segundo plano, se van intercalando los planos. La
variación aquí que se corresponde con otra variación. Ese dinamismo no es
tanto. Es una figura bastante estática. Esa figura parece que congela el
movimiento del corrillo. Hay una figura que sale un poco en diagonal, se repite
el movimiento en el arbolito. Crea esos planos y el plano medio, de fondo. Toma
un referente muy claro usando ese color rojo potente en el cuadro y un blanco
que llama mucho la atención. Usa un pincel muy seco con poca pintura para crear
como hilos de color, como una trasparencia de la tela, como si pudiéramos ver
la saya que hay debajo o estos toques de color. Son golpes de pincel, muy
sugeridos, muy abstractos y con mucho empasto pictórico, mucha carga de color.
Eso crea vibración en el cuadro.
Otro tapiz que anuncia la pintura
posterior de Goya es el resguardo de tabacos, que era un cuerpo militar que se
dedicaba a cobrar los impuestos de tabaco, como un fielato. Esta obra anuncia
estas caras que no son tan académicas convencionales como en la primera pintura
de Goya. Son caras con mucha fuerza. No se queda con lo meramente descriptivo.
Nos habla de algo malo. No queda clara si pinta a los militares que recaudaban
impuestos o a los bandidos que se disfrazaban de estos militares. Es mas agrio
canalla en la concepción de los cuadros. El resto de los pintores hacen cosas
interesantes, pero de temática muy plana. Goya da pasos de gigante. Se adelanta
a la modernidad.
La novillada…son figuras de parte
superior. Esto es ya pintura contemporánea. Nadie le hacía sombra de Goya. Una señora
vendedora ambulante vende acerolas, frutos como ciruelas. No es solo vendedora,
es una escena de cortejo. A estas señoras se las tildaba de prostitutas y esto
se ve en el cuadro en las actitudes de la gente. Es un paso más allá que da Goya
frente a José del Castillo cuando pinta a la señora que vende bollos. Una
familia de clase alta le compra bollos y no hay más. Goya habla de otra cosa
que no es lo meramente divertido, de disfrute. La realidad española es otra y
el empieza a contar otra realidad que no reflejaban los pintores. Pinta muchas señoras
retratadas
Luis Paret era el único artista que
podía hacerle sombra a Goya. Es un autor menos conocido en el siglo XVIII.
Hacia un tipo de pintura diferente. Tiene influencia del paisajismo y pintura
documental francesa. Hace una pintura muy rococó con esa exquisitez, y la pose
aristócrata del rococó. La vista de Bermeo es el último cuadro que ha comprado
el museo de Bellas Artes. Damas de clase alta ven pasar las barcas. ¿Por qué Paret
no compite con Goya? Paret era amigo del infante don Luis, hermano del rey. Este
se retira a Arenas de san Pedro, se retira y lo retiran. Había llevado una vida
licenciosa, muchas fiestas tuvo Carlos III con Paret. Paret le buscaba las
señoras de compañía en las fiestas. El infante don Luis se casa con una mujer
que no era de su misma clase social. Le manda alli al infante don Luis. A los
amigotes de Carlos III se les destierra. A Peret le mandan 3 años a Puerto Rico.
Desaparece de la corte española. Si no trabajabas en Madrid para el rey te
quedabas como pintor segundón. Cuando le conmutan la pena y vuelve a España le
dicen que puede vivir en España, pero a cuarenta lenguas de la corte y los sitios
reales. Elige Bilbao y se queda casi 10 años pintando aquí. Paret no está en la
corte y por eso trabaja con una libertad que no trabajaban los que estan a las órdenes
del rey. Trabaja lo que le da la gana y como le da la gana. El rey le encarga
pintar los puertos de Vizcaya, como Bermeo. Reproduce con exactitud
documentalista todos los edificios, la torre Ercilla, el ayuntamiento. De Peret
se hizo un tablero de mesa con recortes de mármol que van incrustados. Paret
hizo esta vista del arenal del museo de bellas artes. Y hay otra que esta en la
Nacional Galery de Londres. Este cuadro está partido. Es la vista de Fuenterrabía
que se dividió por herencias el cuadro. Uno estaba en Madrid y otro en Bilbao
hasta que un día se juntó. Están enmarcados de forma diferente, pero los
colocan ahí pegaditos. Paret no compite con Goya porque no está en la corte.
Aunque hubiera estado en corte son dos estilos que no tiene nada que ver. Es un
pintor exquisito pintando, en sus pinceladas vemos cómo compone y piensa la
luz… El pelele es otro catón de Goya.
La exposición tiene dos salas
añadidas, con retratos importantes de personajes de origen vasco navarro. Le
riñe el museo cuando dice esas cosas, pero hay obras de poca calidad también. Goya
hace retratos para comer en que la calidad es maleja. Como en Picasso no todos
son obras maestras. Es un retrato con colores bonitos, un azul precioso que contrasta
con el rojo. De todos los vasco navarros es el único que nace en Bilbao, y
tiene un abuelo navarro. El retratado pertenece a una familia importante
dedicada a la banca. Se trata de Pantaleón Pérez de Nerin. Se va a dar un ciclo de conferencias sobre
personajes así. Fue el único que no se dedicó a la banca, estaba en el
regimiento de la reina María luisa de Parma. Cromáticamente es muy vistoso y es
el único retratado nacido en Bilbao.
Por último, Elba nos explica lo
de la mancha en el retrato de la reina. Si no nos lo cuenta no dormimos a la
noche. María Luisa de Parma era la esposa de carros IV. Decían de ella que era
fea, pero era una mujer muy guapa. ¿Qué pasa después de 24 embarazos? Nadie mantiene
su belleza. Ni Cindy Clifford. Su papel en el gobierno, su relación con Carlos IV
lo contará en otro momento. Enseguida pierde la dentadura la reina. Aparece con
la boca rara. Usaba una dentadura postiza que se la quitaba para comer. Tenía problemas
estomacales tremendos, no masticaba. Había perdido la dentadura y sufría
dolores de muelas y dientes. Había unos parches con una especie de morfina que
se ponía en la sien y paliaba ese tipo de dolores. Esa mujer lleva otro. Llevaba
ese parche de morfina. Se ve en muchos retratos de la época. Tenían también lunares
estéticos que se pegaban y quitaban, pero los de la cabeza eran parches terapéuticos.
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