En los años 20 surgen muchos
escritores del provincialismo puritano. Los yanquis van a Europa y descubren en
París la tierra de los impresionistas y surrealistas que luego se trasladaran a
Nueva York en las últimas vanguardias. París ha tenido al menos tres bohemias; la
primera es la de los pintores impresionistas (Tolouse Lautrec, Monet, Manet,
Millet, Pisarro, los puntillistas; Seurat, Signac)y escritores como el genial
niño prodigio Rimbaud, Verlaine, Mallarme, Apollinaire o el mismo Porust que es
a literatura lo mismo que el impresionismo en pintura.
La segunda se produce en los años
20. Escritores americanos como Hemingway o Scott Fitserald van a París. El
autor del Gran Gatsby viene con su mujer Zelda que acaba loca y la tienen que
ingresar. Les gustaba el pintoresquismo de París. Allí coinciden con el
malagueño Picasso que pinta un retrato de Gertrude Stein, una gorda y hombruna
pintora y escritora pero sobretodo mecenas de artistas. Ella dice; no me
parezco, a lo que responde Picasso; ya te parecerás. En ese ambiente se
desarrollan muchos ismos y vanguardias como el dadaísmo, surrealismo,
futurismo, la pintura metafísica, el cubismo, el arte abstracto… a Duchamp se
le considera padre del arte dadá ya que firma un manifiesto con Tristan Tzara
en el Cabaret Voltaire en Zurich, origen del movimiento dadá. Es conocida la
anécdota de que el nombre surgió por elegir con una pluma al azar en un
diccionario y salió la palabra dadá, balbuceo de niño. También en Italia
Marinetti firmaba el manifiesto futurista. Duchamp pinta bigotes a la mona
lisa, quiere hacer anti cultura, contra cultura. Vende mierda de artista y aire
de París, retrata a un hombre subiendo las escaleras desde un punto de vista
cubista. Magritte dibuja una pipa al lado de la palabra pipa, esto no es una
pipa porque en efecto es la representación pictórica y lingüística de la cosa
real que es la pipa. Duchamp será un personaje importante en París, allí juega
al ajedrez con sus oponentes. Los americanos se sienten muy atraídos por París.
La Judía yanqui rica Silvia beach es una mujer adinerada en 1903 y visita la
ciudad del amor. Es protectora y mecenas de Picasso Cézanne y Matisse. Con
estos dos empieza el arte cubista, al dividir el motivo figurativo del cuadro
en varios puntos, recuadros, formas geométricas. Picasso y Matisse no se podían
ni ver. Es también una escritora de vanguardia Alis toclas que fue la amante femenina
de Gertrude Stein. De esta mujer se habla mucho en la novela Paris era una
fiesta de Hemingway. Hemingway es el autor realista y aventurero por antonomasia
de EEUUU. Autor de por quién doblan las campanas, el Viejo y el mar, Adiós a
las armas, Tener y no tener o las nieves del Kilimanjaro, Fiesta (sobre los san
fermines de Pamplona). Del 20 al 23 es muy prolífico. También escribe la
autobiografía de alias toklas en el 33. Es amante y secretaria de Gertrude Stein.
Todo esto aparece en la película medianoche en París donde Woody Allen que retrata
ese tiempo en que París era una fiesta.
Silvia Beach escribe la historia de los ancestros americanos, se queda
de noche escribiendo hasta las tantas. Gertrude Stein era gorda, lesbiana y fea.
Ante un retrato de Picasso dijo que no se parecía nada. Ya te parecerás dentro de unos años, le respondió
Picasso. También la dijo que ella era un hombre feminista, porque era una marimacho.
Gertrude stein y james Joyce no se podían ver, ambos querían ser el centro de la
vanguardia literaria. Además de Yoyce y Virginia Woolf, a París irán más
adelante los autores eróticos Henry Miller y Anais Nin. Ella escribe allí su
delta de venus, sus diarios y memorias eróticas. También tuvo Getrude peleas
con Hemingway al que deja de tratar.
En la universidad americana y de parís coincidieron muchos mas
artistas como jon dos pasos. Tenían una idea formalista y romántica de la forma
de composición literaria. Los críticos juzgaban a estos artistas. Uno de los
experimentos surrealistas era crear con lápiz y papel la escritura automática,
y dejarse llevar escribiendo lo primero que salía. Y luego volver a empezar el acto
creativo, no dictado en parte por el consciente sino por el inconsciente. Repetían
varias frases, elegían las palabras por azar y luego con ello hacían
experimentos formales, las frases van girando, no escriben con ideas o temas de
lo que van a tratar sino con palabras, con cadenas sonoras y escritas,
visuales. Se escribe con palabras y no con ideas. La literatura se debe dejar a
la improvisación, debe ir surgiendo por aquello que los románticos llamaban
inspiración. Así se escribió la novela 3 vidas en 1903. Vagando por la calle Hemingway
reflexionaba: cuando te sientes un escritor es que lo has fastidiado. Él quería
dar la imagen y hacerse un hombre maduro y duro. París estaba lleno de novelistas,
críticos y poetas como Robert
frost o sedburn Anderson.
