José María Valverde era un
Intelectual con un gran compromiso con el conocimiento y lo social. En este
hombre hay una amalgama de disciplinas y humanidades de todos los campos. En
todos ellos hay interés por el humanismo, el hombre, en mayúsculas. También hay
un compromiso con lo social, la estética, la ética (¡no hay estética sin ética!).
Ver sus libros de traducción, introducción y notas era una garantía de buena literatura.
Interpretaba la realidad para que el receptor lector sacara sus propias conclusiones
para la vida. Si no tiene ese componente social y vital la literatura no sirve
para nada. No es consumo ni espectáculo la literatura para este autor. Guy Debord,
llamó a nuestra época la sociedad del espectáculo, como Umberto eco. No se
profundiza prácticamente en nada. Un espectáculo es la política, el deporte y
hasta la literatura. Este hombre es antítesis de eso. La literatura es
prolongación del hombre y sus sentires. Como plasmar esos sentires se pregunta;
traduciendo a los grandes autores. Desmenuza la sociedad al describir y
reinterpretar esos textos y narrativas. El tema del humanismo está muy presente
y lo trata como debe tratarse. Él hizo ensayo; la vida y muerte de las ideas
(el que he leído) que es su obra más conocida y también la Antología de la
estética. Tiene varios poemarios como Poesía,
ser de palabra o el Hombre y dios. Lo englobamos en la generación de los años
50; Juan García hortelano (tormenta de verano, gramática parda), Caballero
Bonald, Costafreda, José Agustín Goytisolo (el que suicido, el de palabras para
julia)… y los poetas catalanes como Gimferrer, Luis Antonio de Villena, Terenci
Moix, Montalbán, Gil de Biedma…los novísimos.
Gabriel Ferrater era un poeta de la
generación de Valverde (no confundir con Ferrater y mora, el filósofo) Vivió la
Barcelona de aquellos años, los pasados 70 y 80, y se suicidó… Hortelano
escribió la gramática parda, tormenta de verano… refleja la cultura de la
calle. Hace una cosa popular costumbrista. Todos estos autores reflejan lo que
es la vida en lo social en el tiempo histórico del tardofranquismo. En los años
60 parecía que eso iba a terminar, a todos ellos les toca por edad. Tienen 40 o
50 años en esa época (famoso verso; todos teníamos 20 años en esa época). Han
nacido en los años 20. Son los autores que hacen la Transición en esto de la
historia. Todos tienen un gran compromiso intelectual, activista, social. En
esa generación de los 70 escribía el poeta Gimferrer, o Gil de Biedma (que la
vida iba en serio lo descubrí demasiado tarde es una parte de un poema, sus
primeros versos)
Valverde era profesor de estética
y filosofía en la universidad de Barcelona. Se subía a la mesa de clase, veía a
los alumnos. “Aquí estoy otra vez aburriendo esta gente entre el ser, el no
ser, la nada y el no-sé-qué. Ya termina la clase, se liberan de mi. Y yo vuelvo
a la soledad con de mis papeles”. En él hay una búsqueda siempre, un trabajo
con el lenguaje. Es el compromiso del hombre digno que reinterpreta el lenguaje
y le da nuevos registros al lenguaje. Era catedrático de estética en Barcelona.
Es el autor del famoso libro de historia
de literatura José maria Valverde y Martin de Riquer. Es tan clásico este
libro que lo hemos estudiado en todos los colegios y bachilleres. El libro es
un análisis de lo que es la literatura; Vida, compromiso, estética y ética. La
literatura es todo menos espectáculo y mero entretenimiento. Apela al
sentimiento humano más arriesgado. Hace de intermediado de esa transmisión.
Estos filósofos progresistas (progres) y aperturistas hacen de canal entre los
partidos socialistas comunistas que empezaban a surgir y el movimiento social,
estudiantil, los movimientos obreros…son aperturistas porque el franquismo se
va abriendo, dulcificando, suavizando y aniquilándose así mismo. Son filósofos
no de la oposición violenta (aunque algunos fueran hombres de acción, manifiesto,
huelga y puño en alto) sino del dialogo. Se intenta dialogar con el último
franquismo sobre todo a través de la iglesia. La iglesia hace de una madre poli
bueno que dialoga con el padre franquismo para suavizar el castigo de su hijo
díscolo y rebelde; el pueblo enfadado. El objetivo de Valverde es ese cambio y
esa revolución, pero también el cambio individual, vital. Ahora sabemos que
toda revolución y cambio empieza por cambiarse primero a uno mismo. El receptor
se da cuenta de que esa narrativa le ayuda a vivir.
Valverde hizo una traducción
clásica del Ulises de Joyce y la Introducción de movy dick de Melville (que
hemos tratado en entre líneas) y de clásicos franceses. Estos filósofos
marxistas cristianos suponían la apertura en tiempos de mucho oscurantismo. La
literatura era una forma de rebelión, pues enseña cómo piensan otras culturas,
otras gentes. En la dictadura esto se quiere que desaparezca, ¿para qué pensar
sentir.? Los líderes ya te enseñan a vivir y ya está. Estos hombres son la resistencia,
el dique de contención ante los totalitarismos. En ese estadio (estadio como estamento
o lugar de la balda donde podemos encontrar lo que estás buscando), y en ese
espacio de ubicación es donde colocamos al filósofo. Es un punto de referencia
para los escritores que protestan contra el régimen. Es famosa la frase; no hay
estética sin ética. La pronunció cuando el régimen fascista echó a Tierno Galván,
Aranguren y García calvo de sus cátedras en la complutense. A el no le toca
esta expulsión, pero se siente solidario con ellos aunque este en Barcelona. “No
hay estética sin ética”, dice, “Si a ellos les echa me voy yo”. Se fue a EE.UU.
Aranguren decía que en California y en las universidades era donde más feliz
había sido. No podían haber estado en mejor lugar y tiempo; los movimientos
estudiantiles hipyes contra la guerra de Vietnam o la segregación racista.
García Calvo fue a Francia, a aquel país de la bohemia y el amor, del parís es
una fiesta y ciudad que desde el exilio seguía en contacto con España y su
resistencia. Aquel París de Mayo del 68 impresionaría a García Calvo. Tierno Galván
fue a Alemania exiliado antes de ser alcalde de Madrid. Y Valverde fue también a EE.UU., y allí le abren
las puertas de las mejores universidades del momento y da sus clases, entre lo
mas selecto del alumnado y profesorado. En año 77, en plena transición, les
devuelven sus cátedras, son los años últimos. Se les reparó todo daño
ocasionado. Era una injusticia quitarles la catedra y se la dieron de nuevo. Se
procuró la reparación del daño causado.
Su filosofía se podría definir
como cristiano marxista revolucionaria. Hay importancia de lo divino, de lo
trascendente platónico, pero también de lo real, aristotélico, de las cosas y
la materia (materialismo dialectico) Conjuga la revolución con el cristianismo.
Tenía mucha conexión intelectual con Ernesto cardenal, autor del canto cósmico que
ya dimos. También tuvo la amistad e influencia del pensador Alfonso Carlos Comin,
también cristiano marxista. Actualmente nadie se llama así pero en aquella
época era normal denominarse así. En esos años del tardofranquismo se llamaban
católicos y comunistas o socialistas a la vez; por ejemplo, el padre Llano, o el jesuita José María Díaz Alegría.
Compaginaban marxismo y cristianismo. Valverde es ejemplo de ese dialogo, de
esa vinculación del cristianismo con los marxistas. Los curas obreros surgen en
esa época. Aranguren era jesuita o de un cristianismo reformador, era de esa
línea católico progresista. Es la línea de avanzada y avanzadilla de lo que era
la fe en una sociedad muy cerrada. Se imposibilitaba la reflexión más allá de
lo permitido. Con el cristianismo se pretendía un dialogo con el franquismo,
tan católico apostólico romano. Fue un vanguardista en sus concepciones. Su poesía
va en esos derroteros de una trasformación de lo social y una fe distinta a la mojigata.
Se mezclaba la figura de Cristo y de Marx. Aranguren tuvo un hijo subnormal que
fallece en los años de la transición. En una entrevista de a fondo Joaquín
soler Serrano le pregunta por el dolor y la pérdida. Este niño fue muy aceptado
y bien tratado en la casa. Murió en el 77, en los primeros años de la transición.
Lo vivieron con un dolor muy fuerte, su vida cambió con todo esto, la presencia
del niño le daba la vida al pensador Aranguren. Era un niño muy pulcro, y él
era pulcro y liberal con sus hijos. Está en sus escritos siempre la presencia
de ese niño con síndrome de mongolismo. Se lo menciona a Serrano, aquel hombre
que hacia entrevistas y que murió en una residencia hace varios años. El humorista
Pedro Ruiz le tenía cierto afecto y le iba a visitar. Serrano entrevistó
durante dos horas a Cortázar, hizo programas dobles con Borges y Dali. Se
reunió con las mejores figuras del mundo de las letras y el pensamiento. Todos pasaban
por aquel programa. En blanco y negro. Lo daban todos los viernes; Pla,
Aranguren, Octavio paz… Ernesto Sábato... era un programa muy serio pero que
también interesaba y entretenía.
En la transición la filosofía
dominante era el materialismo marxista y el idealismo cristiano trascendental
espiritual. Pániker dice que eso ya estaba superado. Un intelectual se definía
como materialista absoluto, pero todos somos materialistas y espiritualistas a
la vez. No se puede separar. La entrevista a Pániker durante 5 minutos está en
silencio, la última parte no se oye nada (no sabemos si al fin ha conseguido Pániker
el silencio buscado). Este dialogo cristiano marxista se daba en las nuevas editoriales,
revistas como cuadernos para el dialogo, o los nuevos periódicos que salían
como el País y el Mundo. Escribían en sitios progresistas. Una serie de
personalidades defendían este tipo de unión paulatina, acuerdo pacífico entre
vencedores y vencidos. Estos filósofos progresistas parten de esa cultura, de
ese conocimiento. Hay un dialogo consustancial en José María Valverde, Alfonso Carlos
Comin, el padre José María de llano, José María Díaz alegría, Roger Gadauri en
Francia (los gadauri)…
José Bergamín 1897 1983 (murió en
las inundaciones de Bilbao, donde acabó todo destrozado; el Arriaga, el casco
viejo roto, no quedó nada, la plaza… todo arrasado.) Muere en agosto de ese año
con las inundaciones de Bilbao (así que
vivió 80 años). En la generación del 27 tenía
30 años. Es famosa su consigna; “con los comunistas hasta ña muerte, pero ni un
paso más” YA no va con ellos al morir, el siguiente paso lo da con lo divino.
Pero ya ni un paso más con ellos. Uno es marxista hasta que vea las orejas a
Dios. Te vas con Dios al final. Bergamín pronunciaba frases muy bonitas. Eran
una especie de greguerías de filosofía impresionante. Carlos Gurmendez contaba
una anécdota; Bergamín llega al aeropuerto de Buenos Aires y todas las autoridades
están avisadas de que llega un comunista. Le paran en la entrada. ¿Es usted
comunista? No tengo valor, responde él. Es tan serio- serlo que ¿cómo voy a ser
comunista? Tenía ese tipo de frases picaronas, el pícaro usa el lenguaje con la
gramática parda. El premio nobel de literatura José Etxegaray no se llevaba bien
con Bergamín. (Etxegaray dice de Bergamín; ¿cuándo escribe este hombre si
siempre está en los cafés? Bergamín le excuso diciendo; Es que Etxegaray tiene
muy mal café) Tener mal café es no sabe digerir bien las cosas. Esta siempre
enfadado Etxegaray. Asus aforismos los publicó en el libro el cohete y la
estrella, primer libro de aforismos en el 23. .
García calvo era un hombre de más
acción, revolucionario. Valverde era un hombre más de reflexión y moderado,
pero tenía solidaridad con la gente de Nicaragua, fue presidente de una ONG,
ayudó a Nicaragua, ayudó a Cuba, defendía los derechos humanos, amnistía
internacional…. Tenía un compromiso con la historia desde los más débiles, y la
gente que sufría necesidades, no con la burguesía. Estaba comprometido con la
izquierda progre en su doble condición de cristiano y marxista.
Ahora están más separados
comunistas y marxistas. Ahora ser católico es algo más retro retrogrado,
conservador, reaccionario. Pero en la época ser católico y marxista era una avanzadilla
en compromiso social, en el día a día, decir no al Franco. Ahora hay más
ateísmo de izquierdas. La militancia de la Gauche Divine catalana tiene un
alejamiento claro del componente teologal de la vida. Pero los filósofos católico
marxistas daban un sentido a la realidad con su cristianismo progresista. No
era cosa retrograda. La Fundación de cristianos por el socialismo se funda en
el 72, en pleno régimen franquista. Era la avanzadilla ideológica e
intelectual. Hoy día los símbolos se hacen de otro tipo de cosas, de otras
simbologías. Los libros que se publicaban seguían esta línea política y filosófica.
Se trata de reformar la religión para el aperturismo. La religión es
vanguardia, no es el opio del pueblo como para Marx. Alfonso Carlos Comin decía
que había cristianos en el partido, y comunistas en la iglesia. Lo dice todo con
esa ideología, ese compromiso. Entre mucha gente de la derecha se usa el término
despectivo de los curas o los curitas a todos los que se quejan de la sociedad.
Parece que la izquierda tiene fama de utópica, de hablar sobre ideales cuando
la derecha habla de realidades. Por eso se considera al activista socialista o
comunista como un cura que lanza sermones y predica a la sociedad. Se le
insulta de esta forma porque consideran que no habla de realidades sino de entelequias
como la religión. Y esto es porque la derecha no suele ser ética, moral, no
tiene auto conciencia ni un pepito grillo que les haga cambiar su actuación. El
protagonismo de la iglesia como reformador del régimen es esa metáfora de la
Madre iglesia intercediendo entre el hijo díscolo y el padre autoritario.
Valverde escribe desde su credo
marxista, de las ideas de nuestro mundo, de la estética, el arte… su Historia
de filosofía nada tiene que ver con la de Hegel, ni en su forma ni en su fondo.
La única relación que veo entre estas dos obras es la pretensión de hacer
compendio histórico de todas las ideologías y que Hegel fue el padre del
marxismo. Hegel fue maestro de Marx y Engels y de los socialistas. Pero la
prosa de Valverde carece del lenguaje plúmbeo de Hegel. Valverde nos propone un
viaje por la filosofía, desde los presocráticos hasta la postmodernidad. Contempla
todos los movimientos filosóficos y todas las ideologías, pero enfatizando las filosofías
de la sospecha, las filosofías del socialismo utópico, de los antecedentes del
marxismo y de las filosofías igualitarias y libertarias. Podía haber enfatizado a la escolástica medieval
y padres de la iglesia como hace Unamuno en el sentimiento trágico de la vida,
pero pone el acento en las ideologías de protesta. Y en esto comparte tema con Salvador
Giner y su archi famosa historia del pensamiento social. (no político) de José María
Valverde hay un video bonito en que habla de Ernesto cardenal, tenían relación y
compartían filosofía marxista. Ernesto cardenal recita ese poema; tú y yo hemos
roto, pero tú has perdido más ueq yo porque nadie te querrá como yo. En esta
ruptura la que más pierdes eres tu. Tu podrás querer a otro pero nadie te querrá
como yo te quise. Ernesto Cardenal fue el autor del canto cósmico que inspiró a
Valverde. El Creo señor firmemente de Carlos Mejia Godoy y la Gilipaguna, o la
llamada misa campesina, nos da idea de la misión del cristianismo en solidaridad
con Nicaragua, cuba y otros países subdesarrollados que se estaban
descolonizando. Hay que resaltar las misiones que la iglesia hacía y hace en
estos territorios. Si bien debemos sustituir el termino caridad o colonizador
por el de solidaridad. El Canto cósmico
de Cardenal (del que ya hemos hablado en entre líneas) es un libro de poesía, de
historia metafísica biología ciencia… José María Valverde dijo; estoy sobrecogido
de lo maravilloso que es este libro. Frente a las inmundicias que leo en estos
tiempos que me tocan, ver este libro es algo excelso. El libro contempla la Metafísica,
teología, física, química, historia… lo mismo habla de la revolución sandinista
que de los átomos o el comienzo del big bang… es un libro no divulgativo ni
para las grandes masas y también un poco complicado. En líneas generales si es
complicado. Es un verso libre. Usa todos los campos del saber. Habla de ondas
gravitatorias, habla usando vocablos de la tribu de Guatemala, habla de Guañamú,
la mente rotativa que gira y gira, habla de los átomos millonésimos… habla de
la física con una gran poética. Es además un canto de amor impresionante. Tiene
ese afán de Aristóteles o Tomas de Aquino de dividir la naturaleza en partes;
ves un todo, te fijas más y ves las distintas partes que forman ese todo… te
das cuenta de que todo es un compendio… y eso nos acaba llevando a la metafísica,
y al logos como conocimiento del fenómeno físico pero también del nóumeno. Esto
es lo que nos ofrece Valverde; una historia de las ideologías maristas pero sin
abandonar la óptica católica. Unir el fusil con el evangelio, Jesús con Marx,
la pluma y la espada.
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