ORTEGA Y GASSET
ortega
y gasset
es un filósofo en la plaza pública, profesor de metafísica en la universidad.
En Madrid funda con Julián marías los estudios
humanísticos. Es el fundador de lo que se llamó la escuela de Madrid; Julián
Marías, María Zambrano… y después Aranguren, Tierno Galván, Valverde, García
Calvo, Eugenio Trías…es hijo de un periodista que trabajaba en el periódico el
sol. Ortega es el fundador de la revista de Occidente, revista de artes y
cultura. Todos lo conocemos porque consiguió el premio nobel con la rebelión de
las masas en 1930. En esta obra Ortega está ocupado (y no preocupado) en el
advenimiento de la masa a la cultura que hasta ahora solo había pertenecido a
la aristocracia. Diferencia entre el individuo que tiene ideas y la masa que
vive en las creencias, en los ideales. Era la época en que se había extendido
el comunismo (revolución bolchevique rusa) y el fascismo. El socialismo, el
anarquismo, el republicanismo, los movimientos sociales…se enfrentaban al
liberalismo de la burguesía y el monarquismo de la clase noble. Ortega escribió
otras como el espectador, que es la filosofía, la España invertebrada, la
misión de las universidades (donde habla de las universidades y la residencia
de estudiantes en la que dio muchas conferencias. Esta había sido fundada por
Giner de los Ríos y los krausistas, ideología que Ortega compartía) También es
el autor de la deshumanización del arte en 1925, obra en la que estudia el arte
moderno, de la generación del 98 y sobretodo de la del 27. El arte de nuestra
época es un arte deshumanizado, que denuncia la alienación del ser humano y su
cosificación, su conversión en objeto. El dadaísmo criticaba la guerra y la
cultura anterior, un anti arte. El futurismo era un movimiento violento,
urbanita, que reclamaba la velocidad y el progresismo. El arte abstracto
abandonaba lo figurativo y en él las formas están deshumanizadas, son colores,
manchas.. el cubismo reduce al hombre a formas geométricas, cubicas, cilíndricas…
el arte antes era mimesis, copia de la realidad. La pintura copiaba al modelo y
debía ser representación fidedigna y figurativa de la realidad. Ese arte
figurativo se hace abstracto, deshumanizado. La poesía se vuelve hermética, cultista, meta poética,
difícil de entender. Todo esto es la deshumanización del arte. Muchos de los libros de Ortega salieron en la colección
austral de la editorial calpe Espasa. Ortega era un liberal, un liberal político
y económico. Para él el capitalismo es el sistema que garantiza la democracia,
pero también simpatiza con el socialismo. Además, era republicano. Era progresista.
También era centralista frente a Baroja y Unamuno que eran nacionalistas
vascos. Unamuno pretendía españolizar Europa y Ortega europeizar España. Para ortega
la modernidad está en Francia, Inglaterra y Alemania. Ortega vivió mucho tiempo
en Alemania donde estudia el idealismo alemán y el romanticismo filosófico. Lee
a Fitse, a Goethe, a kinkegaard, Schopenhauer y Nietzsche. Su filosofía intenta
suavizar a Nietzsche. Ortega no es ateo como Nietzsche, sino que es agnóstico. A
Dios no se le puede conocer, forma parte del misterio y de lo que Kant llamó el
noúmeno. En la época Unamuno dedica su vida al estudio de la escolástica medieval,
a leer a los padres de la iglesia, intenta llegar a Dios a través del estudio
erudito y lo intelectual hasta que se da cuenta de que Dios es una cuestión
emocional. Unamuno no cree pero quiere creer. Si Dios no existe habría que inventarlo,
como diría Voltaire. Otro poeta que dedica la primera parte de su poesía a
hablar con Dios es Blas de Otero. Le hace preguntas en sus versos y Dios no
contesta. Todo esto sigue la tradición mística de San Juan de la Cruz, Fray
Luis de León, Santa Teresa de Ávila e Inés de la Cruz, entre otros. Ortega
llega a decir que estos místicos escriben una poesía sensual, casi erótica;
Dios me penetra, me deja balbuciendo… Otro libro interesante de Ortega es sus
estudios sobre el amor. En él analiza lo que se ha entendido por amor en cada
época. Hay un amor uránico, el de Calixto y Melibea, el amor romántico, platónico
e ideal. Frente a ese amor está el amor pandémico, el sexual, propio de la
Celestina. Diferencia entre amor idealista uránico apolíneo y materialista
dionisiaco. Analiza los filósofos griegos, la época de la clerecía (románico,
san Agustín, mester de clerecía) y de la cortecia (gótico, santo tomas de Aquino,
mester de juglaría) Además estudia el amor para los ilustrados, en el barroco,
el amor de Sthendal… frente al amor romántico a la idea de amor, el amor loco,
él revindica el amor de los realistas, mas sosegado y calmado. El amor es una obsesión, una fijación en
alguien y habla del flechazo y del amor a primera vista. Ortega estaba en
contra de Primo de Rivera que llega al poder en el 22. Pertenece a la
generación del 98, como los llamó Azorín. En el 98 con la perdida de las
colonias (cuba Filipinas) y la crisis de Marrueco se empieza a ver a España
como un país decadente y atrasado, nada que ver con el imperio de Carlos V
donde no se ponía el sol. Es una generación desencantada y muy crítica. El caso
de España lo llamaban el problema de España. Estos filósofos se expresan en periódicos,
en artículos filosóficos y columnas en periódicos. Así surgen debates entre
Unamuno, Eugenio Dors, Maeztu, Ortega…son los años 20, la way of live
americana, los tiempos modernos como la película de Chaplin. Es una generación
polemista que se expresa en el ensayo, el artículo, la novela y el teatro y
apenas en la poesía. Estaban surgiendo nuevos medios de comunicación, el teléfono,
la radio, el cine, la fotografía…la población vivía en ciudades, era burguesa
del burgo, y surge la masa de obreros industriales. Ortega también estuvo en EEUU donde hizo
amistad con el presidente Roselvet. Ortega vivió entre las dos guerras
mundiales y consideraba el fascismo un movimiento de masas. tomó la figura del
quijote para varios de sus ensayos. Retrató los paisajes de España en obras
como paisajes. Fue el gran maestro. Su alumna más avanzada era María Zambrano. A
la razón vital de Ortega Zambrano la llamó razón poética. Ortega va más allá de
la crítica de la razón pura de Kant; el propone una razón vital, intuitiva, que
sirva para vivir. Inspira también a los surrealistas, a la generación del 27
que se saca su famosa foto en un homenaje a Góngora. Esta generación seguía el
culteranismo de Góngora. Ortega estuvo exiliado a cuenta de ser republicano. En
el extranjero escribió muchas meditaciones. Escribió en 1939 ensimismamiento y alteración. Con la
guerra civil tuvo que exiliarse. Era contrario a todos los fascismo, pero
también al comunismo. Rechaza el positivismo, el utilitarismo, el comtismo y el
pensamiento tecno científico. Esto no significa que reniegue de la historia de
la ciencia (Galileo, Leibniz, Descartes). Lee a Spinoza. Es un hombre racional,
pero reconoce que no solo somos consciente sino también inconsciente. No solo
hay que estar en el mundo, hay que intentar bien estar y ser. No solo hay que
vivir sino existir. No estar preocupado sino ocupado. Lo trascendente no puede
olvidar lo inmanente. El hombre está desorientado, navega por un mar de dudas e
incertidumbre. La masa vive en el instinto, en sus necesidades biológicas y
carencias, pero el hombre individual da un paso más y se auto realiza. Estamos condenado
a ser libres. El hombre ejerce su voluntad (su voluntad de poder) Unamuno decía
que también tenemos noluntad, capacidad de decir no, y negarnos a hacer. la
naturaleza nos ofrece lo básico, pero debemos construir una cultura, civilización,
un pacto social. Y esto es la republica. El hombre es un Yo, pero atado a sus
circunstancias. El hombre es un cuerpo, es materia, pero se ensimisma para
inventar. La filosofía es el mimo invento que la teología o el arte o la
poesía. Ortega, como Nietzsche, se expresa en prosa poética y no en sistema
como Hegel o Kant. La técnica es la adaptación del medio al sujeto, un movimiento
en dirección inversa a lo biológico. El hombre necesita hacerse en sociedad, progresar.
Un hombre sin técnica no es hombre. Puede estar pero sin bienestar. Ortega es
padre de la democracia como la entendemos ahora. El primitivo satisface sus
necesidades con el mínimo esfuerzo, pero empieza a producir objetos no
naturales y así va construyendo una vida mejor. El hombre se hace así mismo (en
esto es muy sartriano), construye su vida, se auto fabrica. Cuando es el
sistema el que nos fabrica; malo. El hombre es noble pero no por nacimiento o
cuna como los aristócratas sino por voluntad propia. El hombre se hace noble
por su meritocracia, por sus méritos. Entiende por noble una nobleza moral, del
guerrero o atleta o súper hombre de Nietzsche. El individuo ciudadano debe ser
fuerte, noble, leal. Y en esto nos habla de la honestidad y nobleza del
intelectual. El estado ideal es la aristocracia meritocracia, que gobiernen los
más listos como en la Republica de Platón o en la II república española. Todas las
culturas tienen su nobleza; el Bodhisatva indio o el lord gentleman inglés.
Inteligencia, memoria, imaginación son facultades que ha de tener este hombre
nuevo. La vida se rige por el azar y no tiene más sentido que el que le damos.
Dios es un invento, como la cultura o la civilización, pero un invento
necesario. El prehistórico guerrero y salvaje reforma la naturaleza según sus
deseos. No se queda en el estado caótico de la naturaleza. Trasciende su
voluntad de poder. Deja de comportarse como animal meramente instintivo. Hace el
fuego, aprende a nadar, a andar sobre sus dos piernas, a golpear. Y también
crea una religión, porque es un ser trascendente y envuelve todo en un halo
mágico. Necesita enterrar a sus muertos y creer en algo. La naturaleza está
llena de misterios que la ciencia no puede analizar todos. Ese hombre va
creando instrumentos y maquinas, pero en la época actual esos instrumentos
tienen más poder que sus inventores. Y ese es el peligro. El utensilio, el
ordenador, la Tablet, el móvil, la mesa de producción y mecanizado suplantan al
hombre. Sustituimos a Dios y a la diosa razón por el dios dinero o tecnología. En
este sentido Ortega está en contra de la tecnología pero no por ser tecnología sino
porque suplanta al hombre. La máquina nunca puede sustituir al hombre que es el
que la dirige. Por eso Ortega critica a los nuevos barbaros que son los
ingenieros; saben de lo que se han formado pero no tienen cultura. El ideal de
hombre para Ortega es el príncipe del renacimiento, un hombre formado y erudito.
El diletante renacentista sabe un poco de todo. (y de nada en profundidad) El príncipe
del renacimiento es un noble de la espada pero también del báculo, de armas y
letras. Nada que ver con el noble absentista de la edad media que era
analfabeto y solo servía para la guerra. Ortega denuncia que los barbaros van a
destruir nuestra civilización entendiendo por barbaros las masas analfabetas. Estos
barbaros entraran a Europa como en la caída del imperio romano. De hecho Ortega
basa su rebelión de las masas en la obra la decadencia de Occidente de
Splenger. Ortega analiza el tema del
nacionalismo. Está en contra de él. Habla de individualismo, romanticismo, de
feminismo, de las modas… el peligro es que el objeto (Dios, la realidad, el
sistema, la tecnología) sustituya al sujeto, al individuo. Por eso no está en
contra de la ciencia (que es un análisis racionalista y empírico- experimental de
la realidad) pero sí lo está de una física que olvide la metafísica, de una tecnología
que olvide lo cultural, artístico.
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