En las PELÓPIDAS (pelasgidos) aparecen dos reinos importantes en la
antigua Grecia micénica; la CASA DE PRIAMO EN ARGOS y la CASA DE ATREO EN
MICENAS. Príamo era el rey de Troya y Atreo el de Micenas. Son el origen de la
guerra de Troya.
Tiestes hace el amor con su
cuñada, la mujer de su hermano Atreo porque ambos eran gemelos y por eso Aérope
no se dio cuenta de que ese no era su marido. Estaba de fondo la lucha dinástica
por quien ocuparía el reino de Micenas. Entonces Atreo le prepara una trampa. Mata
a sus hijos, a sus sobrinos, y se los da a comer a su hermano. Tiestes se come
a sus propios hijos. (esto se ve en el Proagón de Aristófanes que cuenta esa
cena siniestra) Tiestes los vomita y lanza una maldición a su hermano y a todos
los hijos que le nazcan. Atreo tuvo dos hijos; Agamenón y Menelao, sobrinos de
Tiestes y maldecidos por él. Tindáreo casó a sus hijas Clitemnestra y Helena con
Agamenón y Menelao respectivamente. En realidad, eran hijas de Zeus disfrazado
en cisne para concebir con la reina Leda unos huevos de los que nacieron Castor
y Pólux y Helena y Clitemnestra. Menelao se convierte en rey de Micenas y después
su hermano Agamenón. A su vez Príamo en Argos tuvo dos hijos; París y Héctor. Y
a Casandra, la pitonisa amante de Agamenón. Conocido es que París, raptó a Helena,
la mujer de Menelao y Agamenón ayudó a su hermano iniciando así la guerra de
Troya mientras Héctor ayudaba a su hermano París en Troya. Helena desencadena
la guerra de Troya y Clitemnestra la Orestiada, y caída de Micenas tras el
regreso de Agamenón y Casandra.
LA ORESTIADA se divide en cuatro partes;
El PROLOGO es la evocación de la muerte de Ifnigenia por parte de
Agamenón que era su padre. Clitemnestra, madre de la asesinada y mujer de Agamenón,
no ve bien que maten a su hija como sacrificio a los dioses para que les vaya
bien en la guerra de Troya. Sin embargo, Agamenón la mata y esto será el motivo
de que ella le mate a él. Los hijos de Agamenón y Clitemnestra son Orestes,
Electra, Ifnigenia, Crisostemis
COÉFOROS Son los coeforis o
párodos los cantos corales. El corifeo en el teatro griego cantaba versos
introduciendo la obra y los monólogos interiores de los personajes, atormentados,
dudando si matar a sus propios hijos como Medea o a su propia madre como
Orestes.
El ANAGNORISMO es la parte de la orestiada donde se relata el encuentro
entre Orestes y Electra, los dos hermanos que quieren matar a su madre para
vengar a su padre.
En las EUMÉNIDES se hace hincapié
en el exilio, aprendizaje y dolor de Orestes y en cómo este planea su venganza
contra su madre y su amante, su padrastro. Y como es ayudado por la diosa
atenea, por las parcas, las gorgonas y las furias griegas.
Todo empieza cuando Agamenón
vuelve de la guerra de Troya con su amante la pitonisa Casandra. Se encuentra
que su mujer Clitemnestra tiene un amante, Egisto. Ambos matan a Agamenón y a
la vidente que había predicho su propia muerte. Le lanzan un abrigo envenado de
serpientes. Orestes pide venganza contra Egisto. Electra, su hermana, culpa públicamente
en el funeral a su madre Clitemnestra de la muerte de su padre. (¿Cómo no va a ser santo devolver mal por mal?) Halla
unos bucles familiares en la tumba paterna, unas huellas... y a su hermano
Orestes. A Orestes Apolo Loxias le ha pedido que se vengue del crimen de su
padre. (grilletes sin bronce te atrapaban. Velos
estranguladores) Orestes reza plegarias a los dioses. Tiene un sueño en
el cual una serpiente le chupa los pezones a una mujer, de los cuales mana
leche sangre y leche (¡No son vanos los sueños de los
hombres!) Orestes, disfrazado de Daulio de Offside, dice a Clitemnestra
que Estrofio le manda a traer la mala nueva de la muerte de su hijo Orestes.
Ella ni se inmuta de la muerte de su hijo, al que no quería, pero la nodriza
llora la falsa muerte. Orestes clava un puñal a Egisto. (a los vivos los muertos asesinan)
Su madre le maldice cuando Orestes
mata a su propia madre. “Jamás mortal alguno de tu
estirpe tendrá una existencia sin dolor”.
LAS EUMÉNIDES eran las diosas de
la venganza, también llamadas furias o erinias, hijas de la noche. Nacieron
cuando Cronos le cortó los testículos a su padre Urano, el Saturno que devoraba
a sus propios hijos. Eran a su vez hijas de Gea, la madre tierra. Eran 3:
ALECTO TISÍFONE y MEGERA. Némesis era la diosa de la justicia, la AISA. Son estas
furias las que ayudan a Orestes a vengar la muerte de su padre. Oreste acude
dónde una pitia alucinada para que le cuente quien había matado a su padre. Y
esta le dice que fue su propia madre. Aparecen las gorgonas y las parcas del destino o moiras del fatuo; Nona, Décima y Morta (para los romanos)
y Cloto, Laquesis y Atropos (para
los griegos). Aparece también el espectro de Climenestra que le llama matricida;
Orestes ha matado a su madre. Todo esto ocurre en un trasfondo de pelea entre
los titanes tribales y los nuevos dioses olímpicos, los dioses divinos de la Polis.
En el fondo representa la lucha entre la Grecia antigua (minoica y micénica) y
la Grecia clásica, donde los dioses son
antropormizados y ayudan a los mortales. El viejo mundo aristoi, de los
nobles, representados en los titanes y el mundo de la democracia y la Polis. Los
Hiperbóreos era un pueblo mítico y
feliz, la edad dorada de los hombres cuando convivían con los dioses. Atenea le pregunta la causa del asesinato de
su madre y Orestes se escuda en Apolo. Ella le somete a juicio a ver si la
sentía como madre. A cambio, él protegerá el ática. Si las furias aceptan la
absolución del caso (que la maldición de Atreo acabe ya aquí) se las honrará
como Euménides. Así acaba la Orestiada de Esquilo
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