Almudena Cacho entrevista a
Ortega, el humorista radiofónico que ahora se ha pasado a la televisión y los
escenarios. Y lo hace en la sala BK de gran vía de Bilbao en el marco del
festival de la risa Ja. Ortega vive ahora en una casa en Barcelona. Había editado
un video para sus amigos de Facebook y ahora se lo ponen en la sala BBK a modo
de introducción. Vive en una casa pequeña, donde hay hueveras para que no haya
eco en la pared. Barcelona estaba caliente, a pesar del clima frio (la
independencia). ¿se puede hacer humor de Cataluña? De todo. No se preguntan si
hay límites en lo que se puede hacer en la poesía o en la canción o literatura,
se da por supuesto que no, pero en el humor sí que se preguntan si hay límites.
No hay que fastidiar a nadie, ese es el tope que nos ponemos. Juan Carlos y
ortega son varias personas en uno. Podía presentarse perfectamente el solo. De
alguna manera hace eso en sus programas. El mismo hace varias voces. Lo hace
porque en los programas hay dinero por medio. Dice, lo hago yo mismo en casa.
Lo entrega por webcam desde casa y así no ve a la gente de la radio que no le
cae bien. Juan Carlos habla mucho de Ortega. Le conocemos más por Ortega que por
juan Carlos. Crea personajes dentro del texto de el mismo. Lo sopesa con la
habilidad que tiene para crear situaciones que parten de los tópicos
radiofónicos que todos conocemos, sobre todo los de más edad. Nos hace reír de
verdad, no cabalgar el día con una media sonrisa sino con una autentica
carcajada. Lo de Cataluña era obligado hablarlo.
Ortega recuerda uno de sus sketz radiofónicos
en el que trata de adivinar quienes controlan realmente el mundo; Los que controlan
realmente el mundo, los que mueven el hilo, lo vamos a rebelar en una emisora
de radio, no sé si es peligroso, seamos valiente. No son los políticos los que
mueven el mundo. Por encima de ellos hay poderes ocultos, hilos que están a la
sombra. Señalemos quien es ese grupo de poder que mueve realmente los hilos del
mundo. ¿Son las grandes multinacionales, los iluminati, los extraterrestres?
No, mucho peor. ¿iluminatis templarios extraterrestres que tienen empresas que
contaminan? ¿el mismo demonio que mueve los hilos del mundo? El problema es que
no hay nadie por encima de ellos. Mejor nos iría con fuerzas ocultas. Este
sketch o hizo para radio nacional.
Un chiste empieza, tiene inicio o
nudo desenlace. A veces Ortega quisiera decirle al locutor; ya está, el gag
acaba así porque yo lo quiero. Ortega ha creado una emisora de radio ficticia
con la que conecta los locutores en un momento y deja de conectar cuando
quieren. Así desconecta cuando quiere. Ha trabajado en todos los medios y de
ahí a los escenarios, los libros, la divulgación científica con sentido del
humor. Suena eso a Gracita morales lo de saltar a escenarios. Estuvo en un show
de hora y pico en la sala BBK. Ha leído en alguna entrevista una frase
optimista. Los años de torpeza, de la infancia, le inspiraron un humor distinto
y ha diseñado este oficio a medida de sus medidas. Muchos quisieran tener unos
cuantos gramos de esa torpeza que le hace manejar tan bien el medio, que es su
gran amor. Aunque tenga otros escenarios está muy apegado a la radio. No es
humor radiofónico, es la radio, es humor sobre la radio. Siempre ha querido
dedicarse a la radio, no como Gabilondo o Luis del olmo. ¿Cómo llegó a la
radio, cuál fue el primer programa? En radio nacional hacía un programa Javier
Sardá de crónicas marcianas, la bisagra. El hacia los guiones, malísimos. No le
conocía a él. Estudió en una escuela de radio en Barcelona y deja la escuela
cuando se entera que buscaban locutores en la radio y lleva su currículo. Fue
su padrino Sardá. ¿De sus tópicos de radio cuál es el que más le gusta?; “seguiríamos
hablando todo el día pero por desgracian no tenemos más tiempo”. Cualquier cosa
de la radio es muy graciosa en hallazgos si lo llevas al extremo; el ¿puedo
saludar a mi familia? Hay grandes hallazgos admirables. A veces no se le ocurre
que gag hacer y piensa en la radio o la escucha y lo mete. Le encanta la radio
y burlarse de aquello que ama de verdad. Lo bonito es estar escuchando radio y
a nuestros queridos oyentes.
Ponen otro sketch; “Le llamo desde el barrio, la calle general molina 32,
escalera izda, quinto a. Desde la cocina a un metro aproximadamente del
frigorífico, a mi derecha el microondas. 42 centímetros desde la puerta, 20 grados
de latitud norte. Tiene 89 baldosas. Para que se situé debo dar la posición
bidimensional que vivimos en tres dimensiones. ¿Para qué quiere saber desde dónde
llamaos?, lo importante es lo que decimos, el lenguaje, no nuestra situación
topográfica.
Se organiza para hacer muchos
personajes como el loco demente. Ha construido un estudio de radio en una
habitación de su casa. Él se queda en ese cuarto, su familia fuera. Allí graba
en magnetofón, en reboox, esas camionetas grandes que espían las casas en las películas
americanas. Las cintas graban en esterero, por la oreja izquierda grabas una
cosa y por la derecha otra. Grababa bajando la música por un lado y así aislaba
las dos voces. Las dos voces fusionadas las ponía en una oreja y con la otra grababa
otra voz. Luego salió la informática, hay programas que puedes grabar una voz
en una cinta y otra en otra. Se pierde poesía, dicen, haciendo esas cosas.
Puede hacer creer a sus jefes que tarda más de lo que tarda en hacer sus sketch.
Pueden costar de 5 minutos a 8 años. Les hace creer que tiene ansiedad. Tiene
gags importantes, que te arrancan la carcajada porque no te lo esperas. En
otros la sorpresa se mezcla con la ternura y el amor a los personajes que crea.
Cuenta otro sketch que hizo. Era un sencillo karaoke,
un hombre y mujer deben interpretar la canción de pimpinela. “vete, olvida mi
nombre” A ella le sabe mal decirle que se vaya. No se lo está diciendo de
verdad porque realmente ella quiere estar con el otro oyente radiofónico con el
que canta a dúo.
Cuando uno es muy joven tiene
tendencia a que lo más elevado, difícil de hacer, es lo mejor. Uno va mejorando
cuando va siendo claro, nítido, y va dejándose de tonterías, como en las
novelas. Y en el buen sentido es más popular. Trabajó con Pepa en RNE. Prueba el sketch y la
gente se ríe. Cuando tiene fe total la mayor parte de las veces funciona, hay
veces que va a triunfar y no lo hace. Las mujeres disfrutan de sus números. Él
piensa en una mujer no real, una oyente idealizada cuando hace sus programas.
La imagina una chica guapa, inteligente y es un pensamiento que está ahí, es a
la que dedica todo, no es una novia, es la oyente. Vivimos una época dorada
para el humor en la radio. Sus personajes no tienen nombre, los bautiza en cada
historia. Para él tienen su propio nombre, 5 o 6 voces distintas. Necesitamos
reírnos, lo más barato y difícil de producir es que nos hagan reír. Ha habido
una escuela, se ha popularizado mucho el humorismo y los cómicos viven una edad
dorada con mucha influencia de EEUU. Ahora hay un humor brutal impresionante,
tanto es así que Faemino y Cansado que eran los modernos en su época se han
convertido en los clásicos; está Javier corona, y muchos actores secundarios,
gente que hace humor en la radio. Ha habido una crisis, la gente necesita
reírse, pero él cree que no depende de nada de eso. El humor no sirve para que
la gente se olvide de sus problemas. Cuando ha tenido un problema ha ido a ver
un numero de Faemino y no le hacen olvidar los problemas. Se puede combinar el
reírse. Desconfía de esos humoristas que dicen que durante un rato se olvidan
de sus problemas. Son importantes estos problemas, no hay humorista que pueda
hacerlo olvidar. No hay una relación entre épocas chungas y mayor profusión de
humoristas. Quizá es que se ha descubierto que a la gente le gusta el humor. ¿Buenafuente
cómo está? “Tiene una infección o virus estomacal, lleva dos semanas sin hacer
el programa suyo pero el lunes próximo ya está recuperado”. Es muy complicado
hacer lo que hace él, aguantar hora y media allí haciendo algo que no depende
solo de él sino de la interacción con otros. Le admira y a los que le han sucedido.
Habla del amor catalán. Es un fan de los Simpson, había una conferencia hablando
del humor inglés. Sale Bart y dice, como Benny Hill, es humor inglés, pero más
tonto. Podría presumir, hay humores más sublimes, elegantes, pero no es vedad.
Hay humor sublime en Andalucía y repugnante en Cataluña. El humor depende del
humorista que lo haga. Hay humoristas magníficos y malos. La inteligencia no
depende de las comunidades, cosa que últimamente se olvidan mucho. Seria
milagroso un lugar del mundo donde hubiera un humor más elevado. Hay humoristas
catalanes fabulosos en lo más alto, llama la atención en la comparación, aunque
haya una cuadrilla manchega. Entre periodistas también, hubo una época que
estaba sarda por las mañanas y julia otero por la tarde, una explosión de
comunicadores que dominaban el panorama de los medios españoles. Su hijo es su
Superman, como su padre. Ortega tiene un hijo de 9 años. No ve diferencia,
salvo lo sexual y la cosa erótica, entre una relación de pareja convencional y
lo que siente por su hijo, la necesidad de levantarse y que este él. Recuerda cuando
hizo un sketch que era profesor de dos niños. Le hizo mucha ilusión verlo
grabar ese número. Para él la única persona que conoce que hace locuras en la
radio es su padre. Lo normal es que estés en la tv, pero prefiere oírte por la
radio. Hay que entender el lenguaje clásico de la radio. Los más jóvenes no
escuchan la radio ni ven la tv, ven en sus pantallas y escuchan lo que quieren.
No sabe si su hijo siente amor por la radio. La radio era el aparato
tecnológico más brutal que había entonces. Ahora el niño está con unos juegos
brutales que eso en su época sería la bomba, tiene cosas maravillosas. Siguen
oyendo la radio ahora a través de los podcasts. Hay gente que no trabaja en la
radio, pero graban en cosa programas de ciencia. No oyen la radio de forma
convencional, pero la oyen también. Organizan y animan congresos de ciencias,
hacen monólogos de humor sobre el método científico frente a la idiotez y la
estupidez y la ignorancia en este tema. Él ha escrito un libro para su hijo
sobre ciencia, es algo útil. Los médicos, los científicos son los que se
esfuerzan por la humanidad y hacen que nuestra vida sea más agradable. Los
demás aderezan adornan la vida nueva que ellos han construido. Son la base de
la felicidad nueva los científicos. Esta dentro del grupo de los catalanes que
hacen risa, según Rajoy. Se meten mucho con Rajoy. Es un personaje que lo pone
fácil, eso que sea tan fácil desvirtúa un poco el humor que sobre él se hace.
Acabas sintiendo lástima de él. Cuando alguien es objeto de burla constante no
puede evitar compadecerle o sentir pena. Se dice, dejarlo en paz ya, por una
cuestión humana. El humor político le cansa un poco que sea tan idéntico, tan
igual, le gustaría que estuviera más diluido. Que las ostias merecidas a Rajoy
se le dieran a Pablo Iglesias y no es así. El star system del humor pega ostias
a unos o a otros.
Recuerda otro sketch científico; La existencia de la materia oscura se puede detectar por sus
efectos, pero no tenemos ni idea de lo que es. Algún día lo sabremos. Y una
señora que oye la radio llama y les dice; Espero a que se sepa, no tengo prisa,
pues en un tiempo se sabrá. Puede tardarse muchos años en saberse lo que es la
materia oscura. No tengo prisa, lo que tenía que hacer en la tienda ya lo he
hecho. Echamos la mañana. Esperamos años. Lo que tenía hecho en la vida ya lo
ha hecho. Pero señora, es un proceso que va a tardar mucho en saberse. Vamos a
estar años juntos hablando. Su padre no me quiso de niña…Empieza la señora a
contarle su vida. Es humor científico y humano. Ya he hecho la casa la
señora, aunque la casa nunca se termina de hacer. Hay una risa incomoda, que
nos reímos por ejemplo con ignatius, con carcajadas de verdad. Crea una
incomodidad en el espectador. Hay humoristas estadounidenses que crean una
sonrisa nerviosa. Te dan ganas de pegarle una patada. Hay casos como el de
ignatius ambientadas en la verdad, un tipo que sabe lo que hace y hace un
trabajo moral. Un humorista que prefiere incomodar, no le preocupa hacer el
humor. Es como el que valora más la sonrisa que la risa. Ortega es muy fan de
la carcajada, es su objetivo, si no lo consigue mala suerte, pero la prefiere a
una sonrisa. Ese insinuar, pero no mostrar, no es real. Su objetivo es la
carcajada, pero incomodar nunca le ha gustado. Es un caballero. Si hay leña del
árbol caído se pone al lado de la leña. Le gustan las piernas de la mujer. Es
un hombre clásico. Le gusta la expresión retrogrado, hay poca gente que diga
soy retrogrado. Ser moderno ¿es que te gusten los codos de las chicas?
Cualquiera podría incomodar al resto, empezar a pegarse, pero serían incapaces
de hacer humor. O que empezase a insultarles a ustedes. Es otra rama de la
profesión con la que no comulga. Quiere hacer reír sin mensaje. Es humor blanco,
aunque hay gags de sus empotradores que no tienen nada de blancos pero que no
haya mensaje, es su objetivo. Que la carcajada sea el mensaje, a lo Mc Luhan.
Si hubiera querido decir eso, que vivimos en una sociedad incomunicada y que el
humor nos oprime, no habría hecho un programa de humor. Hubiera dicho
directamente; el poder nos oprime y ya está. Como hemos vivido una dictadura y
había cosas que no se podían decir el humor aprendió a decir cosas por debajo.
Pero es una pérdida de tiempo no decir directamente lo que quieras. Grandes
genios del humor que le han despertado carcajadas son por ejemplo Gila, hombre
de radio, que empezó allí y que hacía retrasmisiones deportivas, por un riñón.
Woody Allen le ha hecho mucha gracia toda su vida. Faemino y cansado. Eugenio
le gustaba como contaba los chistes con tanta seriedad. Todo lo que ha relatado
está muy trabajado, medido, estudiado, escrito y ensayado. La posibilidad de
improvisar el humor es cierta pero detrás hay un trabajo que sustenta todas
esas risas que va a haber. Es más de elaborar que de improvisar. Aunque improvisando
es bueno. Una buena improvisación es como el primer amor. Si esto lo graban
después se le ocurrían más cosas. De niño oía la radio y flipaba con esos
señores que halaban y le parecía tan difícil llegar allí que tiene mucho
respeto al oyente, porque ha sido oyente y lo sigue haciendo. Cuando habla hay
una persona escuchando, tu estas en la radio y el no, explícale porqué, no le
des cuatro cosas improvisadas. Le da rabia cuando hacen un programa para llenar
horas. Le da mucha rabia.
¿Qué opinas de lo políticamente
correcto, la corrección política? Lo que antes era políticamente correcto ahora
ha cambiado. Ahora muchos irían a la cárcel. La cosa ha cambiado, ha dado una
vuelta completa, ahora es políticamente correcto criticar a los políticos del
congreso. El decir que trabajar en política te frustra y que te impide hacer
otras cosas ahora es políticamente correcto. Cargarse la corrección política
sin cargársela realmente es políticamente correcto. Hay cosas de la corrección
política que están bien. Decir eso es políticamente incorrecto. No poder hacer
bromas sobre maltratos a niños que antes se hacían para él es una victoria, es maravilloso
que exista. En algunos ámbitos es necesaria la corrección. La mayoría diría que
es espantosa. Mucha gente sigue pensando que meterse con la iglesia es algo
trasgresor. Lo trasgresor ahora es defender a la iglesia. Todo varia, fluctúa y
cambia tanto de unas semanas a otras que nadie sabe que es la corrección
política. Habla de otro sketch que hizo con un voluntario de una ONG: ¿Cómo ayudan ustedes a los países en vía de desarrollo? No es
ayudar, sino cooperar. Ayudar denota superioridad sobre ellos. No diga ellos
que separa el ellos de nosotros creando una división que no nos gusta. ¿Cómo es
la cooperación de gente que lo está pasando mal? Si dices pasando mal ya hay
una superación de lo que está bien y lo que está mal. No nos gusta emplear
estar en situación de desigualdad porque parece algo estático el estar, no
están, sino que viven en desigualdad. No es contar la cooperación de nosotros,
contarlo es a dos bandas en situación de igualdad. No diga ambos, denota dos
bandos. No me pregunte a mi como si yo estuviera en superioridad sobre las
personas que están en desigualdad. ¿y como lo digo entonces? No me grite,
fascista.
Cuando hay un invitado no se cuestiona
al locutor. Cuando le dicen ¿vives en Girona? Él dice que sí, porque le da pena
el locutor. Dice que si a todo. ¿voto a podemos? Su madre es la principal
oyente suya, se sabe todas radios del mundo, lo oye todo, conoce todo, está al
tanto de todo. En el humor no hay
tantas chicas. Aunque haya muchas chicas en la radio, Pepa Bueno por ejemplo,
pero no hay tantas mujeres arriba haciendo humor. Hay muchas mujeres haciendo
buena radio. Pero en el mundo del humor ¿por qué no? ¿habláis de esto los
humoristas? Rosa María Sarda es impresionante como humorista, por encima de los
humoristas que existieron en su época. Por el mismo motivo que son minoría las
ejecutivas o científicas. Hay un humor muy femenino. Dicen; si gobernaríais las
chicas sería mejor. No le gusta esa frase pero molaría el humor más hecho por
mujeres, pero él que hace él es un humor masculino, que está muy bien pero que
es muy heterosexual. Se lo dijo Boris. ¿Cómo sería un humor homosexual? En un
festival de literatura y amor una buena amiga que trabaja en la radio y es
escritora, tiene la idea de que los hombres leyendo literatura son homosexuales
porque leen a otros hombres. Las mujeres son heterosexuales porque leen a
hombres y mujeres, en ese caso son bisexuales y además leen los periódicos. No
puede haber amistad entre hombres y mujeres porque siempre hay una tensión
sexual, por la misma razón los gays no podrían tener amigos. Le parece absurdo.
Tiene muchas amigas con las que nunca ha hecho nada. Luego se corrige; ha hecho
cosas, n, no puede existir amistad entre hombres y mujeres. Hay revistas de
humor y programas que analizan el humor con más cuidado que los propios
profesionales. El intermedio de Jordi Evole por ejemplo. Ha habido un trasvase
d información crítica a esos programas de humor. Se tira piedras a su propio
tejado. El humor está libre de
prejuicios, de los que no están libres los analistas políticos. Analizan las
noticias con humor, con más distancia y menos prejuicios. Resulta a veces más
verdadero. Mucha gente dice que con el intermedio se informa más que con el
telediario. No demos autoridad moral política a nadie por mucho que nos haga reír.
¿Es un tío irascible y bronco en su casa fuera de su trabajo? Ortega siempre está
en el trabajo y nunca está. Trabajar es una forma de pasárselo bien. No hay vida
real y otra profesional, es prácticamente la misma. A veces está grabando, a
veces con sus amigos. Hacer humor es una profesión de alto riesgo. No hay nada
más duro que hacer una broma y que no se rían, tratar de hacer humor y que no
se rían, pensar que haces gracia y no hacerla. ¿Cómo se vive ese vacío? En la
pulpureta de Terelu, que se emite a la misma hora que hace él, viernes a la 1 y
media 2. Rodrigo porte, el director de cine, dijo; a los humoristas no se les
perdona. Si a alguien no le hace gracia su humor genera rechazo. Un pintor o
escritor que no te gusta genera indiferencia. Pero si un humorista no te gusta
te pones cruel con él. Hay algo que genera en el espectador un odio feroz hacia
el humorista o amor hacía él. Es una decepción intolerable. Tiene que ver con
la rabia que te da ver a otro riendo juntos. No hay nada que una más que la
risa, pero ver a un grupo riendo genera nerviosismo. La risa une. Y si te ves
excluido de eso te ves abandonado y apaleado y te llena de odio hacia el
humorista. No lo ve en otras profesiones más que en la política que es muy
visceral. A un poeta no le dicen; hijo de puta, ¡no me ha emocionado! Al
humorista le dicen; no me hace ni puta gracia. Recuerda Ortega el último sketch
de esta ponencia; La economía no es una ciencia exacta,
como ciencia social, depende de muchas variables y muchas personas, no se puede
deparar lo que en el futuro va a ser esto. Bien, gracias por su testimonio,
estaríamos hablando con usted toda la mañana pero no nos queda tiempo. y de
pronto responde el colaborador; No me ponga caramelo en la boca, Si me dice
“hablaría con usted toda la mañana” hágalo. Si es mentira no lo diga, porque
hieren nuestros sentimientos, juegan con nosotros. Un día los invitados
saldremos a la calle y vamos a armar una revolución.
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