viernes, 24 de febrero de 2017

LA VIOLENCIA

En Bidebarrieta pudimos escuchar este dialogo a modo de entrevista discusión. Al final hubo preguntas del público. Se analiza el libro de Girón; crisis social de los movimientos en España. El libro permite una reflexión sosegada. El ponente conoció al autor del libro en la universidad del país vasco. Es un investigador incansable, se ha recorrido toda la geografía de España analizando los fenómenos de la violencia. “Los sociólogos tenemos carácter esquizofrénico, nos preguntamos por el ser y el deber ser. En esa lógica esquizofrénica somos utopistas, optimistas y pesimistas”. El autor es un sociólogo de la elite de la investigación. Ha trabajado con Alan Tunier, el sociólogo más influyente de la sociedad moderna. Analiza los movimientos sociales y los conflictos violentos. Es más cómodo analizar otros fenómenos. La violencia es un fenómeno que salpica emocionalmente vitalmente y te obliga a tomar posición. Es más complicado ser sociólogo tomando posición. Ha trabajado con monstruos de la sociología. Podemos preguntarnos si Dios existe o no, si existe la nación vasca o la brujería y el olentxero. “Los sociólogos lo bueno que tenemos es que no respondemos a estas preguntas. Si dios existe lo dicen los teólogos. Cuando la gente piensa que esto existe hay consecuencias”. No debemos preguntaros quién tiene razón en un conflicto violento. Es parte del estudio si la gente practica la violencia porque está loca o no, o porque es el resultado de otros fenómenos estructurales. Se practica la violencia, es un hecho. El autor trabaja en el libro con el concepto de crisis, movimientos sociales y violencia. Analiza el fenómeno vasco, el catalán y el movimiento de indignados.  ¿Qué diferencias peculiaridades hay en cada uno de estos tres casos? La violencia es el resultado de una anomia, una desestructuración. ¿Cómo puede estar tan loco el mundo?  Analiza la violencia desde términos sociológicos. Cae en mitologías y categorías que ya no funcionan para explicar fenómenos como la violencia. No es un libro sobre la historia del nacionalismo, la violencia en el país vasco o la historia de España. Es un ensayo para comprender la época en que vivimos. El sociólogo es francés, tiene una visión diferente del exterior viviendo dos años aquí. No tiene un discurso sobre el país vasco, y la violencia concreta aquí. Para entender la época hay que entender lo que ha cambiado fundamentalmente en nuestra época. Hay un mundo social en el país vasco que lucha por estas cuestiones. Analiza en su libro transición, el franquismo… no es un libro sobre Podemos. Los estudiantes de Francia esperan que podemos sea una nueva mitología política que va a cambiar el mundo. Este es un libro de cómo se construye la política hoy día dentro de la violencia de esos procesos. Se asocia conflicto y violencia, pero es posible un conflicto sin violencia. Necesitamos violencia para el conflicto, pero no demasiada. Es una violencia que desborda totalmente el estado nacional. Habla del individuo colectivo en internet. La violencia está asociada al termino estatal. El presidente del Líbano pedía a Israel que dejara de atacar su país. No era concebible hace 50 años que se atacara a un país, pero no al estado. La violencia tenía carácter territorial. Aparecen lobos solitarios, no el perfil del chacal. Los politólogos tienen dificultades, pues la manera de conocer la sociedad va más lenta que los cambios sociales. Había tres tipos de actores; los movimientos políticos, movimientos sociales y los grupos de interés. Donald  Trump, por encima de su partido político,  apoyado por movimientos políticos supremacistas, por los grandes empresarios y los grandes capitales. ¿Podemos es un partido, un movimiento social…? Son realidades mucho más complejas. Al introducir ese carácter de complejidad se ha obligado a limitar esa complejidad. La realidad es más compleja que la mera palabra. Se refiere a violencia del otro, de los grupos y la violencia social que sufren los colectivos. Hay una violencia del feminismo también.  Habla de la “kale borroka”, violencia difusa en la calle o la violencia en internet en Francia. La violencia en internet es la de los troles, insultos y amenazas que pululan por los foros y las redes sociales. Cualquiera puede insultar al otro, como en esos mensajes cuando murió Bimba Bosé.  La violencia clásica es la de los movimientos sociales obreros. Hace una clasificación personal que es real o no. En el libro retorna a hablarnos de la filosofía punk en los años 80. 
