De Zoe Valdés
Capitulo II “Heroico Nacimiento”
Afirma, en el prologo, Luisa Castro que el único error de la escritora, a caballo entre su sentida Cuba y su liberador París, es haber firmado la novela tras escribirla. La protagonista es una “hija de la revolución”. Sus padres son marxistas leninistas. El propio Ché Ernesto Guevara, el héroe de Cuba, pone en la barriga embarazada de su madre un banderín de la revolución cubana. La niña nace el día de la conmemoración de la revolución cubana. Su padre la bautiza Patria. Es un nombre que le queda muy grande, un nombre del que enseguida se desprende la protagonista. Se confunde protagonista y narradora en esta realista novela intimista que tiene mucho de autobiográfica y en la que reconocemos a Zoe Valdés. Zoe Valdés fue una de las exiliadas cubanas en Miami. Escapó de la crudeza y la miseria de una Cuba en la que la revolución del Ché se había convertido en la dictadura de Fidel. Esta novela fue muy bien acogida por la crítica. Su autora la escribió en París, tomó distancia para poder escribir la novela. Toda la novela es un mensaje de socorro hacía Cuba. Es muy subjetivo y todo obedece a una campaña contra Cuba describiéndola como un país atrasado, de pobreza y retraso. Pero no habla de grandes reyes o héroes sino de la intrahistoria de los cubanos. Es una crítica política al régimen. Pero esa sería sólo la primera capa. El lector puede navegar en la novela y profundizar en que también es una obra nihilista, donde los personajes ya no creen en nada. Es un homenaje a los poetas cubanos, como Reinaldo Arenas (que también se exilió pues persiguieron su homosexualidad) o Lezama lima, Nicolás guillén, José martí, cabrera infante, o Virgilio Piñeda. La novela describe el día a día, la cotidianidad, el realismo mágico, la insoportable levedad del ser, una nihilista descripción de nimiedades, de la nada en que viven, de la náusea, del exilio exterior pero también del interior.
Capitulo III Yocandra, entre el terror y el Pudor
Patria asiste a
la escuela, donde debe leer poemas de Lezama y adorar a Fidel. Allí en la
universidad no destaca y es otra alumna más de aprobados. sin pena ni gloria,
sin grandes suspensos ni grandes sobresalientes. Hace el examen de selectividad
y consigue ir a la Universidad a estudiar primero deporte (Porque es lo único
que la permiten)y después Filología castellana
en su Habana natal. Todo lo consigue gracias a un escritor amargado, de
veintypico años, autoproclamado como filósofo, y hacía quien Patria se siente
atraída.
Pero este
afiliado comunista, aunque escucha las arengas interminables de Fidel, en su
corazón es europeo, anticastrista y por tanto Traidor a la patria. Y por eso no
quiere hacer el amor con Patria, hasta que se cambie el nombre. Ella lee su
primera obra, unos poemas a una tal Yocandra, su primer amor. Esto al escritor
le parece mal (“Los grandes críticos de la Literatura Universal creerán que me
inspire en ti, zorra ladrona” Así que Patria se cambia el nombre por Yocandra. Y lo hace por amor.
Capitulo IV El Traidor
El escritor, el “filosofo”,
es traidor; traidor al amor adolescente de Zoe, a la causa comunista y a si
mismo al engañarse con que esta escribiendo la novela del siglo. Solo se ven por las noches. El escritor soborna
a los profesores para que Yocandra- Patria- Zoe pueda estudiar allí. Ella crece,
pasando por campos de trabajo, escuelas de campo y la Universidad Ciudad Libre.
Ha perdido su virginidad con un viejo, pues el escritor no quería destruir algo
tan puro como el himen de la protagonista. Su novio filósofo, aunque es guapo y
buen amante, es desconsiderado y machista. Siempre está asistiendo a mítines y
certámenes, conferencias y cenas de galas, ella mientras lee y le hace el
trabajo sucio; escribir sus artículos de prensa en el ordenador, y hacer todo
el trabajo de documentación...
