La
generación Kronen nace de otras generaciones como fue la de la movida
madrileña, la Gauche divina en Barcelona y el rock radical en el país vasco.
Han pasado a la historia como los escritores más jóvenes de la Historia. Todos eran
pequeños Rimbaud-s en potencia. Muchos de ellos escribieron novela negra,
feminista y novela erótica. Eran los temas que importaban a una juventud que
estaba virando de ser progresista y querer cambiar el mundo a hacerse
sedentaria y acomodicia. Todos cogerán sus influencias más del cine y la música
y de la propia vida que de la tradición literaria. Parece que esta generación
no tiene en cuenta las anteriores, sino que parte de 0 y escribe como si no
hubiera habido un antes. Las editoriales promocionaron con fuerza a esta
generación, pues sus autores no eran caros. Además, podían fomentar los
aspectos extraliterarios tales como presentaciones de libros, conferencias,
firmas de libros… por primera vez en la historia de la literatura se imponía el
márquetin y el estudio de mercado. Sus narradores eran jóvenes, guapos,
sociables, buenos comunicadores y quedaban bien en las solapas de los libros y
en la promoción de sus obras. Los
críticos les odiaban, pero a diferencia de los poetas malditos, el gran público
acogió sus novelas. Se consideró la juventud en sí misma un valor literario. Y esto
llevó a una decadencia en la cual se atribuían novelas incluso a adolescentes
de 15 años. Detrás había “negros” e intereses comerciales, pero a estos niños-jóvenes
les atribuían esas novelas juveniles escritas por jóvenes. Escritores
consagrados como Arturo Pérez Reverte criticaron a estos jóvenes que relatan lo
contentos que estaban de haberse conocido a sí mismos. Criticaba que relatasen
las apasionantes vivencias de tomarse una caña con los colegas, o hacerse una
paja. En aquel contexto de fiebre juvenil, incluso se fichó una autora de 14
años, Violeta Hernando, que escribía buenas redacciones (?)en el colegio. ¿Qué
ha sido de estos escritores? La versión cinematográfica de Historias del
Kronen, junto a Montxo Armendáriz funciono gracias al boca a boca. El País nombró
a Mañas mejor escritor del año. El escritor no volvería a vender tantos
ejemplares de una novela, y desde entonces ha
oscilado entre la necesidad de demostrar que es un escritor serio (con la
experimental Soy un escritor frustrado) y la de repetir un éxito comercial
usando ingredientes de Historias del Kronen (Mensaka, que también ha sido
adaptada al cine o Ciudad rayada).
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