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Todo es incontrolable, no sabemos qué va a pasar con la violencia. Antes había un control. Ahora surge de manera incontrolada. El nacionalismo vasco de los jarchales, la derecha, tiene una ramificación joven y de izquierdas que son los abertzales. Y a estos se les relaciona con la banda ETA. Un grupo de jóvenes queman retratos, banderas, papeleras. En otros países se destruye la estatua del gobernante o se quema su retrato. En la película de Bertolucci Novecento los obreros salen a la vez como masa, como sujeto en que había individuos, pero sobretodo una coherencia grupal, grupos muy unidos y cosidos entre si. Pensar en la nación vasca o en derrocar a la clase burguesa lleva a la violencia. Hay organizaciones que las dirigen. La masa, como vio Ortega, no tiene ideas sino solo creencias, no es individual y se apoya en el sentimiento grupal. Detrás de la violencia callejera de los barrios post industriales hay una jerarquía intelectual orgánica que es la que escribe los discursos, proclamas, las canciones protesta, la que nutre intelectualmente lo que después será praxis violenta. Son los intereses del sistema o del contra sistema las que aportan el contenido teórico de la acción.  Eta piensa en un pueblo trabajador vasco que sale de la oscuridad del franquismo y avanza a la aurora del nacionalismo vasco, la independencia y el socialismo. Esta lógica nace sobre una óptica marxista. La clase dirigente de la vanguardia encabeza la revolución en nombre de ese pueblo usando la violencia. ¿En nuestros tiempos donde está la clase obrera? Si mirabas los balcones de Rekalde veías colgados pantalones de obreros, ahora ves un chándal, otro tipo de ropa. Desde un traje de noche a un buzo de pintura convive en ese colgador. Son tiempos híper individuales (o mejor dicho personales) donde revindicamos el derecho a vivir, es el tiempo del yo individuo o del self. Se vendían libros sobre sabino Arana y el nacionalismo, y el socialismo. Ahora en la sección política de fnac hay manuales de autoayuda; háztelo tú mismo, bricolaje… ¿Qué pasa con ese joven francés que era discotequero juerguista? Se convierte en lobo solitario que asesina 3 judíos. En España, además de ETA, tenemos la violencia del gal con más apellidos españoles, más que el cid español. O la realidad del jihadismo. Ahora la violencia tiene componentes individuales más que colectivos. En la facultad de la UPV hemos tenido episodios de violencia. Violencia como resultado del fracaso de la política. Los jóvenes protestaban contra la elección de decano en la universidad pues solo se presentaba una del PNV. No justificamos la violencia, la explicamos en términos de fracaso. La política es gestión de lo público y cuando se rompe la baraja, aparece la violencia. Es un terrorismo de baja intensidad. Hay una categorización de esa lucha y esa violencia. El estado y la política tienen la responsabilidad de parar las situaciones de conflicto. Pero a veces es un problema que se les desborda. La política alimenta un proceso de violencia. La política no permite el conflicto, pero su represión alimenta más violencia. Ojo por ojo, diente por diente. Violencia llama a más violencia. 
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El primer ministro en Francia en el parlamento dice que hay que luchar. Las políticas públicas tienen sus efectos y los sociólogos evalúan estos efectos. Debe haber una elección de estrategia política para luchar contra violencia. La gente vive situaciones de emergencia y eso es lo que les hace ser violentos. Algunos de los violentos pueden tener problemas psicológicos, esquizofrenias, pero no siempre, no todos. Y de esto se olvidan los medios al informar. El gobierno dice a los sociólogos que no interpreten las cosas y que se callen. Si los sociólogos se callan entonces solo quedan los policías y psicólogos que es el punto de partida de la peor sociología. Entiende el sistema la sociedad ideal como un sistema perfectamente ordenado, donde todo se conduce maravillosamente y el que no encaja va al psiquiátrico o la cárcel. En los 60 ¿todos se vuelven locos?, lo cierto es que hay un ciclo de violencia. Asistimos a la emergencia terrorista del yihadismo, ¿por qué todos nos hemos vuelto locos? Si la respuesta es tan sencilla construyamos cárceles y psiquiátricos. Hay que ver que hay detrás de la violencia. Esto no es justificar sino explicar. Recuerda la película francesa del odio que habla de las revueltas. España es un país en que ha habido mucha violencia, es un país violento. Francia ha sido el lugar de las cuatro revoluciones; la francesa, la comuna de parís, mayo del 68 y la de la globalización. En el año 95 jóvenes de suburbios franceses empiezan a quemar coches. Acaba mal. Tres chavales de los que delinquieron vivían en situación de exclusión social. Comparando con el modelo catalán, allí también viven una opresión constante. la violencia de París era una violencia nihilista dirigida a símbolos. Hay un libro llamado chusma en que se habla de que Sarkozi llamó a esa gente chusma. En el libro se entrevista a 40 personas de esa chusma. El chaval dice; quiero quemar mi jaula, para que vean en que jaula vivo. Queman el coche del vecino que tiene lo poco que él no ha podido tener. La política debería responder a esas frustraciones, esa violencia se ha dirigido no al vecino sino a la política. Se amenaza en el 95 de que algo iba mal en Francia. Madrid… hay una relación social entre lo político y la violencia. En Euskadi la violencia mata lo social. En Cataluña lo social contiene la violencia. Los indignados en lo social eliminan lo violento. Es una violencia legitimada la de la policía y el ejército. En los 90- 2000 se vivió un marco de violencia permanente. La explicación de lo social pasa por la violencia. Hay formas de energía social, hay que pensarla unido a la violencia. En Cataluña también hay violencia nacionalista pero no se ve, se estudia y en cierta forma se acepta. Hay violencia de motines, tensiones racistas en lugares muy nacionalistas. Para el nacionalismo oficial catalán (Pujol, Maragall) la violencia urbana es un anti modelo, algo que no debemos imitar. En Tarrasa hay muchos problemas, exclusión social, violencia en las escuelas. Hubo violencia en los indignados, ataques y amenazas y un discurso exterior antisistema. Podemos hablar de la violencia machista, de las agresiones, tensiones, en la lucha del ego. Vemos en Podemos discusión entre sus dos líderes. Es otro tipo de violencia, violencia política. La violencia existe siempre, hay que regularla controlarla. Se debe hacer una presentación social primero, una movilización después. Es importante la estrategia de presentación. Ves los actos. Hay violencia difusa escondida en la violencia criminal, la violencia del día a día. Cambia el lugar, los actores pero es la misma violencia. La violencia de parís es nihilista, lúdica, pero es política quizá. Hubo violencia y muchos problemas con la des colonización. La violencia en Francia se explica por la exclusión, la falta de trabajo, vivienda y  alojamiento. Es una humillación inaceptable a nivel moral. Hay fracturas internas, como en el psoe. Debemos pensar la violencia sin condenarla de antemano. El sociólogo detesta la violencia pero el conflicto no lo crea el antisistema sino los políticos y el sistema opresivo. Se mezclan diferentes vías de contestación. Hay un núcleo estructura, pero al lado hay otras vías. Hay mucha violencia en la universidad. Si ves la historia en Francia por ejemplo muchas cosas salen de la universidad a nivel social. La reforma de Bolonia, de la universidad en España, tuvo muchos efectos en los indignados. Hay violencia y manifestaciones en la universidad del país vasco. Se hizo un estudio de 10 mil jóvenes de la kale borroka. Se manifestaban contra el capitalismo fascista. Los estudiantes de la UPV revindicaban una educación pública y no privatiza capitalista.  