El filósofo está
escribiendo una gran novela que nunca acaba ni enseña a nadie. Incluso tiene
paranoias esquinoides persecutorias de que Zoe es una espía del gobierno. Pero
como necesitan una mujer para un puesto de embajador, se casa en secreto con
ella. La pareja sigue casi sin verse, leyendo mucho y practicando sexo. A sus
padres les parece fatal este matrimonio, pero ya esta hecho. Yolanda y él se
casan.
Capitulo V La casa de las ex culturas
La autora hace fantásticos
juegos de palabras en la novela. Al padre de Patria le ascienden y heredan una
mansión de un escultor homosexual anticastrista, que ahora vive en Miami. A su
padre toda la mansión le parece una mariconada, llena de querubines y efebos
griegos. Le grita a su mujer que venda todo. Patria besa a una estatua de la
mansión. Es su primer beso. Todas esas obras de arte van desapareciendo, las
van vendiendo poco a poco, menos un cuadro que salva su madre, pues se enamora
de él. Su madre empieza a tener Alzheimer.
La cambian su nombre de Aida a La Ida, por su aire ausente. A estos juegos
de palabras me refería. La madre acaba enloqueciendo, de joven la obligaron a
casarse por intereses y no por amor. Y encima su hija se casa con un escritorucho
y su marido la pega. El abuelo de Patria aún vive, pero por poco tiempo, está jubilado,
ya solo hace manualidades infantiles. Aquella casa o la falta de trabajo o los
disgustos que les daba Patria les había vuelto a todos sus habitantes sombras
de si mismos. La casa estaba llena de espíritus, como en el realismo mágico y
ellos caían a la par que caía el espíritu de la Revolución, en mentiras y
hambre.
Capitulo VI La Gusana
En la Universidad
la protagonista conoce a la Gusana, su mejor amiga, que estudia Geografía y al
igual que todos odia Cuba, las tarjetas de racionamiento, la hipocresía, los
chivatazos, la corrupción... Ahora ella también deja su piso de solteras en el centro
de la Habana, porque se ha buscado un seboso español, que la paga todo. El
turista sexual las ha separado. El español
la compra, le promete dinero y una vida fácil en Europa, en Madrid. Las amigas siguen escribiéndose por carta; Yocandra
fantasea con su carrera literaria, sueño imposible en Cuba, y relata la
monotonía nadina de su vecina Hernia a la que una inundación arrastró sus
muebles, su colchón y todo. No la indemnizan y la quieren desahuciar. En sus
desayunos ambas miran el mar y lo huelen y adoran a sus dioses personales. La
Gusana la desengaña de Madrid a su amiga, por carta. Los españoles guardan
tesoros de Cuba como motines de guerra. Los racistas les tratan de escoria a
los cubanos. Muchas cubanas no han tenido su suerte y se prostituyen. Ella
prostituye sus sentimientos con el obeso viejo que la mantiene. Le gustaría echar caza a uno de eso adolescentes,
de boquitas de fresa y ojos oscuros, a los que llama “blanca nieves” pero la
mayoría son homosexuales. Su marido la pega y ella recuerda al Lince, un
antiguo amigo- amante.
Capitulo VII El Lince
Al Lince lo
conocieron en la Universidad. Era un hombre al que la suerte había sonreído.
Trabajó con Yocandra en una casa de cultura, y se había enrollado con Zoe y con
la Gusana. En la Habana no se pueden rodar películas (se ruedan en Miami películas
de exiliados) Hay censura en la escritura y no se puede vivir de la pintura. Un
japonés multimillonario se enamora de un cuadro. Un cubano gana un certamen
artístico y se hace de oro, y compra una lujosa mansión. La Gusana se casa con
el españolito obeso y rico que resulta no serlo. No era rico. la había mentido.
Al lince le expropian la mansión. Le encarcelan y torturan, van a matarlo, pero
le salva el japonés. El japonés salva al pintor porque es el autor del cuadro
del que está enamorado. El Lince duda que hacer, pero al fin, se decide a
viajar en un bote de la mafia y cruzar el océano hasta Miami. Desde allí escribe
a la Gusana y telefonea a Yocandra.
Yocandra y él se tiran un buen rato hablando por teléfono, dándose
esperanzas. Yocandra empieza a querer irse. Esta noche ha quedado con su amante
El Nihilista. Está casada con el filósofo, con el traidor, pero ama en secreto
al nihilista.
Capitulo VIII Las noches del Nihilista
“Parece que los
capítulos 8 de la literatura cubana están condenados a ser pornos” Dirán los
críticos, que no diferencian erótico de pornográfico, refiriéndose a la novela
de Lezama y a la censura. Al Nihilista lo conoció gracias al Lince, pintor y
cineasta, ambos acudían junto a la Susana y ella a ver los primeros videos que
llegaban a cuba; Taxi Driver, Ganma… eran películas americanas o europeas
prohibidas en la isla que se veían a escondidas, clandestinamente. Todos sus
amantes y amigos han ido dejándola sola. Ella también tendrá que irse algún día
de la opresora Cuba. De momento saborea el mar que observa mientras se toma un
café. El nihilista es tierno, intelectual, suave, delicado, romántico, pero
desengañado de todo.
Capitulo IX Yo que lo tenía en un altar
Hay una escena de
maltrato de género. Se oye protestar a una vieja, gritar mientras la pegan, porque
la vieja recordó a un ex novio. Patria también quiere volver a casarse. Su marido
el filósofo y ella no se llevan bien. Él habla de tener una niña, y ella no
quiere hijos. Por eso se ha buscado de amante al Nihilista. En medio del acto
sexual con el Nihilista, aparece un celoso, borracho y patético marido. El
Traidor no se sorprende de esta infidelidad que ya se imaginaba. Oye por
primera vez su mote en boca del Nihilista. El nihilista le llama Traidor al “filosofo”.
Y el Traidor le llama Nihilista al nihilista. Parecen gallitos de pelea disputándose el
trofeo de Yocandra. Yocandra vuelve del cuarto de baño y le suelta una arenga; “eres
un traidor a la patria, a nuestro amor y a tí mismo”
Yocandra se mete
en su ordenador y descubre la novela de su marido, la que llevaba años
escribiendo. Su famosa novela no son más que las palabras “No puedo escribir.
Me persiguen” repetidas paranoicamente. Su marido es un paranoico trastornado. Relatan
cual es el origen del mote del traidor y del nihilista. Ambos ignoran a
Yocandra y se ponen a jugar al ajedrez como combatientes. El trofeo es
Yocandra. El ganador recibirá un beso suyo. Ella cree que sus dos amantes no
valen nada. se siente ninguneada por ellos. Ni uno ni otro, prefiere quedarse
sola. Mira su mar, el estrecho que cruzó el arquitecto, el Lince, la propia Gusana.
Se pregunta si debe irse, mientras toma su café. No sabe porque, pero rompe a
llorar. La novela refleja la angustia y opresión de un lugar donde uno nace y
muere in moverse del barrio ni de condición social. Frente al nacionalismo
cubano, en la otra parte de la balanza esta su necesidad de huir... Llora
Yocandra y la consuela el Nihilista, hasta que ambos se quedan dormidos. Ella está
ahora escribiendo esta historia en una terraza de París. El tiempo pone todo en
su lugar y el tiempo y la distancia han sido los que han guiado su escritura. Necesitaba
tomar distancia, mar por medio, para tomar cuentas de su propio pasado.
Capitulo I Morir por la patria es vivir
El resumen de
toda esta historia está ya dispuesto en la primera página del libro tras el
prologo. Zoe o Patria o Yocandra está en el purgatorio. Ha venido de una
isla(Cuba) que prometió el paraíso y concedió el infierno. Hay un problem; Su
alma es pura, pero ha cometido algún pecado que otro en su vida. Al 50% está el
pecado y la virtud. San Pedro no saben a dónde llevarla. La moraleja de esta
novela es que la moralidad es relativa según donde vivas. El último y transgresor
capitulo es muy comprometido. Dios con la voz de Fidel Castro, repasa su vida. ¿he
sido buena o mala? ¿Por qué nadar en la Nada? ¿Para ahogarse?
Después de esta
novela Zoe Valdés escribió su secuela, El Todo cotidiano. Una novela que nos
habla de la política cubana, sí, y de su cultura, pero también del nihilismo,
de la insoportable levedad del ser, del día a día, la cotidianidad, del dios de
las pequeñas cosas. De nada, en definitiva. De la Nada.
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