1820 1911 carolina Coronado Vivió
90 años a pesar de su mala salud. Fue
la tia de Gómez de la serna, autor de las greguerías. Nació en Almendralejo
como Espronceda. Fueron Liberales el padre y el abuelo y pasaron temporadas en
la cárcel. A los 3 años se van Badajoz capital de provincia pues el padre es nombrado diputado. Recibió
una educación de adorno para mujeres en la costura y bordados. Pero era una mujer
desde pequeña curiosa. Pertenece a una familia culta con biblioteca que devora
de niña. Tenía un complejo de inferioridad cultural por ser mujer. Su valedor de
Eugenio de arzendus autor de los amantes de Teruel , miembro y secretario de la
RAE. Hay correspondencia entre los dos. Le ayuda al recomendar obras a culturizarse.
Supone una apertura en la educación femenina. Arrancan en ese tiempo revistas
femeninas creadas por mujeres. Fernan caballero es el seudónimo de Cecilia
frandes que se ve obligada a usar para publicar. Carolina tuvo síntomas de Catalepsia,
parecer muerta sin estarlo. Siente lo
que ocurre alrededor. Por eso tuvo siempre un miedo gordo a ser enterrada en
vida. Cuando murió no la enterró el marido. Era una mujer pogre y revolucionaria. Amiga de la reina Isabel. Adalid
del liberalismo frente al carlismo absolutista. En la época de la Regente cristina liberal se hacían políticas
liberales en casa de Carolina, y muchos eran perseguidos, los Gobiernos
liberales seguían el absolutismo. Se casó con un secretario de la embajada de
EEUU en Madrid Horacio Pierre y se trasladan allí. Espronceda era mayor que
ella y su paisano, y leyó el poema de Carolina de pequeñita. Le escribió Espronceda
un poema a Carolina. Se establecen en Lisboa, y a Portugal los últimos años. El
negocio fue mal y se arruinaron. Hizo estudios ligeros, las ciencias del
bordado, no hay punto que no ofrezca enredo en la costura. En Almendralejo la población estaba
vergonzosamente atrasada. Los Hombres
decían de su obra que lo habrá copiado. Las mujeres tenían resentimientos y envidias. Fue una mujer sin educación ni nadie
que la enseñara a escribir. Seguro que copia, ¿de dónde lo ha sacado? En la sociedad
abolicionista de Madrid, aún hay esclavos en América. Coincide con Concepción Arenal,
en un poema sobre la abolición de la
esclavitud en Cuba. Tras la revolución del 68 se destapan los escándalos
y excentricidades. La sociedad no acepto
sus poemas al tratarse de una mujer. Un amante la facilita poder publicar en su
editorial e introduce su libro de poemas en 1843. Gertrudis y Coronado leen en
el liceo artístico literario de Madrid, meca de la literatura de la segunda
mitad del xix. Escribe 15 novelas, 4 poemarios y varias obras de teatro. En el
ambiente portugués la sijea y paquita son dos novelas históricas al gusto de la
época. Aborda la vida de dos mujeres. Luisa sijea humanista del renacimiento en
el 16 que vivió en la corte portuguesa. Y
paquita francisca humanista. Escribe la Rueda de la desgracia, con el tema de
la ruleta, la ludopatía, el juego de azar, (la novela de dostoyesky el jugador)
Ella no era jugadora. Tiene varias obras de teatro, el cuadro de la esperanza, una
obra artística de dos personajes femeninos helena y esperanza. Tiene una fijación
con el renacimiento italiano y con la amante y hermana de miguel Ángel. Escribe libros de viajes del paseo del tajo al rin, viajes por
Alemania Bélgica y suiza. Los Anales de la luz en el tajo. Escribe las vidas paralelas
de santa Teresa y Safo de Lesbos, genios gemelos. Safo y juana de la cruz eran
mujeres culturizadas con mucho conocimiento y saber. En la carta a arzenbus le
dice; no soy cultivada, con su falsa modestia, y le pide libros que la pueden
educar. Su semblanza tiene más que ver con la ficción que otra cosa.
Era una mujer alta y robusta como
una palmera, de mirada dulce y boca pequeña y cabeza erguida, maneras
elegantes, trato culto, le abren las puertas de la corte de Isabel y el liceo de
Madrid. Contemplaban a esa mujer con gracia de los extremeños, como hija del almendralejo,
los capitanes de colonias lusitanas. No comprendemos ya a los románticos. En 1851
surge el correo de la moda feminista dirigida por Angela grassu. Ella escribe semblanzas
de mujeres escritoras en el correo de moda y reportajes sobre escritores
franceses. Habla Carolina de Gertrudis
de Avellaneda y de mujeres españolas que escriben. “Que la mujer tenga corazón
varonil es una monstruosidad repugnante para todo el mundo y más despreciable
para los hombres a sus propios ojos”, escriben sobre ella. Había que ser
valiente para ser escritora en esa época. Las novelas se tomaban como distracción.
Las madres reprenden a las hijas de entregarse
a un ejercicio que a ellas les fue prohibido. Dejaban la calceta para leer
folletín o periódicos. Los liberales pogres con su voz pogre se escandalizan
incluso. En el museo de las familias colaboró Caballero Bonald, publicando en
el seminario pintoresco español. “Es necesario y útil en este siglo divulgar los
progresos intelectuales de un pueblo que tras la ansiedad se regenera
políticamente, con sus progresos. Así funciona la historia de las revoluciones,
el patrimonio cultural, el saber” El marido Tasara de Gertrudis se negó a ver a
su hija. Sobre esto tiene un poema Gabriela mistral.
Chispa
luz en el infinito, se fijan, absorben el pensamiento, no alcanzo cuanto más
medito. En la hoguera inamovible no giras, insondable espera. La luna es un globo
que majestuoso muere. La vista mortal toma
oscuro asiento. Se mueve tu carreta hacia lo inmenso, la creación sin descanso,
todo tiene movimiento y vida, sus confines tocan, millones de hermanas, limite
al sediento, avanza el pensamiento,
cuanto más medito menos te conozco.” En un poema de Zorrilla o de Espronceda
parecen intercambiables, no diferenciaría lo de uno de otro. El gusto poético nuestro es el romanticismo pero está
lleno de manierismo. Ha vuelto un regusto romántico por novelones como Entre costuras, palmeras nieve, el gusto
romántico se comercializa fácilmente. El romanticismo va de 1835 al 45 y hasta 1870
el romanticismo estará de capa caída pues surge el realismo. El gusto nuestro
actual tiene que ver más con la novela y menos con la poesía. Bécquer y Rosalía
nacían cuando el romanticismo había triunfado pero empezaron a escribir cuando ya había pasado de
moda
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