Marx coincidió un tiempo corto
con su gran profesor, uno de los filósofos más importantes; Hegel. La obra de Marx
no se puede entender si no se entiende la obra de Hegel. Hegel, catedrático de filosofía,
rector de la universidad Berlín, fue uno de los colosos de la historia de la
filosofía. Escribió una historia de la filosofía desde Platón a Hegel. Hegel fue
el último gran titan de la historia de la filosofía. Desarrolla una filosofía
de la historia muy complicada. Hegel especula sobre cómo funciona el mundo. La
dialéctica es una forma de ver el mundo y el conocimiento de acuerdo con una manera
peculiar de pensamiento. El pensamiento tener una lógica propia, una es la
lógica de las cosas y otra la del pensamiento. El mundo funciona con las mismas
reglas, basadas en contradicciones y en una dialéctica continua. El mundo está siempre
transformándose, las cosas continuamente evolucionan, todo está cambiando, nada
está quieto. Es la metáfora del rio de Heráclito, nunca te bañarás en el mismo
rio, ni el rio ni tú seréis los mismos. La realidad está en trasformación
constante. Tiene un mecanismo interno la dinámica propia de la realidad. La
dialéctica de Sócrates es diferente a la de Hegel. Para Sócrates la dialéctica
es un debate, una conversación. Para Hegel es un combate, una lucha con
argumentos. Tú dices esto y el otro la otra. En ambos es dialogo.
La dialéctica se entiende como la
manera de entender el mundo como resultado de la lucha, el combate. En el mundo
se enfrentan principios, ideas, realidades, una lucha constante en el mundo que
va generando nuevas realidades. Tesis,
antítesis y síntesis. ¿Es una manera de simplificarlo? En la lógica lo dijo. Se
trata de una superación. Una cosa genera su oposición, algo en contra. La
síntesis no sale por abajo sino por arriba. Esa dialéctica se supera gracias a
la síntesis. Esa síntesis se trasforma en otra tesis que con otra antítesis se
trasforma en otra síntesis. Es una forma triangular, siempre son 3 cosas. (como
Aristóteles, Tomas Aquino) Lo organiza en un sistema de triada. Numero 3 y 7
eran números mágicos. Hay una tradición clásica del 3; la trinidad cristiana.
En el fondo Hegel es un teólogo. Cuenta la historia de la humanidad
sustituyendo la palabra dios por idea o absoluto. Hay una idea en el mundo que
crea el mundo. Por eso se le llama Idealismo abstracto, Idealismo alemán.
En su juventud, con 20 y pocos años,
estudió en Berlín. Allí recibió enseñanzas de Hegel y su ambiente intelectual
muy poderoso. Hegel era como un dios, filósofo prestigioso. Hegel era el gran
filósofo de la historia del XIX. Tenía una visión escatológica y teológica; el
mundo es el desarrollo de la Idea. El hombre nace con una especie de software.
El mundo está diseñado desde el principio. No habla de dios, pero su idea de
estado o de Idea es una forma de teología. Las plantas o la vida humana se han
desarrollado en un gran proceso, nada está nunca quieto. La realidad está en
continua trasformación. Habla del devenir, las cosas devienen. No son de una
manera, sino que luego son de otra y de otra. En el historicismo, está dominado
por la idea de historia, las cosas cambian históricamente. Todo está en
perpetuo devenir, caracterizado por la dinámica interna de la idea. La
filosofía entiende cómo ha evolucionado el mundo y el desarrollo que hay detrás
de eso. El ser humano es la coronación de todo el universo. Marx recorre el
camino de la idea hacia atrás. Todo proceso de creación subjetiva parte de la
realidad. Es un sistema optimista. Su sistema permite entender la historia,
como el desarrollo de una idea. Funciona dialécticamente. Las cosas cambian y
el pensamiento debe alcanzar ese cambio. En esta tensión tesis antítesis y
síntesis, lo nuevo de dentro esta incubado por lo viejo. Nada sale de la nada.
Las realidades nuevas brotan de las anteriores. Es una destrucción creativa. Se
destruyen cosas para crear otras nuevas. Siente devoción por el estado que es
la suprema realización del ingenio humano. Su filosofía es de gran positividad
y eticidad. Es un sistema tríadico basado en tres elementos; la Familia es la Tesis el ser humano se
agrupa en familias, dominado por el principio de altruismo particular; ayudar a
la gente. Las personas viven juntas y se ayudan entre sí siguiendo un fin
particular. La Sociedad civil es la antítesis La sociedad civil es el mundo de la
economía, las empresas, el funcionamiento capitalista comercial. La economía
funciona por egoísmo y no es particular sino universal. todos actúan igual,
todos van a lo suyo. No se interesan por los demás. Todos quieren enriquecerse,
en su búsqueda de lucro. Es una lucha de todos contra todos. El Estado es la superación de esas dos tesis.
Es el altruismo universal. toma lo bueno de los dos. De la familia toma el
altruismo y de la sociedad civil la universalidad. La síntesis genera una nueva
realidad, una suma de unión de elementos positivos. En el estado todos
entregamos lo mejor de nosotros mismos en servicio de la comunidad. Es algo
moral. No es un contrato social. La gente paga impuestos. La gente no es como
dice Hegel. Todos los ciudadanos ayudan
a los demás, a los conciudadanos, en este ideal de Hegel. Es un sistema de
ayuda mutua pero universal. el estado es la suprema realización. El estado
parece casi una divinidad. Hegel es proto totalitario. Cualquier cosa que haga
el estado le parece que es buena. Incluso el totalitarismo. Ese esquema se
puede aplicar a cualquier otra realidad. Podemos comprender el mundo con esta
dialéctica
Hegel es un autor peligroso. Tiene
ribetes opresivos muy duros. La historia se desarrolla de acuerdo con la idea de
una enfermedad que se extiende en el cuerpo. A veces hay que cortar partes del
cuerpo de una persona para que la enfermedad no se extienda. La historia tiene
un camino necesario. Es la idea de progreso. Avanza hacia un fin concreto, el
final de la historia que es el momento presente y todos van ahí. Cuando hay
revoluciones, guerras y conquistas es cuando la idea se mueve. Son necesarios
estas guerras y conflictos (conflicto necesario en Maquiavelo) El espíritu del mundo
sabrá el camino que está haciendo puesto que es racional. Es como un guerrero
que avanza con un caballo, Atila o Napoleón, con sus ejércitos avanzando por un
campo, los caballos van matando florecillas bajo sus cascos. Se van quedando
aplastadas estas florecillas por sus cascos de caballos. La historia avanza inexorablemente
hacia la libertad independientemente de personas que caen (los muertos en la
historia) que no son importantes en el escenario de la historia. La madre da a
luz con mucha sangre. Ese coste en términos de dolor y de sangre no lo valora
Hegel. Ya decía Maquiavelo que los fines justifican los medios y a veces se
impone la razón de estado y son necesarios unos cuantos muertos para evitar miles
o para crear un nuevo sistema. Es una interpretación de la historia como un
proceso inexorable en el que hay costes de personas y muertos. Ciertos personajes (Carlomagno Alejandro Napoleón)
encarnan el espíritu del mundo. Son esos los que cambian el mundo y no las
masas. Hegel era profesor de Jena cuando delante de sus ventanas entraron las trompas
de Napoleón a la ciudad. Él simpatizaba con revolución. Alemania era un país
atrasado y feudal. La llegada de los franceses le parece bien. He visto pasar
el espíritu del mundo a caballo, dice. Napoleón encarnaba la idea fundamental
en el mundo, el líder mundial. En su catedra de la universidad de Berlín veía
que toda la historia se desarrollaba hasta llegar a él. Él era el último gran filósofo,
comparable a Platón o Aristóteles. Se sentía el Napoleón de la filosofía.
Cuando llega el comunismo ya no habrá revolución de clases. Se acabará con la
historia como lucha de clases y con la dialéctica. La tesis no se fundirá más
con la antítesis ni creará una síntesis. El final de la historia llegará
mientras él tiene su catedra de París. La historia siempre evoluciona, es dinámica
y mutable, pero ha llegado a su fin. Triunfará el socialismo. Este sistema de
sociedad germánica moderna será de libertad total. Será un sistema perfecto.
Estaba contando en su sistema como toda la historia le daba la razón. Terminaba
la historia de la filosofía en su persona. Era el presente absoluto, se había
conseguido el logos, el telos de la historia, el arché. La razón era la nueva
diosa y todo lo real era racional y la racionalidad toda real. Así que la
filosofía ya no tenía más sentido. Había acabado la historia de la filosofía dándole
la razón a él. Alemania era el país centro del mundo, este el mejor de los
mundos posibles y su catedra el centro de la filosofía. Prusia era el gran
estado. Se contradice en la idea de que la historia es un morir y nacer de comunidades.
Todo evoluciona hasta el punto final. Hegel y Marx creían que había llegado el
final de la política. Al abolir el estado se acababa una vez por todas con la
política. Ahora había que ordenar la cuestión económica. Hacer una pequeña
distribución local de poder. La política local no les interesa. Era la síntesis
definitiva, el final de la historia. Es una idea parecida a la de Fujiyama en
el final de la historia. Cae el comunismo. Se acaba la historia. Ha ganado la democracia.
El capitalismo. Había acabado la guerra fría y la tensión entre comunistas y
capitalistas, pero atacaron las torres gemelas y la historia continuó. La historia
nunca acaba. Él imaginaba que no había historia ya, que había muerte la filosofía,
la política, el humanismo, porque se había conseguido el proyecto capitalista
Todo lo real es racional y lo
racional es real, dirá Hegel. Todo
obedece a una idea (razón) y las ideas que merezcan la pena se realizaran en el
mundo. Inspira a la izquierda y derecha hegeliana. Incluso en su vida sus
discípulos se dividen en izquierda hegeliana ((revolucionarios anarquistas,
Marx, Feurbach, Skiner) y conservadores o derecha hegeliana. La derecha
hegeliana se queda con todo lo real es racional, el mundo que existe, existe,
porque es racional. Es una idea conservadora. Y la izquierda se queda con la
idea de que lo racional es real. Idea de izquierdas de que el mundo se puede
cambiar. (no se trata de interpretar el mundo, dice Marx, sino de
transformarlo) La derecha es determinista y conservadora y la izquierda voluntarista
y liberal.
Admirador del pensamiento de
Hegel hay una diferencia esencial entre Hegel y Marx. Hegel es muy potente,
pero cabeza abajo. Hay que darle la vuelta. Hegel proponía una dialéctica
idealista, pero para Marx el centro es la materia. Marx era ateo, la religión
era el opio del pueblo, nada es real fuera de la materia, no existen los espíritus.
La filosofía de Hegel está basada en el espíritu del mundo, la idea. Las ideas
son emanación de la materia, para Marx. La base de todo es la economía. Las realidades
sociales están enraizadas con las Infraestructura económica y la superestructura
surge de esa infraestructura. Las realidades jurídicas culturales religiosas
políticas económicas, todo el mundo cultural tiene una base que es la producción.
La palabra favorita de Marx; relaciones de producción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario