IVY COMPTON BURNETT Piner 1884 Londres 1969
Escribió su primera novela a los
40 años, fue criadas y doncellas que salió publicada en 1925. En ella se basó
para la película señoras y criadas. Los críticos de la época la definieron como
una obra asombrosa, nada mejor en el mundo y a la autora como un genio. Su
segunda novela tuvo más problemas. Hermanos y hermanas sale publicada en editorial
lumen, en 4 volúmenes de 4 mil páginas. Su vida y obra sigue siendo un
misterio. Se ha escrito su biografía vida de una inglesa. Difícil resulta dar
información fiable de esta autora. Ante el desconcierto de los que la trataban,
rara vez hablaba de temas personales. Fue anfitriona en la época victoriana, vestía
ropa negra. La literatura iconoclasta la situó en lo más alto del mundo
literario. Publica en esa época de experimentación modernista. Nada tiene que
ver formalmente con la generación modernista. Su estilo es frio seco
irreverente e irónico. Son autoras estupendas, recomendables todas las que
tratamos. La descripción es parte necesaria de la novela. No lo es en el
teatro. Sus novelas versan sobre seres imaginarios y sus vidas. Debería
escribir obras teatrales, la dijo mucha gente. Leer teatro me da mucho placer.
En las novelas la voz del autor silencia las voces de los personajes. Su estilo
es dejarse llevar por instintos personales. Hace un escrito seco frio y puntilloso.
Hay carencia de reservas orales y hace concesiones al analizar la vida real a
finales de la última década del XIX. Formalmente es tradicional. No tiene interés
en las vanguardias del momento ni en la política. Analiza el uso incorrecto y
totalitario del poder. Habla de la manipulación del lenguaje. Y la presión sobre
los seres débiles y vulnerables. Analiza el poder destructivo, los padres
tenían poder absoluto, el pater familis y el hijo mayor. Dicen que las cosas no
suceden como mis libros, créanme, sí lo hacen. Créanselas porque me las he
inventado yo. Analiza las formas del poder. El padre es bebedor de whisky y un hombre
déspota con familia e hijos. La mansión es otro personaje de la novela donde se
puede servir el desayuno, se hace liturgia, la crónica de la humillación, es el
surgimiento de diálogos de crímenes y adulterios. Las ceremonias son reflejo de
la hipocresía de los amos, que los niños ejercen con crueldad, no se salva ni
el apuntador. Ves su visión de las relaciones de poder de la familia. Un arriba
y abajo en plan cruel
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