Son símbolos no de lo radical vasco sino del anti capitalismo, anti sistema. Es una mezcla de muchas cosas que no corresponden únicamente a la violencia nacionalista. En los barrios estaba la heroína, el paro, el cierre del euskalduna, problemas importantes para la juventud, problemas ahora olvidados como ir al ejército a la mili. En los años 60 hasta en la música se refleja esa pluralidad de factores que desde posiciones muy diferentes se enfrentan al sistema o realidad. Kortatu pasará a la historia con sarri sarri, eskorbuto, cicatriz, vulpes.. por poner rostro a estos grupos. No cantaban en eusquera ni eran abertzales; eran anti capitalistas ecologistas insumisos. Había comandos autónomos anti capitalistas, no solo eta, como en el atentado a la casa del pueblo de Portugalete. Mataron a dos sindicalistas del colectivo mendeku, vinculado con sectores autónomos. Atacaron a Enrique Casas, senador del partido socialistas. Estos grupos surgieron antes que los comandos de ETA y fueron condenados por herri batasuna. A mediados de los 80 la izquierda abertzale subsume esos espacios que se oponían a la izquierda abertzale. Jarrai decía que había que ir a la mili. No estaba aún el gazteche del casco viejo. A partir de ese periodo esos espacios son subsumidos. HB en el 87 consigue los mejores resultados de su historia. Se negocia con eta. Había colectivos rebeldes que la izquierda abertzale no controlaba. La cuestión social es olvidada. En 2010 a consecuencia de la crisis vuelven los tiempos oscuros, la generación no future. Hacen una manifestación a pesar de que Sortu y HB y LAB piden que no haya incidentes. Todos piden tranquilidad. Para la candidatura a rector de la universidad hay candidatos abertzales. Se les acusa de fascistas, representantes de una universidad burguesa. No se plantea otra alternativa. Se busca una universidad libre vasca. La critica contra la universidad se llena de hoces y martillos. Se pintan mensajes en ingles contra las cámaras, a favor de las trabajadoras de la limpieza. El cese de la violencia de eta, y su vinculación de hb al modelo institucional ha dejado un espacio vacío. Lo nacional no es el único motivo de la violencia. La crisis vuelve a poner encima la violencia de los años 80. Los incidentes en la universidad recuerdan al bloque negro en las formas, en la contestación. Habla de una juventud que considera que su sociedad no le da alternativa. Están en contra del sistema totalmente. En 97 Manuel Castell escribe la era de la información, 3 mil páginas, 3 volúmenes y dice; el próximo siglo será una confrontación de identidades, no de clases, sino de proyectos de identidad.  Se legitima el sistema, los partidos tradicionales. La gente legitima iglesias y partidos sindicatos. Cuando las cosas van mal pierden apoyo y la gente apoya identidades de resistencia. Las que resisten tendiendo puentes, haciendo lazos.(la izquierda) Y las que resisten creando guetos y fronteras.(derecha) Un ejemplo de izquierda son los indignados. Surge de un colapso de identidades que no nos representan. Con el cambio de 2 partidos hemos pasado a 4. Algo ha pasado con esas instituciones que parecía que nadie las iba a tocar. Es un proyecto dedicado a  tender puente. Un ejemplo de derecha son la policía reprimiendo el 15 m a un colectivo de identidades que se enfrentan al sistema. Y se crean guetos y trincheras; el caso de terrasa, los movimientos xenófobos, los movimientos integristas. El gobierno de EE.UU., el  país más poderoso de la tierra, se basa en un proyecto de hacer muros. ¿no es esto violencia? Hay una relación entre lo legitimo y no ilegitimo. No hay movimientos sociales positivos. Alan Turner estudió los movimientos sociales. Un resultado es la movilización de Podemos. 8 millones de jóvenes han votado al PP por un sentimiento de miedo de la desclasificación. Retorna la religión católica en los jóvenes. Hay una fractura entre las escuelas privadas y públicas. Se crean guetos escolares. La clase conservadora se organiza secesionando y los que quedan, jóvenes, profesores de uni, los intelectuales no se organizan. Los partidos políticos la única respuesta que tienen es pequeña en una sociedad que tiene miedo. No son tiempos para el optimismo. El mundo hace 5 años se veía de otra forma. Planteamos otro mundo distinto. Se ningunea la primavera árabe, que Europa ha olvidado. Se ha masticado digerido y aprovechado el 15 m. los partidos se hacen el harakiri. Se plantea la alternativa tendiendo puentes y por otro lado muros, fronteras, guetos. Se da alas a las respuestas que plantean alternativas pero basándose en el miedo, en cerrarse, en poner fronteras. Obama con el We cam tampoco ha podido cambiar el mundo. En vez de mirar a una persona que les ofrece más de lo mismo (Hilary Clinton), votan a Trump que les ofrece algo distinto. El miedo es algo decisivo en nuestra época. Hay razones para el miedo que surgen de la necesidad que algunos tienen de legitimarse. Alguien rescata el pacto de los años 40 en que se renunciaba a la violencia por una situación de estabilidad. En la época de Margaret Tacher. El neocapitalismo ha arrasado todos los logros conseguidos durante siglos. Estamos peor, hemos involucionado. Nuestros nietos no tendrán el derecho que tenemos ahora. ¿Cómo es posible que gente vote a quien le quita sus derechos? No ofrecen bienestar n libertad sino seguridad. Para que compres seguridad tienes que tener miedo. No se ofrece una educación ni sanidad pública ni derechos sociales y nos han ofrecido francotiradores en su lugar y legalización de las armas. Estamos en una sociedad cagada de miedo. A los que nos ponen francotiradores ni siquiera se les vota directamente, se le vota a Trump y no a la empresa de armas. Se debe y puede dar la vuelta al mundo. Hacer pensar a los gobernantes que no quieren cambiar nada, si no cambian nada va a cambiar todo para peor. La corrupción en Valencia del PP es otra forma de violencia, o la burbuja inmobiliaria, el desastre de las cajas de ahorro como Bankia, el caso Gurtel y Nos. Parece que los corruptos son unos alborotadores de los impuestos. Hay provocaciones tremendas antes de que haya violencia. Es una violencia legitimada la que ejercen los híper ricos contra los pobres. Las sociedades se desnacionalizan. Ya no manda el estado sino la empresa, lo privado asume lo público.  Los ricos no pagan, tienen excedencias fiscales. Los de google paypal quieren crear plataformas sobre una isla, hacer un territorio sin impuestos. Es una violencia  tan impórtate como las otras pero no está condenada ni analizada como violencia. Es un enigma. Los indignados protestaban al principio contra la corrupción. Hay poca movilización sobre eso. Hay una aceptación natural de la corrupción de la elite, como en el frente nacional de Francia o los casos judiciales de Sarkozi. El resultado electoral da casi igual. La delincuencia, la violencia tiene más efectos sobre el estado que simplemente quemar un coche en la calle. El coste de esta violencia es mayor, y es más importante que la violencia callejera. Condenamos al ladrón de una fruta, al pequeño ladrón y no perseguimos a los grandes mangantes. Hay una forma de aceptación de la corrupción, si analizamos el nivel de corrupción de país vasco y Cataluña. La economía de obras públicas es corrupta. Hubo una alcaldesa en Valencia corrupta, Rita Barberá. El pequeño magrebí que recibe ayudas sociales, no se está aprovechando del estado del bienestar. No viene a quitarnos el trabajo ni las pensiones y ayudas y rentas de garantía social. La Iglesia sabe de estas cosas del poder, lleva cierta salud, el génesis dice que al principio fue el verbo. El poder define la realidad, lo que existe y lo que no existe. Define como violencia muchas cosas que lo son y define que no es violencia cosas que también lo son. El poder de dios es el poder de nombrar. Ese poder establece lo que es violencia y no es. Tras la corrupción hay una privatización de lo político. Los problemas privados pasen a ser públicos. Es una violencia estructural, no de género, y pierde su capacidad de luchar contra ello. Lo público, como la sanidad, se convierte en privado, me lo meto al bolsillo. Los medios están en poder de los poderosos. Hemos de reconstruir lo destruido. Francia necesitaba trabajadores de los países árabes que habían tenido relación colonial con Francia. Estorban los nietos de esos trabajadores que han nacido en Francia. No hay trabajo para ellos. Un camión de cerveza partió de fábrica a un centro de distribución comercial e iba sin conductor. Millones de puestos de trabajo se destruyen por la robotización, la revolución científico técnica. Esta revolución tecnológica sería maravillosa si incluyera el contexto de propiedad colectiva de los medios de producción. Pero la tecnología se da en el contexto de propiedad privada de los medios de producción. En Europa el paro afecta a 40 millones de trabajadores. Mañana a 80. Es lo que tenemos.  La juventud no tiene futuro si no se labra su propio futuro y digan basta. Es esperanzador el 15m, los indignados, ola que recorrió Europa y llegó a Wall Street. “A mí me queda poco tiempo”, asegura un espectador, “pero los jóvenes deben tomar el relevo”. No olvidemos las razones posibles de la violencia sea cual sea. No olvidemos la historicidad de la violencia. La posición crítica del podemos nos vislumbra la conflictividad social. La economía digital no va  a unir todo. Los profesores de derecho laboral dicen que nunca hemos vivido una situación tan precaria en el trabajo. Sin derechos, n acuerdos colectivos. Es una época peor que el siglo xix y si nadie habla de eso, aceptamos la conjunción, y nos volvemos individualistas capitalistas. Hay una híper individualización a través de internet. Hay que reinstalar los conflictos en la situación laboral, la calidad del trabajo y el sentido del trabajo. La palabra conflicto tiene un significado despectivo pero es necesario el conflicto, que haya conflicto para cambiar las cosas. Se culturiza la juventud a través de los medios de comunicación, medios que no invitan  a la reflexión. Los medios están en manos de la banca, que forma parte del núcleo fundamental del poder. Hay una subordinación de un periódico como el país que en su día fue importante en la transición. El país ha negado la colaboración de Ignacio Ramonet porque entrevistó a Fidel castro. Los demás periódicos eran de derecha del país. Han prohibido a Ramonet dignarse a escribir en sus publicaciones. No hay enigma, es la alienación absoluta de ciudadanía en toda Europa por parte de los medios controlados por la banca. Francia era el corazón de cultura europea y cuna de 4 revoluciones ¿Cómo va a reaccionar ante la tristísima elección que se plantea? La izquierda francesa denuncia la alienación en la economía del tiempo y el ocio basado en internet. Das clase y los alumnos están pero no están, están verificando sus mensajes del wassap. Instalar espacios sin internet sería algo bueno. Tenemos que leer libros pero al mismo tiempo la cuestión fundamental es hacer de internet instrumento de la revolución y el cambio. Jóvenes abertzales, e indignados en internet usan la web como un interesante proyecto político. Hay que controlar este nuevo espacio de poder. Hablamos de clase social, alienación, poder, cuestión social, temas que habíamos olvidado. … 20 medios (los periódicos público, el diario, movimientos de feminismo) se unen para hacer común la causa de los indignados. La juventud está mediatizada por los nuevos tiempos. El conocimiento nos lo da alguien, nos dice que es la verdad absoluta, la enciclopedia británica que es la Wikipedia. Ya no se edita en papel. Tenemos Wikipedia, sabemos que está manipulada pero son lógicas más horizontales que la del pasado. Los tiempos digitales no ayudan a lógica de la acción colectiva en nuestros tiempos. La palabra de esos tiempos era compañero, palabra para toda la vida, asociada a las clases sociales. Si nacías en Rekalde nacías obrero y morías obrero. La lógica no es ya del compañero-camarada sino del amigo de Facebook. Me agrego, me desagrego. Me hago amigo, cuando quiero me desamigo. Antes ¿Cuánta gente de Bilbao fue a vivir a la casa ocupa de Rekalde? poca, pero ahora … si entrabas al compromiso obrero te quedabas para siempre. Por ejemplo los curas. Había muchos concienciados sociales pero no tantos como se necesitaba. Ahora la gente joven se agrega, entra en masa, y se quita, se desagrega. El movimiento okupa vio como entraban decenas centenares miles de jóvenes que se quedaron hasta que lo derribaron. Si te gusta te quedas. La responsabilidad es de la gente que quiere cambiar cosas, no el que te deja entrar. Es más fácil que entre la gente. Esa gente prueba y luego decide irse o quedase. Parece que el conflicto es malo. Tenemos una ciudad bonita en Bilbao, paseas por Abando Ibarra. Ahora ni siquiera llueve, no hay sirimiri, hay luz, la gente sonríe, los turistas se hacen fotos….pero si vuelve a haber inundaciones como las del 83 ¿Cuánta gente iría a ayudar con la riada a quitar el barro? Los de Rekalde irían a ayudar, ¿por qué?, porque allí aún hay conflicto obrero, una conciencia obrera. No porque sean los mejores. El conflicto sigue estando presente. El conflicto es un valor en sí mismo. Quiero ver la gente feliz pero que no llegue a casa y esté sufriendo. Intentamos arreglar los conflictos. Ves gente sonriendo en Abando Ibarra pero luego se suicidan en su casa. Una sociedad sin conflicto solo es perfecta en los cementerios, único sitio que no hay conflicto de verdad. 

Resultado de imagen de violenciaUna de las asistentes a la conferencia aseguró que vivía en el barrio de irala, y era profesora allí por lo que conocía el mundo de las escuelas y las familias. “Tenemos derecho a existir. Hay miedo por el futuro como se vio en las movidas de la lonce. Se repartía información. Ponerse en contra sirvió de algo, para lograr una mejor convivencia cultural. Hemos conseguido derechos como la seguridad social, los salarios mínimos. Se ha logrado porque la gente se ha movilizado. Hay que enseñar a los chavales e hijos a comunicarse. Se busca información sin saber si es cierto o no. Acumulan datos sin relativizar, separar cosas. Nunca han trabajado tanto en equipo, pero se fomenta la competición. En los partidos políticos ¿Dónde está la comisión de educación, la mesa de comunicación? Se siguen usando métodos que se usaban en el siglo XIX. La gente que no tenía oportunidad de leer y escribir, se metían en la lucha y convencían a la gente para unirse. Por el miedo al diferente, que es algo connatural, se establece la desconfianza, naturalmente es así. La escuela y los padres deben fomentar a los jóvenes a respetar y aprender de la gente diferente, ver que son personas con nuestras mismas necesidades. Hay que tratar la educación desde el nivel más básico de las escuelas”. La historia nos enseña algo, y es que tiene muchas vueltas. En Euskadi no había igualdad, pero se ha conseguido, trabajando en educación y coeducación. Se concierte la educación en una cuestión transversal. Se ha retrocedido una brutalidad. Hemos de educar contra la violencia y conflicto peor a veces ese conflicto es necesario. No caigamos en el espejismo de ese abando Ibarra tan bonito que esconde tantas cosas. Me encanta pasear por allí, pero en los alrededores te das cuenta que no es tan bonito, paseando por Sestao. “Bilbao es tan bonito porque bebiendo vinos nos conoce hasta el papa”, bromea el conferenciante. En la educación no hay que caer en el espejismo o ficción del todo está bien. Crear comunidad, crear redes, retejer. No desde individualidad, la subjetividad sola. ¿Cómo me enfrento a rabia que tengo dentro sin expresarla en violencia?. La violencia es connatural al ser humano, es su instinto de ira o thanatos pero esa violencia se puede reprimir y expulsar catárticamente en violencia o canalizar y sublimar, por ejemplo en el arte.  Hay que luchar contra la xenofobia, el integrismo pero también contra la violencia legalizada estatal de EE.UU. o el ejército. Comunidades tejidas y cosidas son comunidades que solucionan conflictos. Las comunidades rotan llaman a mama y papa para que las solucionen; Berlusconi, Donald Trump o Hitler. Este año que ha empezado nos ha dado una sorpresa para empezar con buen pie; En Austria no ha ganado la extrema derecha. 
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La política es como un escenario tradicional donde hay principales actores, hay luces y sombras. Pero en la trastienda de la representación, del sistema, están los que de verdad gobiernan y mueven los hilos de sus títeres políticos. La trastienda del sistema es un lugar donde la falta de luz es indudable. Han cambiado y se han apropiado de la postura y función de los antiguos apuntadores. Ya no están a la vista de nosotros, están detrás, no los vemos, pero actúan. En este escenario gobierna los principales poderes. La falta de trabajo es eje y fundamento que se da en España y otros sitios para justificar las cosas que están pasando. Lo peor que puede haber es que en ese escenario con tantas luces y sombras que nos dejan ver se ha conseguido la máxima impunidad, conseguir que el sistema actual sea el único sistema posibilista. Cuando no es así. Echamos de menos la postura de la izquierda. Hay otras soluciones.  Hay un movimiento de reunión de grupos con intereses compartidos en este sentido. Partidos políticos clásicos tradicionales y del cambio se mezclan. El miedo al cambio está en la naturaleza evolución del ser humano. Trump da alimento, seguridad. No dejarnos llevar por el espejismo todo va bien, todo puede ir peor. Donald Trump es el presidente. La sociedad se desvertebra como en el origen del fascismo. Se define como socialista humanista Bernie Sanders, el candidato que compite con Hilary Clinton, es la persona de la historia de EE.UU. que mayor número de personas le han financiado. Para presentarte a las elecciones de EEUU hay que tener dinero. Le han financiado miles de personas que ponían 10 e. Hilary Clinton no es una monja de caridad que pida dinero en hospitales, se lo da el dinero el NY times y las instituciones.   Gana el centro porque compran el discurso a la extrema derecha. En un momento de polarización debemos poner sobre la mesa alternativas reales. El enigma de la izquierda es que ha gestionado la política de la derecha, los recortes. La crisis en el SOE es un enigma. Lo que pasa es que tenemos una gestora, un grupo prisa que apuesta por la gran coalición de posturas. Y esta empresa apuesta por el cambio de España. Se lo han cepillado sin compasión. Es parecido a la novela asesinato en el comité central de Montalbán, la novela negra 25 años después se ha hecho real. Hay miedo al cambio que hace que no se cambie nada. Es un momento en que debería haber polarización. A Trump no se le puede ganar con el discurso de Clinton. Trump no ha dado argumentos, no ha tratado de convencernos intelectualmente sino emocionalmente. Detrás de él hay muchos asesores que escriben sus discursos, una campaña de márquetin y mercado, un culto a la personalidad. Se ha hecho con el control de todos los medios de comunicación. La izquierda no sabe, está ausente, ¿Qué pasa con la extrema izquierda radical francesa?, emergen figuras con mucha relevancia. Quizá le pase eso al partido socialista. Sale un tipo político diferente dentro de podemos, gente que venía de movimientos sociales que no se veía que pudieran ser concejales del ayuntamiento, en el caso de Madrid. Jamás pensaban que iban a ser políticos. La gente les ha pedido que se presenten al parlamento o ayuntamiento. El tipo de político que teníamos era caduco, no tenía empatía con los problemas sociales. Ahora tenemos una perspectiva bastante buena y positiva de que ocupen escaños. Es una tabla de salvación. Los de Santutxu  se iban a Rekalde para ayudar y formarse y crear grupos y movimientos políticos, eso fue muy interesante. Era el único barrio en todo Bilbao que hicieron y siguen haciendo una violencia pacífica y obrera. El autor del libro analiza una sociedad des politizada por internet. En ninguna librería se puede encontrar su libro- En la biblioteca de la UPV hay un experimento sobre cámaras de video vigilancia que no tiene que ver con este libro y los problemas sociales. Firma la desiderata sobre esa obra suya. Están descatalogados muchos de los libros de los principales sociólogos. Los grandes sabios no existen. Descargarlo de internet es delito. El autor hace un alegato contra la piratería pues algunos tienen que vivir de lo que escriben. No hay ningún libro de este sociólogo en las librerías y en cambio te encuentras montañas de Reverte.

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