sábado, 24 de marzo de 2018

PRESENTACION DEL LIBRO DE EDUARDO



A Manu, que presenta hoy en la casa de cultura de Villamonte en Algorta le ha maravillado lo rápido que Eduardo ha escrito los poemas. Eduardo (también conocido por sus amigos como Zuhaitz), calcula que tiene nos 2300 poemas escritos. Publicarlos todos sería toda una aventura editorial. Le daría para 18 libros. No se plantea hacer una antología de toda su obra. Pero sus poemas los va regalando a través del blog (parnasopoetico.blogspot.com) o de los poemas que manda a los wasaps de poesía sin fronteras, tertulianos poéticos y poesía bla bla bla. Al día nos manda tres o cuatro, y eso nos da idea de la rapidez, y de la productividad de su obra. Eduardo está metido en unas seis asociaciones culturales (escribe y lee, la sociedad artística vizcaína, la de la casa de cultura de Algorta, de Bidarte en Deusto…) Acude a noches poéticas, al poety slam de Bolo del Luz de Gas, a los spoken del hikateo, a la morada con los recitales de Daniela Bartolomé, a las tertulias del bar Zavala o el donisseti, además de a muchas conferencias. También colabora con cruz roja, o babestu (ayuda a los mayores) o la asociación contra el cáncer. Siempre le veremos con su eterna cámara de fotos, sacando videos o fotos de todos los actos. No se pierde uno. Aunque llegue tarde necesita estar en todos los sitios. Eduardo es un trabajador infatigable del lenguaje. La mujer de Manu le dice que le diga que descanse un poco, que se relaje. 

Manu anunció que abandonaba hoy su cargo de director de la asociación cultural Sotavento en Algorta y que pasaba el testigo a Eduardo. Será un buen presidente, y le tendrá a Manu de secretario. Manu calcula que en 4 años habrá aprendido el oficio, “a pilotar este barco, que no es nada fácil” Jokin, periodista de Onda Cero, bromea con que la primera decisión que tomará será sustituir al secretario, a Manu. Manu presenta sus poemas y dice que los admira, pero ni siquiera los ha leído porque no tiene tiempo. Este señor, Manu, resulta un personaje peculiar y estrambótico que ha hecho que esta presentación del libro sea bastante atípica. 

A la presentación hemos acudido doce personas por lo que ha resultado íntima y entre amigos y compañeros. Manu todo el rato nos interpelaba a los asistentes (la señora que no habla Barbara, Loli Rubio la genial vicepresidenta de la vizcaína, Jokin el periodista de Onda Cero que estaba todo el rato picándole como un buen picador…. Lo de picador ha sido idea de Miguel Rayo, aficionado a la tauromaquia. Manu tiene para todos, nos vacila a todos, pero en el fondo nos ama a todos, es un polígamo. Sahara saca fotos constantemente. Manu mencionó que conocía a la mujer de uno de los asistentes, de Agustín, que ha recibido un premio. También nos intentó vender un seguro de cultura. Nos habló de normativas legales que aún no se han implantado y de cosas que no venían al caso. Él es intermediario entre varias asociaciones que triunfan en varios ámbitos euskaldunes. A lo largo de la dirección en la asociación Sota Vento ha visto las cuentas a veces con optimismo e ilusión, a veces se ha llevado disgustos…En la presentacion tambien está Keny. 

Constantemente Sahara, también con su cámara de fotos, le pedía que dejara hablar al autor del poemario. Pero él preguntaba a los asistentes dónde habíamos nacido. Una señora le dijo que era la hija del maestro de Erandio, del maestro del pueblo y que vivió allí durante muchos años. Luego el padre compró una casa en Bilbao y fue trasplantada allí. Pero cuando murió su padre construyeron la tumba con piedra del pueblo, eso era quererle mucho. Miguel Rayo dice que él es de donde ha nacido y vivido. ¿y eso es provincia de? “El buen buey es de donde nace y pace”. No hay que olvidar de dónde venimos ni donde vivimos. Es un manchego bilbaíno. En su pueblo los ingleses, americanos y alemanes dejaron de comerciar con el mercurio. Se empleaba mercurio hasta para medicinas. Él ha jugado de niño con el mercurio y no le ha pasado nada. Miguel Rayo dice que Mikel, el periodista de Onda Cero, es un buen picador que le pega cortes y hachazos a Manu, que se está extendiendo y divagando demasiado. Miguel Rayo se pone a su vez a hablar de la magia de torear y opina que muchos pollos o gallinas que sacrificamos pagarían por cambiar su vida con la de los toros. Mueren un día, pero viven cinco años como reyes. 