Los Americanos que llegaban a París estaban obsesionados con el sexo, la muerte
y la violencia brutal. EEUU carece de la tradición humanista europea pero
aporta espontaneidad, ación en la lietratura. Por como un hombre habla
de sexo se puede adivinar si es impotente o gay y así por ejemplo analizan los
poemas de pasión, posesión y potencia total de Byron. El romanticismo se pone
de moda con los surrealistas pues comparten muchas características; la
imaginación y no la razón, los sentimientos y los sentidos, la inspiración, el
amor loco (titulo de un libro de Andre Bretón, autor de Nadja), la creencia en
cosas sobre naturales, en La vida después, en el amor ideal, la libertad política…
el hombre se rebela a su sociedad como Edipo consultando a la esfinge. Los escritores
jóvenes quizá no tengan integridad o experiencia pero aportan rebeldía a la
literatura y esto es lo que hizo por ejemplo el joven e iluminado Rimbaud con
su temporada en el infierno. No sólo eran sus poemas, era su relación con
Verlaine, era su forma de trasgredir la literatura y la cultura, él ser super
dotado, extravagante…en París llegan los nuevos avances de la
industrialización; los trasportes (el tranvía, el tren, el metro), los nuevos
taxis que pasaban, la electricidad, el telégrafo y luego el teléfono. Los
americanos habían copiado de los franceses la revolución francesa pero aún
tienen mucho que aprender de la vieja Europa y esta de ellos.
En la librería de
Silvia Beach Shakespeare y compañy en Londres habían publicado los grandes de
la generación de Blosbury (Joyce con su Ulises y Virginia Woolf) Se copia esta
idea de las librerías de viejo, las librerías que aportan un espectáculo teatral,
o musical o de magia y recitales de poesía y presentaciones de libros y
cuadros. Los cabarets en París están de moda, los músic halls, el moulin rouge
con su baile del can can, las casas de citas de prostitutas, los bares de
borrachos y bohemios en Monmartre y Monparnasse. La ciudad de la luz se llena
de lucecitas de los nuevos bares y salones de música que incorporan la energía eléctrica.
En esas librerías se prestan libros (siempre que los devuelvan), se conocen
escritores entre ellos, hacen concursos, asociaciones (pagando una cantidad
irrisoria simbólica)… es el tiempo de los mecenas. Es la belle epoque y los felices años 20. Hemingway retrata un
tiempo que se esta muriendo. Él mismo está enfermo, es un alcohólico, se pega
un tiro en la boca. Se había encerrado en su mundo, apegado así mismo y su
parte oscura pudo con él. Fue más que un escritor, un aventurero, un periodista
de acción por vocación. Incorpora la ación en sus novelas, caracterizadas por
frases cortas y sencillas al modo de Pio Baroja. No hay nada del refinado y
amanerado Proust en él. Si Porust simboliza la literatura homo erótica y
homosexual, Hemingway será el “hombre macho”. Su estulo es claro, conciso, y sencillo.
Aún podemos visitar estos cafés, los escritores están muertos pero vivos en el
recuerdo. Podemos tomar un café o una copa de absenta y mandrágora con ellos, antisépticos
en bares como el café rojo donde se sentaba Sartre con su compañera Simone de
Beavour. Cenaremos aquí, haremos el amor, he tomado un
cortado, ¿me querrás?, yo a ti no, leeremos todos los libros del mundo y no
tocaremos madera en un piso con madera por todos lados. Un joven toma una copa,
ha dejado el curro, está escribiendo una novela Es un fragmento de París
es una fiesta. En la sociedad puritana el sexo explicito de muchas de las
nuevas novelas escandaliza a los bien pensantes. Los bohemios trataban de
epatar a la burguesía con sus provocaciones y perversiones. El mismo Ulises es
una novela con una parte importante de sexualidad y erotismo. Si Porust retrata
las costumbres, vestidos y comidas de la burguesía parisina durante el día,
Hemingay retratará sus diversiones nocturnas, su bohemia. Los bohemios podían
estar días sin comer pero se gastaban todo el dinero en lucir caros vestidos
extravagantes y en comprar cuadros no considerados que luego se harían famosos.
COLETTE vivió de 1905-25. Conoció
a Picasso, al fino Yoyce y al bruto Hemingway. Es la primera mujer en la
academia francesa. Escribe libros y sus maridos los firma hasta que se separan.
Tenía muchos libros y gatos, vivía sola. Fue actriz de music hall, estuvo hasta trabajando en un instituto de belleza.
Tuvo cuatro maridos. Era bisexual. Fue amiga o amante de Coco Channel y periodista en Francia. En
el 20 escribe querido o cherí, la historia de amor entre una mujer madura y un
jovencito. Era una Greta Garbo vestida
de hombre que jugo a escandalizar a París con sus historias de mujercitas
frágiles pero liberadas y modernas. Era amiga de la lesbiana Gertrude Stein y
también trabajó en la costura en un taller y de mecanógrafa. Una frase suya es
que cuando se ama se duda de todo. Formo parte de la generación perdida
americana- parisina de los años 20 junto a Gertrude Stein y Dorothy Parker, fueron los padres (o mejor
dicho las madres) de la generación Beat; Kerouak Ginsber (en los años 50-70)..
y a su vez habían sido hijas del grupo de Bloosbury, de Virginia Woolf y su
feminismo dentro de una sociedad puritana y victoriana- eduardina que rechazaba
ese feminismo de las sufragistas. Colette fue coetánea de escritores como Steinbeck, Jon Dos Passos, y Robert Fross con los que coincidió en ese París de era una fiesta. ahora Enrique Villa Matas ha sacado la novela; París ya no es una fiesta, contándonos los estertores últimos de esa bohemia moribunda y en decadencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario