VICTOR DEL ÁRBOL, POR ENCIMA DE LA LLUVIA

VÍCTOR DEL ÁRBOL-CÉSAR COCA LIBURUAREN AURKEZPENA “POR ENCIMA DE LA LLUVIA"

Víctor del árbol debutó con el peso de los muertos. Se vendieron 500 ejemplares. Luego le siguieron Tristeza samurái, respirar por la herida. Ha recibido el reconocimiento popular antes fuera de su país (en Francia) que aquí. Gano el premio RBA, el policiaco, el de literatura negra. Ha vendido docenas de miles de ejemplares. Presenta ahora una novela policial con gran dosis de violencia. Se le ha condecorado como caballero de las letras y las artes, distinción que tuvo antes que él Pérez Reverte. En los premios Nadal se aleja del género negro, aunque exista una trama que podría justificar que seguía haciendo el mismo género. Ya no es autor de novela policial. En esta obra los personajes son maduros conscientes de entrar en recta final de su vida, que han vivido mucho bueno y malo y hacen un viaje al sur de Europa para cerrar estas historias. Aparece la enfermedad, la xenofobia, la corrupción, sexo, inmigración de este país. Hace año y medio recibe el Nadal, que tiene el mejor palmarés en castellano que existe. ¿escribes diferente después de escribir el premio este? Cuando se pone en el ordenador todo es nuevo a pesar del premio. Se nos pasa la mala sangre que llevamos en el cuerpo. Está contento de estar presentando aquí la novela. Hubo varios puntos de inflexión en su vida, el del Nadal es uno de ellos. No esperaba ese premio, esa resonancia mediática. Durante un año y pico estuvo con los pies por encima del suelo, no se daba cuenta de lo que significaba. Todo esto pasaría como pasó el premio polar. Uno afronta la página en blanco, que quiere hacer y que quiere seguir progresando. Tuvo un momento de miedo y pánico, ¿qué voy a hacer?, y se le pasó muy rápido. Voy a hacer lo que me apetece, se dijo. Se olvida del premio Nadal, de todo lo que envuelve a la literatura pero que no es literatura y se propone concentrarse en una historia que le apeteciese. Quería hacer una novela sobre el viaje trasformador de la experiencia vital. Decide explorar ese camino y preocuparse no mucho de lo que iba a pasar después. Ahora si le preocupa. La crítica es más exigente, mira con lupa y más detalle lo que escribes y con más mala leche. Muchos críticos van a pillar. Se quiere un escritor en continua evolución que tiene que aprender, cambiar. No se queda en zona de confort, lo ya repetido. Ha hablado muchas veces sobre las etiquetas. Siempre ha defendido que su voluntad de escritor es crear una propia voz y universo narrativo y que la gente se identifique con lo que escribe. Explora otra vida, pero sigue siendo él. Lluvia de gotas, son otras historias que ha contado y escrito. Es una historia desde dentro. En el tono se nota que hay mucho dialogo personal entre los personajes. Son preguntas personales que necesitaban respuesta en ese momento. La crítica, la opinión ajena, es libre. Le interesa mientras sea fundada. Un creador, el escritor debe revindicar su faceta de artista, no puede estar condicionado por la opinión de los demás, es imposible gustarle a todo el mundo. Hay que afinarla propia voz, proponerte tus propios retos y desafíos e ir más allá. No lee mucho las críticas, las buenas te ablandan y las malas te encabronan. Y para escribir esto no es bueno ni lo uno ni otro. Hay que olvidar lo que piensen de ti y concentrase en la historia. Hay una percepción intuitiva de si eso va a funcionar o no, si estas ante algo poderoso o no. Nunca había tenido esa sensación. Lluvia de gotas era una novela que iba a funcionar bien en conexión con el lector, luego las ventas son otra cosa. Le apasiona escribir, siente que es verdad y que el dialogo funciona. Le molesta ese encasillamiento de marcar categorías, escritor de novela histórica o novela negra, novela política, de pensamiento. Clasificamos a la gente. Esto le acaba aburriendo al escritor. Todos quieren contar algo distinto. Es muy cabezón y testarudo e impaciente, entiende que cuando tiene una biografía llamativa en ciertos aspectos, se hace una serie de asociaciones que no se corresponden luego con la verdad.  Un panadero hace una novela de pan. Vas a lo fácil, a la novela policiaca. Pero la voz se va imponiendo poco a poco sin declaraciones grandilocuentes. Lo que haces eres se acaba imponiendo. La novela negra no es siempre policiaca. Hoy releía el romancero gitano de Lorca que habla de la oscuridad de la palabra, que es la raíz que se agarra al limo que todos conocemos del dolor. Lo que tiene es una visión doliente de la vida, personajes y experiencias vitales y eso se traduce por eso en una novela policiaca. Faulkner es un escritor de novela negra y Dostoievski, porque centran el foco en la contradicción de los seres humanos, en la lucha vital por trascender y sobrevivir al dolor. El titulo se refiere a las últimas páginas; la lluvia queda debajo, por eso se titula por encima de la lluvia. En un millón de gotas había trabajado la idea de agua como gota malaya que cae poco a poco y va laminando a los personajes y sus vidas. El planteamiento es que la lluvia torrencial tempestuosa de tormenta lo arrasa todo y es como la vida. Tratas de refugiarte, ponerte a salvo, pero a veces no hay donde esconderse. Hay que quedarse quieto y dejar que te empape la lluvia. Que os atrape un buen chaparrón y cuando ya estas empapado te dices; por lo menos voy a disfrutar. Es lo que nos pasa a nosotros en la vida y a sus personajes. Estar por encima de la lluvia es que llega un momento en nuestra vida en que estamos por encima del bien y del mal en buen sentido de la palabra. Ya ha vivido todo lo que tenía que vivir, no necesita justificarse ni razones porque entiende lo importante y lo esencial. Tiene con la edad menos necesidad de explicar, justificar. Escribía de joven poesía y estaba empañado en decirle a la pareja cuanto le amaba y construir frases retoricas. Cuando empiezas a amar de verdad de mayor no necesitas palabras, basta con mirar. Uno ha mordido la vaya amarga de la vida, y tiene la suerte de hacerse viejo, ve la vida diferente. Una periodista no sabía cómo referirse a los personajes de la novela. ¿ancianos, gente mayor? No, son viejos. Ser viejo es un premio que te da la vida, hay que llegar creando. Revindica un poco la ida de la vejez como un premio. Esos personajes han mordido la manzana y saben lo que es vivir, lo que es la felicidad e infelicidad. Metafóricamente la imagen le viene de una escena real, en un viaje que hizo desde Bilbao a Barcelona se encontró un señor a su lado que podría ser el protagonista Miguel. Era una persona de la que no conocía nada, era una persona de 70 años elegante, apuesto, decimonónico, con la expresión de haber vivido y estar en paz con uno mismo. Pensó en todo el viaje como ese viejo había llegado a su asiento, a un avión llegado de Bilbao. Pensó en su abuelo. Cuando estaban aterrizando en Barcelona le dice “estamos volando por encima de la lluvia”. Cuando aterrizan ve las cortinas de agua de la lluvia. Cuando baja del avión en el aeropuerto había desaparecido la sensación de paz que había tenido con ese hombre. Echó de menos la idea de estar por encima de las nubes; brilla el sol, el cielo es claro y todo está abajo. En nuestra vida nos olvidamos de lo importante. Escribe sobre esa idea de viaje y de recuperar la paz. No hay mucha ficción narrativa o cinematográfica donde os personajes sean personas tan mayores. Somos un continente que se muere de hastío y vejez pero no valoramos lo que es la vejez. A nadie le gusta ver nubarrones en el horizonte. Premia la inmediatez, la rapidez, la pujanza de la juventud en detrimento de la vivencia, la experiencia, de lo que ya se conoce. 

  

Hay un momento en la novela interesante. Tiene cuatro momentos importantes la novela, incluso en su vida. Helena, otro personaje, marca diferencia entre joven y viejo. El joven huye hacia delante y el viejo huye hacia atrás. En los recuerdos no hay, pero en los sueños prima la esperanza, el futuro, la utopía y el pasado no se pone en valor. Literariamente es más interesante alguien que tiene toda la vida por vivir que alguien que tiene toda la vida por contar. Se huye hacia atrás para recordar. La memoria tiene un papel importante. No desvelamos nada al lector si decimos que el protagonista tiene muchos problemas. Hace un delito sin pena, no de código penal, el delito de madurar, de recordar. El pasado es un cementerio donde ya no existimos, no existe nada de lo que recordamos, es una evocación de un relato que contamos para entender de alguna manera a donde hemos llegado. Ese niño que imaginamos ya no existe ni los lugares que recordamos, nuestra mirada ha cambiado. Aunque el presente sea el mismo los recuerdos ya no lo son. Los recuerdos son la escapatoria cuando tienes miedo o no tienes fuerza de seguir adelante. los seres humanos necesitamos memoria, el pasado es nuestra raíz, por eso se sumerge en ese misterio que monta, baja, desciende, hacia esa remota parte donde todo empieza. Cuando más mayores nos hacemos más selectivos se vuelven nuestros recuerdos, de alguna manera elegimos. Muchas veces es más importante lo que olvidamos que lo que recordamos. Miguel, por ejemplo, es un buen hombre que ha sufrido mucho en su niñez y ha decidido morir, olvidar eso, el haber crecido en la miseria, con una madre que tenía que prostituir para vivir en la época de la guerra civil, el haber conocido vagamente a un padre que acabo muriendo en la construcción del valle de los caídos. Ha construido un relato de recuerdos que le avergüenza. Su madre vendía su cuerpo a cambio de comida y eso le avergüenza. Hay que construir esos recuerdos con el hoy, con la lógica. Es un hombre de lógica, ha sido director de una sucursal bancaria. No cree que la vida tenga que explicarse. La vida es algo casual que pasa y hay que vivir como se pueda. Ha sido buen padre y buen marido. Nunca ha sentido la tentación de sentir algo que no fuera lógico o lo ha reprimido. Las emociones se reprimen, eso piensa. Ha centrado toda su vida en la lógica seleccionando los recuerdos que quiere recordar para explicársela a su hija, esposa o amigos. Se le detecta el principio de la novela demencia senil. No es una novela sobre el alzhéimer, pero si es una novela que habla del papel que juega en nosotros la memoria, toda esa memoria que ha construido, con seguridad, y que ya no le sirve para nada. Ha amasado seguridades como un avaro. En el último tramo de su vida esas seguridades no le sirven de nada. No podemos llevarnos con nosotros nada en el último viaje. Nos vamos como hemos nacido, desnudos. Es el absurdo de vivir. Nos pasamos la vida acumulando. Usted deja aquí todo, quítese la ropa y parta. Se asusta porque no le queda nada. Era un hombre de orden, pierde esa dignidad. Cada mañana se levanta, se pone su traje corbata y gemelos y escucha el mismo programa de radio, hace cada mañana los mismos programas lógicos y se encuentra de pronto con la enfermedad. Eso nos quita la dignidad. Ha sido el pilar que ha sostenido a su esposa, hija, a todo el mundo. Era apreciado en el barrio, un pilar de la comunidad. Se da cuenta de que necesita a su hija y a los demás. No puede limpiarse solo, alguien le tiene que hacer la comida, no es capaz de recordar el camino a casa. Eso le humilla, más allá de comprender el hecho de que se va a morir. Encuentra a Helena. Mas joven que él. Se enamoran. Hay una protagonista ausente toda la novela pero con un papel importante. La noche es el momento que junta dos vidas. La gente que decide no vivir, no arriesgarse ni someterse a la dictadura de las emociones, no le pasa nada ni bueno ni malo. A veces la vida te tienta, te propone locuras. El cede unas horas a esa locura pero luego lo quiere robar de su memoria. En su interior se dice que fue tan libre que lo quiere olvidar. Reconstruye en pocas horas una y otra vez su pasado. Cuando se siente muy aplastado por la realidad, la única escapatoria que tiene es recordar aquella noche en Sitges. Leer una y otra vez aquellas cartas. Reconstruir su viejo coche. Es el único lujo, un momento de libertad que se ha permitido es conducir un coche que ha envejecido con él y de la misma manera que él, sin una mancha, puro. Es esa aventura de irse a conducir, del viaje, él lo usaba como mucho para ir a Tarifa los fines de semana con su familia. La vida te da la oportunidad de recontrate con los recuerdos aunque a veces parece mejor no hacerlo. Normalmente la imaginación es mejor que las cosas que realmente fueron- Cuando lo contrasta con la realidad vuelve al espacio de imaginación, donde puede pasar todo lo que quiera. se rencuentra con una mujer. Si la vuelve a encontrar en otra persona totalmente distinta se va a decir a uno mismo que es víctima, que ha cambiado, que ya no eres el chico de 40 años que pasó unas horas con ella. A veces uno no quiere mirarse en los espejos, que han pasado 40 años, que tiene 80. La esperanza de vida actual son 75 años. Hay que vivir el instante que hay porque igual no hay otro. Llega un momento que da igual llegar o no, hay que caminar, lo importante es el viaje. De mayor te das cuenta de eso. Helena, la otra protagonista del viaje, es el oxímoron, lo propuesto a Miguel. Ha tenido contacto directo con la muerte el abandono y suicido de su madre pero viene de un origen distinto. Viene de la clase pudiente, de los triunfadores de la guerra civil. Su madre es inglesa, se ha criado en el Tánger de antes del fundamentalismo que contaba con todo tipo de artistas y lenguas. El Líbano de los años 70 o el París de años 20. Crea también una estrategia para vivir pero distinta a la de Miguel. A Helena le duelen tanto los recuerdos que decide no pisar suelo, vivir continuamente en una vorágine de emociones. Cualquier puerta que ve medio abierta se mete de cabeza. No quiere que la vida se le pase con lo cotidiano, que su vida sea siempre extraordinaria pero eso tampoco es posible. A veces es extraordinaria la vida, los grandes hechos, pero también estar en el día a día, en lo cotidiano. Miguel es hombre de tierra y Helena mujer de aire. Los dos tienen un problema. Helena le tiene miedo al agua, pavor a nadar, a sumergirse en la realidad y ahogarse. Miguel tiene miedo a volar, a coger aviones, metafóricamente le da miedo a despegar los pies del suelo. Se encuentran en el último momento de su vida. No tienen nada en común y eso es lo que les va a unir. Es una novela de cómo funciona el amor en las relaciones de parejas. No es buscar a alguien que sea como tu sino alguien que te de lo que no tienes. Miguel necesita coraje agallas imaginación. Helena necesita pragmatismo, sentido común, aceptar la realidad. Van de Tarifa hasta Malbo. El final del viaje es lo de menos, lo que importa es el viaje en si. Miguel pierde el miedo a volar y Helena aprende a nadar. Lo más bonito que uno puede esperar de la vida. Da igual la edad que tengan. Lo que nos hace viejos no es la edad sino el miedo. Cuando se supera el miedo con alguien a tu lado se puede vivir maravillosamente hasta el final. Trata temas que son clichés, tabús, el sexo, al pasión, el deseo. Se dice que dos personas mayores cuando se encuentran en una residencia son dos soledades que hacen una compañía. Eso no es cierto. Miguel puede vivir solo perfectamente y Helena lleva viviendo sola mucho tiempo pero les une la curiosidad, la pasión, las ganas de tener sexo, experimentar con drogas, hacer un viaje. Cuando el viaje se acerca hasta el final, Helena que ha propuesto el viaje empieza a demorarlo. Yo te acompaño a Barcelona, a Madrid. ¿no te tenías que quedar aquí? Al final el viaje es lo de menos. Es una mujer muy inteligente e irónica. Y le dice; planificas los viajes con un guía, la ropa puesta, concretas tus tarjetas. El viaje perfecto es en línea recta, de a a b pero eso no es un viaje, es ir a un sitio. El viaje de verdad es cuando ocurre lo inesperado, lo que a uno le sorprende, cuando se pone a prueba entre los imprevistos. Ha viajado mucho por el mundo y le han trasformado los viajes que pasaban de manera azarosa. Acabas llegando a dónde quieres ir pero no en línea recta sino por curvas haciendo giras. El año pasado estuvo yendo a Australia, no había sitio más lejos donde ir. Tenía que coger un bus en Barcelona, ir a Kuwait, 6 horas de escala, hasta llegar allí, a Sídney. El avión de Barcelona salió una hora tarde. En la cola estaba y se acercó una azafata. Y le dice tiene billete de clase turista pero le ha tocado la lotería. Le vamos a dar un busIness class, con camarotes, ducha, bar.. ¡cómo se lo pasan los ricos! El solo ve aviones. Media hora antes de aterrizar hubo un accidente en el aeropuerto de Kuwait, se suspendieron todos los vuelos. Los que estábamos en el aire aterrizamos, 15 min antes de que saliera el avión a Sídney. Corriendo llego justo a la puerta y la azafata con una sonrisa de “te jodes” le dijo; se acaba de cerrar, no puedes entrar. Kuwait es uno de los aeropuertos más grandes del mundo, confluyen todos los viajes de oriente medio, chino, india… no habla inglés. Está en un país sin maleta, sin lenguaje, la maleta se quedó allí, solo tenía el pasaporte. Hasta dentro de dos días no hay otro vuelo a Sídney. Y no puede salir de la terminal porque no tiene visado. Fueron horas traumáticas pero le hicieron ver quien era, como puedes comunicar con personas sin hablar su lengua, lo amable que puede ser una persona que por su aspecto físico no hablarías. Aprendió mucho como escritor. Fue una experiencia maravillosa. Perdió una conferencia que tenía que dar en la universidad de Sídney, llego dos horas después más contento que las pascuas. Que te pase lo imprevisto y pongas a prueba es algo maravilloso. Son complicadas las relaciones entre padres e hijos. Las familias felices son todas iguales y las infelices diferentes, decía Tolstoi en Ana Caterina. Estos personajes ancianos necesitan que los quieran. En las relaciones familiares lo perdonamos todos si somos sinceros. Miguel tiene que tomar decisiones morales muy importantes y lo hace por amor. Helena hace cosas por amor a su hijo. Jasmina a pesar de lo mal que le ha tratado su madre haría lo que sea por ello. Es un vínculo difícil de explicar, mágico, que se establece por razón de sangre. Que difícil es odiar a un padre o hijo a pesar de lo que nos pueda hacer. Estamos dispuestos a perdonarlo todo. Ese amor paterno filiar no funciona como el resto de relaciones porque se da generosamente y no espera nada a cambio. Un padre que quiere al hijo no espera ese retorno, a veces los hijos pueden ser muy crueles con sus padres. La arrogancia los vuelve muy ignorantes. Su función es darte y darte hasta donde no le quede más, aunque le gusta en el fondo recibir. Es un misterio este tipo de relaciones. 

  

El escritor compatibiliza el trabajo con la escritura. Ahora se considera un escritor profesional. Vende muchos más ejemplares de su novela. El premio supone unas expectativas.  No se considera profesional sino un escritor artesanal. Le gusta el arte que no solo son palabras conceptos sino una forma de entender el medio. Siempre soñó con vivir de su trabajo, de la escritura, es un privilegiado y no sabe cuándo se va a acabar. Un día la gente se cansará de leerle pero él seguirá escribiendo porque es una necesidad personal vital. No se deja someter a esa presión. Lo crean o no nunca pregunta a su agente cuantos libros ha vendido. Se entera cuando llega el año siguiente y hay liquidaciones o no. Si hay bien, vive tranquilo y si no hay mal. Hay que huir de este tipo de cosas. Publica la vista de casi de todo porque  ya quería salirse de la novela policial y escribe una novela de amor de dos octogenarios. Está planeando otra novela donde se va a escapar y viajará al mundo, porque quiere descubrir nuevas cosas. Hay un debate de si hay que escribir sobre lo que te interesa o lo que el público pide, reclama. Quiere salirse de Madrid Europa. Va a escribir una novela donde el protagonista es un niño.  Desaparecerá el narrador omnisciente y será en primera persona, testimonial, ambientada en África sobre los niños soldados. Pides pasta al ministerio de cultura, te mandan a investigar a Uganda tres meses y está muy bien. El viaje aun no lo ha hecho. Estuvo una vez y se prometió que volvería, va a dar clases a la universidad de Kambala y viajará al norte, frontera con Sudan, en Uganda no hay embajada española que está en Kenia., pero hay un negociado español y está en tratos con ellos, a ver si consigue ir allí. 

  

Preguntas. Hasta las dos del mediodía no sabían si iba a llegar o no. No sean tímidos. La gente se pelea, no digas mayor, di viejo. Su abuelo extremeño usaba la palabra bruscamente. Tienes que llegar, cuando llegues a viejo ya me contaras. Le gusta la horticultura, los árboles, el olivo viejo, el joven no vale porque no tienen raíces, ni vigor. El viejo se forma con la intemperie. Lo de viejo nunca ha sido peyorativo o despectivo. Ay que ver cómo la gente hace encajes con las palabras para ser políticamente correctos. Lo importante es como tratamos a  la gente, no como la nombramos. El pueblo Malmom es la Ítaca a la que hay que llegar. No le gusta la novela policiaca demasiado, pero le gusta Henrik Mankell mucho y su protagonista Wallander. Quería elegir una ciudad en el norte porque se habla de la frontera sur, de España Grecia, lo que pasa en Ceuta melilla y no se habla de la frontera norte, el galés, en Holanda, Bélgica… lo que viene de Europa, los atentados terroristas de Barcelona, porque tiene relación con las ciudades más avanzadas y democráticas. Los países del norte tienen un estatus diferente. Porque viene de ahí la extrema derecha, el islamismo más radical. Hay un conflicto brutal peor que el que tenemos aquí con la inmigración. Aquí estamos más acostumbrados. Somos tierra de aluvión. Ser tierra de fronteras tiene su ventaja, ser cruce de caminos. Allí es un fenómeno que no se había experimentado. Va a hablar del fundamentalismo terrorista pero también del político. La postal que nos veden es que la convivencia es idílica cuando en realidad no lo es.  Lo importante no es llegar sino cómo te transformas. Ulises tras 10 años, tras la guerra de Troya, ya no es el mismo Ulises sino otro hombre. ¿Cómo contarle a los que no han hecho ese viaje lo que has vivido, que has matado al ciclope, cómo lo has vivido y ellos no? Escribió un artículo de eso. Opinó que Odiseo seguro que estaba contento de estar con su esposa, pero por la noche echaría de menos a sus compañeros marineros y lo que habían vivido que no podía compartirlo con los demás. No pueden contarlo o explicarlo. ¿Qué le van a explicar a una chica de 40 años que hace su propio viaje? El privilegio de no tener que dar explicaciones. A veces el miedo te impide avanzar. ¿En qué momento se rompe el miedo y empiezan el viaje? Un personaje secundario vive en una residencia de ancianos de lujo en Tarifa, pero donde se sienten atrapados pues viven como en un régimen escolar, les dicen cuándo comer, cenar, qué actividades tienen que hacer. Está todo muy marcado. Marqués, de 80 años, es un personaje inadaptado, nunca ha encontrado su lugar en el mundo, se ha enamorado de la tristeza y no lo suelta. Solo sabe relacionarse con los demás siendo un rebelde sin causa, se queja de todo, revoluciona todo, pone la residencia patas arriba. Un día sin razón aparente se suicida y de una manera poética por unas razones que no vienen a cuento. Eso les produce un shock a Helena, irónica sarcástica y a Miguel. Les trastoca. No soy una planta y no me voy a quedar aquí haciendo la fotosíntesis. Prefiero salir fuera, vivir lo que me quede. Miguel se da cuenta de que tengas el tiempo que tengas no hay que desperdiciar el tiempo. Y decide acompañarla. Él no va a hacer el viaje, va solo a acompañarla. Nos encontramos personas maravillosas que nos cambian la vida y nunca sabes cuándo va a pasar. Está en su estación final y sin embargo tiene la actitud y capacidad de absorber lo maravilloso de la vida. Es maravilloso que a los 75 años tengas ganas de vivir, te enamores, o te des cuenta de que no has vivido sino sobrevivido. Hacen el amor y Helena se pone a llorar y luego Miguel. Helena le dice ¿tan fea te parezco, tan mal lo ha hecho? Él llora, porque ha descubierto lo que es el amor y dentro de un tiempo lo habrá olvidado. Helena le dice una cosa maravillosa, “yo soy tu memoria”. Cuando no te acuerdes tú de mi seguiré yo aquí para recordarte que es verdad, que esto te pasó. Ese espíritu que tiene lo hereda de Marques, ese personaje que acaba suicidándose. El protagonista del libro es la esperanza, está llena de fuerza y vigor. No se explica lo que es la felicidad, no tiene que explicarse. Explica lo que es la infelicidad porque esta hay que entenderla para poderla erradicar de nuestra vida. Es una novela que duele. Cuando vivimos la felicidad solo lo disfrutamos sin explicarla. No es una novela romántica, no tiene final feliz, pero todos evolucionan y tienen un final. No hay venganza en esta novela. La venganza es la vida, a cada cerdo le llega su san Martin. El cree en eso, la vida nos pone a cada uno en su sitio. La vida cobra venganza en la vida Es una historia de redimirse, pero hay gente que no se puede redimir, que solo aportan oscuridad. Es una novela cuyos ciclos vitales se cierran de manera natural sin empujarlos narrativamente. Es un final cerrado, pero se cierran de forma natural. Eso es algo que te da haber ganado el premio Nadal, que te atreves, no necesitas demostrar lo bien que escribes sino contar algo que vaya más de la literatura. La literatura es más que anécdota y estilismo, si la dejas y te liberas pasa eso, que se cierran las historias. Es la mejor de sus novelas. Está contento con lo que ha escrito. Hay gente joven que se ha quedado en la adolescencia, niños viejos y viejos con ilusiones. Hasta que marques muere, al principio de la novela, Helena y marques viven recordando. En ese momento Helena le dice “nosotros vamos para atrás porque somos viejos y los jóvenes van para adelante”. Mientras uno tiene fuerza hay camino, seguir caminando. Se dice; “en mis tiempos”. Pero el mundo, el tiempo, es de todos. Que sea llamativo que los personajes sean viejos ya es sintomático. ¿En qué franja de edad podemos poner a los personajes?, hay clichés sociales que se trasladan al mundo de la literatura. ¿Por qué esto tiene que ser llamativo?, lo llamativo es lo que les pasa.  El quijote es el primer road movie de la literatura. Pero esto lo suelen hacer más escritores norteamericanos. Al final de la conferencia el autor firma libros y se saca fotos con los asistentes.