El poemario se titula hikari (en femenino hikaru) que significa luz. El hijo de Eduardo le ha metido en la cultura de Dragon Ball y las series de televisión mangas y los comics mangas. Hace una especie de aforismos o de haikus, de origen japonés sobre el sentido zen de la vida, lo bucólico, lo artístico. Dice en pocas palabras mucho contenido poético. Trata de aportar luz con sus palabras, para él y para los demás. Nos habla en su presentación de la caligrafía tradicional japonesa, el Kali. Estuvo en una ciudad pacifica local y aprendió a meditar. Le atraía la poesía oriental. Son como imágenes mentales para relajarte, las koar. Son imágenes que pueden resultar absurdas, pero sitúan tu mente en un punto vacío de nirvana, en la meditación. 

¿Por qué lo titulo glorias áureas? Vio una exposición hace mucho en una caja de la BBK (cuando había dos cajas diferentes) sobre la industria, la minería, la metalurgia vizcaína. Se veían atardeceres en Sestao, con los altos hornos y al fondo las glorias áureas que son las nubes que quedan en el cielo tras el anochecer. Se dijo que si publicaba un poemario lo iba a llamar así. Aunque ha hecho trampas porque la foto es de un amanecer, no de un atardecer. Escribir es lo que le gusta desde niño y lo hará hasta que muera. Ha buscado la influencia en su hijo, en la cultura japonesa y en otros referentes. Admira a Bécquer y a los románticos eternos. Se identifica con los poetas de la experiencia. Con lo que ha vivido en su vida sobre ello construye su identidad literaria. 

La culpa de todo la tuvo un profesor de literatura. Él escribió una redacción que iba sobre los arrabales, las afueras de una ciudad. Se influenció en Bécquer. El profesor le recomendó que empezará leyendo a Damaso Alonso, a Carlos Bousoño, Vicente Alexandre, Luis Cernuda y que luego siguiera por el resto de la generación del 27. Él se enamoró de la generación del 27 y de la poesía surrealista. Cuando una persona quiere contar algo tiene que escribir lo que le surja, sin pensar en el tema de la métrica. Él se compró un libro sobre métrica que se ha quedado ya viejo y ha tenido que comprar otro igual. El ha ido recopilando carpetas y carpetas de poemas. Y su casa es como una isla rodeada de libros. Coger influencias de los poetas es como beber en una fuente, cada fuente sabe diferente, aunque sea la misma agua. 

Eduardo ha publicado tres poemarios; en 2015, 2016 y 2017. En sus poemas Eduardo recoge de todo un poco. Manu le pregunta por el ISBN del libro. Y por qué ha puesto la misma contraportada en el primer y segundo libro, pues solo cambia la foto. Manu le pregunta por qué ha puesto lo mismo; las dos solapas de su primer libro y del segundo coinciden. Eduardo bromea con que era una prueba para saber si el que ha leído el segundo ha leído el primero y se da cuenta de que los datos del autor son los mismos. Es una forma de pillar al lector. Lo que sí ha cambiado son las fotos y nos cuenta dónde ha sacado cada fotografía. A Loli le gusta más su primer poemario porque son poemas que eligió él mismo mientras que los del segundo los eligió más al azar. Sus dos primeros libros son de poemas, pero este es más bien de aforismos y haikus. 

A Eduardo le gusta la poesía existencialista y la social. Escribe sobre lo que le preocupa. Un día te hace un poema de muerte, soledad o sensación de angustia, de lápidas y cosas oscuras (que forman parte también de la vida) y otro te puede componer un poema amoroso. Sobre la soledad opina que una cosa es estar solo y otra el sentimiento de soledad. La soledad en compañía es lo peor, sentirse solo, aunque estés con gente. Le preguntan por qué sale en sus poemas la tristeza cuando luego es tan alegre en su trato a los demás. Ha enseñado a ala alegría a flotar en océanos de tristeza, remarca la frase porque le gusta. Registra las cosas que le han pasado, aunque siempre lo ha hecho en verso, no se atreve con la prosa. Alguna vez le han dicho que arranque el pasado doloroso de su vida (su separación matrimonial) pero arrancar el dolor sería como arrancar una página de su vida. En su diario hay paginas buenas y malas. La felicidad es un estado de animo e intenta manifestar la felicidad. No puede engañarse así mismo, ha de buscarla dentro y no fuera. La vida es una forma de poesía y la poesía una forma de vida. Para él esto es la vida. Lucha con la tristeza para desterrarla. La felicidad y las alegrías las utiliza constantemente, pero usándola en pequeñas dosis, guardándose siempre algo, como con el dinero. 

Cuando hace poesía social intenta abarcar todo lo que ve, el conjunto, las cosas tremendas no solo de su vida sino de la de todos. Puede adornarlo, pero en el fondo retrata lo que ve. Estamos todos conectados por hilos. Lo que le pasa al otro te afecta. La alegría es contagiosa y la tristeza aún más. Hay personas negativas o victimistas (el hijo no me visita, tengo enfermedades…) Los agricultores separan el trigo de la paja y la paja la dejan fuera. Hay que cribar nuestros sentimientos como hortelanos. Ver los problemas desde la cima, desde arriba, desde el observador, porque desde abajo no se puede ver el conjunto y desde la cúspide si se ve el problema y se relativiza, se ve como algo lejano. No puedes cambiar tu vida cuando vives dentro de ti, inmerso en tus problemas y no ves el conjunto. 

Eduardo opina que la tristeza es menos contagiosa. Un conductor de autobús estaba resbalado porque un viajero le había echado la bronca por no avisarle en su parada. Eduardo le dijo que por esos diez minutos de negatividad se podía pasar toda la mañana enfadado, y prolongarlo a lo largo del día o ser feliz en el resto del día que le quedaba. Para eso hay que hacer un ejercicio de conciencia. Eduardo le deseó que tuviera un buen día, pero estaba en el conductor lograrlo o no. Se reduce la belleza a esos instantes que no te puedes perder. Hay que compartir la alegría con los que estan presentes. La alegría hay que agarrarla y no dejarla escapar. Lo que cuesta es dar continuidad a la alegría. Eduardo está codo con codo con todos, con los 11 que estamos y con él mismo. Construye desde la cercanía. 

Manu dice que su libro le ha encantado, pero no lo ha leído. Manu se va por digresiones y divagaciones y nos cuenta que cuando volvió de una base americana en EEUU, donde estuvo varios meses (allí tienen más respeto que aquí, que la gente habla sin saber lo que dice), se compró una casa en Getxo. siempre ha estado vinculado con la cultura algorteña. Nos cuenta que se compró una casa en la Galea al volver de Israel. Manu interrumpe todo el rato a Eduardo y con afán de llevar él la presentación empieza a hablar de lo mal organizadas que están en general las asociaciones, y le dice a Loli que como es estudiante de Deusto antes de hablar deje hablar al profesor. A Eduardo le conoció en un bar cuando se presentaron mutuamente a sus amigos poetas. 

Eduardo dice que Bécquer es una de sus principales referencias y Manu dice que hay una calle Bécquer en Algorta. Manu compra ya pocos libros, pero siempre quiere que se los dediquen, para tener algo de la persona que lo ha escrito. Está metido en redes sociales. Dice que nadie le dirige su vida, pues el rumbo lo marca él. Se define como el mamarracho que está presentando al poeta. Pero es que a él no le gusta presentar libros.  Manu ha cometido la desfachatez propia de un sinvergüenza (según Mikel, el periodista que le vacila un poco) de traer el libro de otra autora. Autora a la que también conocemos. Es una historia de Bilbao en pildoritas de Esmeralda Hernando. Un amigo le recomendó el libro en juntas generales. Se tomaron un café en Renfe (invítame que no tengo dinero) Le gustó la camarera y se le cayó un neuroléptico y en vez de pisarlo se lo tomó. Empieza a contarnos que estuvo en la Misericordia (donde ha habido un homenaje al txistulari Mikel Bilbao por parte de Fernando Botanz) y en un programa de radio. Esmeralda Hernando es una bloguera de Getxo con la que coincidió Eduardo en el Getxo Blog. Parece que la autora tiene el don de la ubicuidad y habla de ese Bilbao que hemos tenido la fortuna de conocer. A ella te la puedes encontrar el día de Unamuno o en redes sociales, en la que Manu anda también metido. Tiene un reportaje fotográfico y es fácil de leer. 

Manu tiene solo 62 años, aunque parece mayor. Recuerda una reunión que hicieron con escritores de Getxo, muchos de ellos ya muertos como Ramiro Pinilla (aunque sigue su taller con Víctor Abad, Marta Barrón, Mónica Crespo, Jon Bilbao…) Estaba Jesús Maduregui, portero del Athletic que emigró a Venezuela y que fue pintor y poeta en la AAV. Manu es el peor presentador bien puesto que Mikel ha visto. a Manu Mikel le sigue a través del Facebook y le recomienda que escriba un libro propio. 

Manu es el único sobrino de Gabriel Aresti que tuvo a dos hijas y un hijo. Nos enseña unos libros de su tío, Jon María de Aresti. Uno es el intruso de Luis Caras (que no es el de Blasco Ibáñez. Manu le dice a Loli que hay muchos intrusos) y el otro es un libro de historia. La viuda de Aresti, rondando los 80 años, todavía vive, en el casco viejo, cerca de la bolsa que es donde se reúne la sociedad artística vizcaína, y nos ve a todos entrar y salir de ella. Manu conoce muchas anécdotas de su tío Gabriel Aresti, pero no las comparte. Se morirán con él y se perderán y es una pena, opina Mikel, el periodista de Onda Cero. Podía ser un legado para compartir. Ha recopilado anécdotas de su tío con otros escritores, pero está en eusquera. Las obras completas de Aresti, en papel de biblia, son un tocho impresionante de dos mil páginas en castellano y eusquera.

La AAV se reúne ahora en la bolsa, aunque durante 25 años se ha estado reuniendo en el café boulevard, ahora llamado café mercante. La asociación artística vizcaína tiene 75 años de historia y entre sus socios estaba Blas de Otero y su mujer Sabina de la Cruz, y también han acudido poetas como Fernández de la Sota, Carmelo Iribarren, Pablo González de Langarica, Jon Juaristi... Hace poco lo celebraron los 75 años editando su primer poemario colectivo, en el que yo participé como socio (aunque lo fuera de tan poco tiempo) Bromeando dicen que es un palomar al que acuden todas las palomitas. A pesar de que Manu señale lo mal organizadas que está esta asociación y otras, (porque en un mismo día coinciden varias presentaciones y ninguno tenemos el don de la ubicuidad para estar en todas), también la felicitan a Loli por su buena gestión al mando de la asociación. 

Una asociación es un buen lugar para hacer amigos y disfrutar de la poesía, pero detrás tiene que haber una persona que ponga y quite las sillas o que vaya al registro de asociaciones de la diputación en gran vía 85 y organice los papeleos, lleve las cuentas, organice los calendarios…. Kenny está ahora ayudándola y también Eduardo, pero todo el peso cae sobre Loli. Kenny alaba de Loli que la puedas llamar a las 11 de la noche o a las 9 de la mañana y siempre esté ahí para atenderte. Loli es una gran luchadora, no para y todos la queremos mucho. A cualquier iniciativa personal hay que hacerla movimiento y Loli está en el día a día, a pesar de su presidente que favorece a los pintores sobre los poetas. La asociación es un buen sitio para socializarse a través de la poesía. La asociación ha hecho mucho por la poesía, pero aún ha hecho más por las personas. Jokin el periodista de Onda Cero recuerda lo bien que estuvo el homenaje a los socios desaparecidos o difuntos. Ahora van a rendir homenaje a Daniel Aranguren, socio fallecido y Loli se pregunta si el periodista del mismo nombre es hijo suyo. Alguna vez Manu ha sido invitado a ir y ha ido con agrado, aunque no es un profesional de hablar en público. De hecho, no tiene ningún poemario publicado. El día 13 en la sala Gambara de la Bolsa se van a celebrar los premios Elías Amezaga y nos invita a ir. En la AAV se va a presentar este libro de Eduardo junto a otro del mismo autor.
 Loli recuerda que en la presentación de su primer poemario estuvo un joven de 18 años que entonces acudía al taller de la galleta del norte en la librería La Caraba con María Felicidad Pereda. Ese joven era yo, que luego he publicado cuatro poemas en el poemario colectivo de la AAV. 

Eduardo pone en tela de juicio lo que pasa en su vida, esos hechos sueltos quedan en la conciencia. Pero Loli cuenta que a un poeta le habló de un caso escabroso de asesinato y el poeta dijo que eso a los poetas no les interesaba. Era una penosa ególatra, aunque escribiera bonito. Nada de lo humano nos debería ser ajeno, decía Seneca (Aunque Loli pone en boca de Erasmo de Rotterdam) Eduardo nos dice el siguiente trabalenguas; “si no sabes si puedes decir lo que piensas si sabes que debes pensar lo que debes decir” Debemos hablar cuando lo que pronunciemos sea más hermoso que el silencio. A Loli lo que le dijo ese poeta le parece la mayor tontería que ha leído en Facebook pues el poeta debe escribir sobre lo que sucede alrededor, no se puede ser poeta sin conmocionarte por los demás. Los creadores en una torre de marfil constituían una minoría pues ahí tenemos a Machado, Lorca o Hernández. Pero es que la ignorancia es la madre del atrevimiento. Hay personas que tienen luz y otras que generan sombra. Gabriel Aresti es un ejemplo de un poeta que se enteraba perfectamente de lo que pasaba alrededor y lo reflejaba en sus poemas. Ya decía Wittgenstein; de lo que no se sabe se debe callar. Pero del resto podemos opinar. Eduardo tiene una actitud contestataria al poder pues el poder debe hacer funcionar la sociedad y sí actúa mal provoca un cortocircuito en la sociedad. Caminando se llega al punto de partida pues el camino se hace al andar y lo importante es el camino y no la meta o la posada. No Ítaca sino el viaje en sí. 

El roce hace el cariño y el exceso la llaga. Por eso Mikel quiere ser el estigma de Manu. Manu iba a leer un poema de Eduardo al revés. En esta presentación el protagonismo lo ha tenido Manu porque ha servido como despedida de su cargo de director de la asociación Soto Vento.  A Manu esta conferencia le ha servido para desahogarse y preparar un poco la travesía que Eduardo va a atravesar al asumir este puesto de dirección. Este año es el año mundial de la cultura. En sus clases en Deusto Manu ha tenido que leer la Antígono de Sófocles y algunos poemas de Eduardo se lo recuerdan. Eduardo es un filósofo. Por último, nos dice que digamos quienes somos, no cómo nos llamamos.  Eduardo y Sahara sacan fotos, les hermana esa pasión. Mikel saca alguna foto de todos, aunque no sabe usar bien la cámara. Aunque es periodista él es más de microondas. En la sala de Villamonte hay una exposición de cuadros del pintor José Antonio Arberas. 

Por último, leemos un hikari de Eduardo todos.
-la palabra es construida con lo sentido y pensando (sentí-mento. El filósofo y escritor Eduardo Galiano, fallecido recientemente, decía que en Colombia había escuchado el verbo sentipensar)
-¿duele más el vacío del alma o la plenitud de la dicha? ) Hamlet; ¿es más levantado para el espíritu sufrir los dardos del insultante infortunio o afrontar las calamidades?)
-somos el tiempo que nos queda. La vida es el tiempo que gastamos. (Ya no tienes 82 años, los has perdido, los has gastado. Soy lo que me queda. Somos una juventud acumulada)
-lo que encuentres sobre la tierra son dones del cielo. Si los malgastas te vas al lugar de donde provienen esos sueños
-la mirada de amor son lazos, pendientes
-la vida son momentos que se disuelven en el tiempo, pero no del todo
-la experiencia es el tiempo que guardamos en la memoria. Las piedras son meros testigos del paso del tiempo, del viento susurrando ecos lejanos
-quien busca encuentra. Quien encuentra conoce y aprende, se hace sabio, amplia horizontes, rompe todas las fronteras y nada es imposible. La aventura de la vida es iniciar la búsqueda.
-no hay mayor abismo que separe que el egoísmo y la falsedad
-no me beses en los labios sino en el alma para sentir tu ausencia
-lo que niegas con el desprecio lo consigues de los demás con una sonrisa

No hay comentarios:

Publicar un comentario